Catalunya, vaya planazo

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Se trata de encontrar una solución al rompecabezas catalán. Un tsunami social puesto en marcha hace más de treinta años bien arropado por unos medios de comunicación hábilmente utilizados esta convirtiendo a los dirigentes políticos de ciu en auténticos peleles. Ciu se ha comprometido a realizar un referéndum entre el pueblo de Cataluña acerca de una posible declaración de independencia. Eso así explicado es ilegal y por tanto imposible de llevar a la práctica sin generar un grave conflicto que a nadie conviene.Sin embargo el Gobierno,por llamarle de alguna forma,de Rajoy debe incorporar al tablero de juego alguna pieza que permita una negociación que pueda salvar la cara de los convergentes. Una consulta no vinculante avalada por una «ley catalana de consultas» puede ser llevada por el gobierno español al Constitucional buscando un rápido nihil obstat que permita su celebración. Esto facilita a ambas partes «seguir jugando» sin tirar el tablero por los aires. Esta situación produciría la inmediata ruptura del partido de Mas con los radicales republicanos y podría incluso reiniciar el diálogo con el PP de cara al apoyo que sin duda los populares necesitarán en la próxima legislatura.El precio no puede ser otro que un pacto fiscal que limitaría la solidaridad e incrementaría la capacidad de gestión de la Generalitat catalana. La tan cacareada ruptura de Durán i Lleida quedaría una vez más en agua de borrajas ante la realidad de la falta de apoyo electoral del partido democristiano. Así qué el camino está trazado: consulta no vinculante,con buenos resultados para los españolistas,pacto fiscal,gobierno en Madrid con el apoyo nacionalista de nuevo y a esperar que el empuje de la Asamblea Nacional de Cataluña no desbarate tan bienintencionados planes. El nuevo rey es una buena excusa para darle a todo esto una puesta en escena creíble y lo menos irritante posible para las levantiscas bases nacionalistas.Esto es lo que hay y lo que seguramente vamos a ver en breve.

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