Bien el obispo de Santander

Y todavía peor cuando la máxima jerarquía hace seguidismos de estas nuevas modas de inspiración diabólica y para disimular y para parecer muy majos en vez de hablar de Dios, de Cristo y de lo que deberían se ponen pesados con lo de contaminar, la madre tierra que es una idolatría y demás sandeces a las que han entrado en estos años obispillos de poca personalidad, congregaciones que ya estaban arruinadas y etc.
La famosa Agenda 2030 tiene trampa porque es un camelo que lo que busca es poner la riqueza en mano de cuatro que pretenden arruinar a la clase media, a la pequeña empresa, al autónomo y que busca que los trabajadores sean precarios y lo que es peor que no tengan raíz y por eso busca borrar la identidad, lo que se es y para ello tienen que hundir Naciones porque ese concepto es un valladar. Tienen que hundir religiones para que sea sustituida por ellos en un sincretismo irracional y ridículo que pone al hombre encima de todo pero en el fondo busca su destrucción.
Es una filosofía inspirada sin duda por el Anticristo o por lo menos hace de precursor de esta figura por todo lo que implica en desdoro del hombre que parece no pintar nada. Las avispas, cualquiera animal tiene un estatus mayor que el hombre, en donde por una falsa piedad mal entendida se supone que es mejor que no viva pues se le perjudica al nacer de mil maneras y ya no digamos nada del aborto; después llega otra criba que es no saber ni que se es hombre, mujer , trans, nada o todo a la vez con lo que matan la vida en la mejor época y por fin pues la eutanasia. Diabólico todo y perjudicial para sobre todo el hombre europeo y occidental que es el que como vaya por esta senda caerá como cayó el Imperio Romano.