Dios nos mandó al Padre Pío como una luz para asechar a las tinieblas de nuestro tiempo y ofrecer esperanza a los atormentados católicos

HOY, 23 DE SEPTIEMBRE, CELEBRAMOS LA MEMORIA DE SAN PIO DE PIETRELCINA
|

Vicente Montesinos

 

 

<

 

 

 

Celebramos hoy, 23 de septiembre, la memoria de este gran santo de nuestro tiempo.

“En cuanto a mí, Dios me libre de gloriarme si no es en la cruz de nuestro Señor”, repetía.

El Padre Pío derramó sin parar los tesoros de la gracia que Dios le había concedido con especial generosidad a través de su ministerio, sirviendo a los hombres y mujeres que se acercaban a él, cada vez más numerosos, y engendrado una inmensa multitud de hijos e hijas espirituales.

Este es uno de esos hombres extraordinarios que Dios envía a la tierra de vez en cuando para la conversión de los hombres”, dijo ya al Papa Benedicto XV un Obispo de Uruguay luego de visitar al Padre Pío.

Con esas palabras, el Prelado supo dar a la figura del fraile capuchino toda su dimensión: es la visita que Dios hace a la Humanidad en determinadas épocas, para indicarle el camino a la salvación.

Con su inmensa popularidad y sus asombrosos dones sobrenaturales, San Pío de Pietrelcina fue, por encima de todo, un alma crucificada, ofrecida como víctima voluntaria por el mundo, sumida en un permanente coloquio con el Señor.

De esas íntimas profundidades emerge la fuerza con la cual llegó a identificarse por entero con Cristo. Los estigmas de la Pasión son el sello exterior de esa unión mística entre el Creador y su criatura.

¡Cuan necesario hoy su ejemplo y espiritualidad, y cuanto la odian los enemigos de la Iglesia!

Os dejo una oración al Padre Pío, y pidámosle incesantemente intercesión por la Iglesia y el mundo, en estos cruciales momentos.

 

 

 

ORACION

 

Bienaventurado P. Pío, testigo de fe y de amor. Admiramos tu vida como fraile Capuchino, como sacerdote y como testigo fiel de Cristo. El dolor marcó tu vida y te llamamos “Un crucificado sin Cruz”.

El amor te llevó a preocuparte por los enfermos, a atraer a los pecadores, a vivir profundamente el misterio de la Eucaristía y del perdón.

Fuiste un poderoso intercesor ante Dios en tu vida, y sigues ahora en el cielo haciendo bien e intercediendo por nosotros.

Queremos contar con tu ayuda. Ruega por nosotros.

Lo pedimos por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

 

 

 

—————————————————————

Puedes ver más contenidos en http://infovaticana.com/blogs/adoracion-y-liberacion

Si quieres contactar conmigo puedes hacerlo en [email protected]

Si quieres recibir en tu teléfono cada día los artículos de Adoración y Liberación; reflexiones, mensajes católicos y meditaciones para la lucha diaria en la que nos encontramos; manda un e-mail a [email protected] indicando tu nombre, edad, si eres consagrado o seglar; país de origen y número de teléfono móvil; y serás dado/a de alta en nuestra lista “Adoración y Liberación”. En cumplimiento de la ley de protección de datos, y en aplicación del nuevo reglamento europeo, toda persona que recibe comunicaciones de Adoración y Liberación ha debido prestar su consentimiento inequívoco previo; y en cualquier momento cualquier persona podrá darse de baja y solicitar la modificación y/o cancelación de sus datos de carácter personal.

Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *