Mucho se guardará la jerarquía de enseñar con todos los medios que tiene las hazañas de la izquierda con estos inocentes. Ya saben, no hay que crispar. Mejor mantenernos en la ignorancia y seguir votando a partidos de izquierdas que abrir los ojos y no votarlos nunca jamás.
El nivel de cobardía y hasta, casi, de vileza, al que ha llegado la Iglesia española -la Jerarquía, sobre todo- es lamentable y triste. En el caso de estos mártires, todavía titulan, granadinos, para después, añadir, del siglo XX. En la Iglesia, uno conoce, los mártires Cristeros, los santos protomártires de la Iglesia Romana, los santos mártires de la persecución de Diocleciano, etc. y otros muchos ejemplos. Pero a los gloriosos mártires de la persecución religiosa en España 1936- 39, se evita nombrarlos así, como sería lo correcto. Señores obispos, nuestros mártires, no han dado la vida por el siglo XX; han dado su vida por Cristo Jesús y por la Iglesia. Entérese bien y hablen con corrección y veracidad.
Mi comentario, va en la dirección de apuntar al cartel anunciador de las Beatificaciones. Lo hago extensible a los carteles anunciadores de estos eventos, que eufemisticamente y cobardemente, denominan Mártires del siglo XX. Un saludo.
Mártires de la diócesis de Granada que no granadinos todos. El beato presbítero Miguel Romero Rojas era natural de Coín (Málaga). Una nutrida representación de su pueblo, el mío, acude ese día a la Catedral de Granada.
Es el beato más joven de este grupo, 24 años. Apenas dos meses después de ser ordenado sacerdote fue brutalmente asesinado en su pueblo y en él descansa para la eternidad.
¡Gloria a los mártires de Cristo!
En Loja, como en casi todas las poblaciones dominadas por el Frente Popular de la II República, los asesinatos de religiosos fueron acompañados del incendio y saqueo de todos los templos y del asesinato de laicos, que suelen olvidarse. Debe tenerse en cuenta que el asesinato de laicos es casi seguro que superó los 100.000, pues en las relaciones nominales de asesinatos de cada localidad, la cifra de religiosos no llega al 7 ó 8% del total y simplemente por el método indirecto los casi 7.000 religiosos asesinados significaría una cifra total de asesinados superior a 100.000, que gracias a la Memoria, se están inhumando ahora de fosas comunes, aunque se atribuyan a asesinatos de la ¿extrema derecha? Muchos de los asesinados laicos son verdaderos mártires, ya que su asesinato se debe en muchos casos a motivos religiosos o eran el broche de las acusaciones.
Recordarlos y venerarlos. En ellos la gracia se derramó torrencialmente y de ellos esperamos también que nos alcance. Por la salvación de nuestra patria y el triunfo de la fe también en la presente generación.
Que manera sutil de decirles: Querés memoria histórica? Ahi tenes Memoria Histórica. Chapeau!
Mucho se guardará la jerarquía de enseñar con todos los medios que tiene las hazañas de la izquierda con estos inocentes. Ya saben, no hay que crispar. Mejor mantenernos en la ignorancia y seguir votando a partidos de izquierdas que abrir los ojos y no votarlos nunca jamás.
El nivel de cobardía y hasta, casi, de vileza, al que ha llegado la Iglesia española -la Jerarquía, sobre todo- es lamentable y triste. En el caso de estos mártires, todavía titulan, granadinos, para después, añadir, del siglo XX. En la Iglesia, uno conoce, los mártires Cristeros, los santos protomártires de la Iglesia Romana, los santos mártires de la persecución de Diocleciano, etc. y otros muchos ejemplos. Pero a los gloriosos mártires de la persecución religiosa en España 1936- 39, se evita nombrarlos así, como sería lo correcto. Señores obispos, nuestros mártires, no han dado la vida por el siglo XX; han dado su vida por Cristo Jesús y por la Iglesia. Entérese bien y hablen con corrección y veracidad.
Monseñor Maseraro en la Misa sí ha dicho que habían dado la vida por Jesucristo en la persecución religiosa de 1936.
Mi comentario, va en la dirección de apuntar al cartel anunciador de las Beatificaciones. Lo hago extensible a los carteles anunciadores de estos eventos, que eufemisticamente y cobardemente, denominan Mártires del siglo XX. Un saludo.
Mártires de la diócesis de Granada que no granadinos todos. El beato presbítero Miguel Romero Rojas era natural de Coín (Málaga). Una nutrida representación de su pueblo, el mío, acude ese día a la Catedral de Granada.
Es el beato más joven de este grupo, 24 años. Apenas dos meses después de ser ordenado sacerdote fue brutalmente asesinado en su pueblo y en él descansa para la eternidad.
¡Gloria a los mártires de Cristo!
En Loja, como en casi todas las poblaciones dominadas por el Frente Popular de la II República, los asesinatos de religiosos fueron acompañados del incendio y saqueo de todos los templos y del asesinato de laicos, que suelen olvidarse. Debe tenerse en cuenta que el asesinato de laicos es casi seguro que superó los 100.000, pues en las relaciones nominales de asesinatos de cada localidad, la cifra de religiosos no llega al 7 ó 8% del total y simplemente por el método indirecto los casi 7.000 religiosos asesinados significaría una cifra total de asesinados superior a 100.000, que gracias a la Memoria, se están inhumando ahora de fosas comunes, aunque se atribuyan a asesinatos de la ¿extrema derecha? Muchos de los asesinados laicos son verdaderos mártires, ya que su asesinato se debe en muchos casos a motivos religiosos o eran el broche de las acusaciones.
Recordarlos y venerarlos. En ellos la gracia se derramó torrencialmente y de ellos esperamos también que nos alcance. Por la salvación de nuestra patria y el triunfo de la fe también en la presente generación.