| 31 marzo, 2023
Dos Prietos para residenciales. El auxiliar de Santiago para aquella archidiócesis y el vicario general de Córdoba para Alcalá y dos auxiliares para Sevilla: Teodoro León, nombre que ya había publicado hace días Diario de Sevilla, y Ramón Valdivia. Los tres primeros parecen aceptables. El de Santiago sigue una tradición que inauguró Rouco, que pasó de auxiliar a titular, continuó Barrio y ahora repite Prieto. Dos auxiliares para Sevilla serían más sorprendentes. ¿Propuso los dos nombres el arzobispo o le dieron gusto en uno y le impusieron el otro?
P. D.: Me dicen que el segundo de Sevilla no es aceptable sino muy aceptable y que no parece una imposición a Saiz Meneses
«…pasó de auxiliar a titular». Correctamente habría que decir : «…pasó de auxiliar a ordinario u obispo diocesano».
De hecho los auxiliares son «obispos titulares», o sea tienen sólo diócesis en título, de esas inexistentes.
Ayer se cumplió un año de llamada a Dios de nuestro obispo, Mons. Pardo. Gerona es ahora la vacante española más antigua y parece que si hoy hay nombramientos tampoco nos va a tocar. Otra Semana Santa sin obispo, como en 1972-73.
En la oración de los fieles seguimos orando «Por el obispo que todos esperamos…»
Me alegro mucho por D. Antonio Prieto. Tenía madera de Obispo desde 2008 que le conocí.
A mi parecer, habría que acabar con los obispos auxiliares, que es un invento bastante reciente en la vida de la Iglesia, Igualmente, de acuerdo con Monseñor Aguer, acabar con lo de obispos eméritos a los 75 años, y más toda´vía los obispos -«cancelados». Me parece también que habría que acabar con las Conferencias Episcopales y volver a las Provincias Eclesiásticas. Ya se ve lo nefasto que es la Conferencia Episcopal alemán. El Vaticano II ha introducido un sin fin de reuniones. En fin, una vez que se introduce tales engendros, es casi imposible eliminarlos.
No es la primera vez que Sevilla contará con dos obispos auxiliares, el cardenal Buenos Monreal los tuvo al mismo tiempo, don Juan Antonio del Val, vicario general con residencia en Jerez de la Frontera, y don Antonio Montero. Los dos recibieron la ordenación episcopal en una ceremonia en la catedral de Sevilla.
Muy aceptable don Ramón Valdivia, de una familia católica tradicional, será un buen obispo.
Pobriño D. Francisco. Lo que va a tener que bregar aquí…
Pues a mi me parecen todos los nombramientos sorprendentes. El auxiliar De Santiago supera en la terna al obispo de Orense y al de Lugo. Y lleva un año de obispo. Nadie sabe con que mérito.
Respecto a la sede complutense sorprende que no se haga residencial a Jesús Vidal. Algunos lo daban por hecho. ¿Se tendrá que conformar con Ávila o Palencia, que se la adjudicaban no hace mucho? El vicario general de Córdoba toma buen destino, quizá demasiado para un obispo novel.
En cuanto a Sevilla sorprende que sean dos. En Murcia también han pedido auxiliar y Valencia tendría que pedirlos.
No entiendo las prisas en cubrir Santiago y Alcalá. Pienso que son más urgentes Gerona y Ávila (esta incluso fácil, por ser pequeña y no problemática; ruego a los abulenses no se sientan despreciados por mis palabras; son pequeños pero enormes en la fe y en la belleza de su provincia). Lo de dos auxiliares para Sevilla me gusta mucho, pero añadiría uno para Oviedo y otros para Orihuela, Pamplona, Zaragoza, Málaga, Córdoba y otro par para Valencia.
Gerona es que no la quiere nadie y por eso no consiguen cubrirla. El nuevo obispo de Alcalá, por su perfil, es una victoria clara de don Bernardito frente a la dichosa Comisión. Y el segundo vicario general de Córdoba consecutivo que llega a obispo diocesano. Dos auxiliares de golpe para Sevilla parecen muchos pero no lo son si tenemos en cuenta la gran necesidad de banquillo episcopal que hay en España. Y por cierto, en IrReligión Digital están muy enfadados porque Chámame Pepe no haya sido nombrado para Mérida.
Corrección: Antonio Prieto es el cuarto vicario general de Córdoba consecutivo que llega a obispo, después de Mario Iceta, Santiago Sierra y Francisco J. Orozco.