El cardenal Robert McElroy, recientemente nombrado arzobispo de Washington, D.C., realizó su primera aparición pública desde su toma de posesión en una conferencia sobre política migratoria, donde ofreció una reflexión espiritual y moral sobre la situación actual en Estados Unidos.
Durante el evento titulado «Enseñanza social católica y trabajo con migrantes y refugiados en tiempos de incertidumbre», organizado por el Servicio Jesuita a Refugiados (JRS) EE. UU. y el Centro de Estudios Migratorios de Nueva York, McElroy destacó la importancia de la compasión y la justicia en el tratamiento de los migrantes.
“Tenemos que recordar que el llamado de Jesús es constante: estar siempre atentos a las necesidades y al sufrimiento que nos rodea, percibirlo y luego actuar”, afirmó McElroy. Además, advirtió que todos, de alguna manera, podemos contribuir al sufrimiento ajeno cuando priorizamos nuestros propios intereses por encima de los demás, lo que definió como «el ladrón dentro de cada uno de nosotros».
Según reporta Catholic News Agency, en su discurso, el cardenal criticó la suspensión de la ayuda exterior para programas humanitarios, describiéndola como «inconcebible desde cualquier prisma del pensamiento católico». También condenó las políticas de deportación masiva, afirmando que estas generan miedo y desarraigo entre los migrantes que han construido sus vidas en Estados Unidos durante décadas.
McElroy hizo un llamado a la solidaridad entre católicos e inmigrantes, instando a no solo defenderlos, sino a apoyarlos activamente. Relató cómo en su tiempo en la Diócesis de San Diego conoció a madres que se alertaban mutuamente ante la presencia de agentes de inmigración cerca de las escuelas de sus hijos.
Reconociendo la importancia de la seguridad fronteriza, el cardenal sostuvo que esta debe ir acompañada de un trato digno y de una política de asilo y refugio generosa. “Como nación, tendremos que tomar una decisión”, concluyó McElroy. “El camino de la cruzada y la deportación masiva no puede ser seguido en conciencia por quienes se llaman discípulos de Jesucristo”.
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La mayoría de católicos, con buen criterio, han votado a Trump, porque él promueve los valores cristianos, combatiendo el aborto y la ideología de género, protegiendo la libertad de los cristianos, construyendo la paz internacional (vease por ejemplo la próxima finalización de la guerra de Ucrania contra Rusia), etc.
Y en cuanto a su política sobre inmigración, también es coherente con la moral católica, ya que con ella no vulnera ningún mandato divino, sino que, como dice Sto. Tomás de Aquino, en cumplimiento del deber moral del príncipe que ha de velar por el bien de sus súbditos, el Presidente Trump está defendiendo su frontera y la paz en su nación.
Europa debería tomar ejemplo, pues la política de fronteras abiertas está provocando la imvasión musulmana de nuestro continente, y nos está acarreando delincuencia, conflicto social, empobrecimiento, y para un futuro persecución a los cristianos.
Pero la «Iglesia de Francisco» tergiversa las cosas, porque ha abandonado la doctrina católica y ha abrazado la ideología del nuevo orden mundial. Sobre estos pastores equivocados advierte la Biblia: «Ay de los que llaman bueno a lo malo y malo a lo bueno.» (Is 5,20)
Es justo lo que usted hace desde tiempos ah, lo contrario al cristianismo. Usted es un xenofobo y hasta que no cambie no podrá entrar en el reino de los cielos.
Mentira.
Caira…
Agafa un cagallò i estira
Pues sigue siendo más mentira, lo escriba en ese dialecto regional o en suahili.
«sigue siendo más mentira» = «sigue siendo mentira».
[Se sobreentiende, pero mejor aclararlo para que se entere el Probe Migue, que al ser catalán del sur no domina bien el español].
Concuerdo 100%
Defensor de la comunión de adúlteros y de connotados políticos abortistas, defensor de las parejas transexuales, encubridor de abusos sexuales, que más se puede decir de este pseudo cardenal discípulo del cardenal homosexual y pederasta McCarrick? ESTA EX COMULGADO y no es necesario que lo decrete ninguna autoridad eclesial, él mismo al igual que toda esa banda de sabandijas del clan McCarrick se han auto excomulgado.
The Lepanto Institute ha venido publicando por años los escandalosos financiamientos de la conferencia episcopal de EEUU a grupos abortistas, lgtbi, ONG’s que reparten píldoras abortivas en África, es decir es una mafia! El obispo Viganó los ha denunciado con lujo de detalles; como importaban jóvenes homosexuales de Colombia para ordenarlos y tenerlos de concubinos, es un verdadero asco lo que está ocurriendo, y me alegro por Trump que les quitó los dineros conque delinquían, es que son al igual que Francisco, partidarios del PSOE y podemitas americano; los demócratas.
Suspender las «ayudas exteriores a programas humanitarios» (entiéndase, teatro trans en Bolivia o el enfoque de género en Uzbekistán) es la única opción concebible para un católico, desde cualquier punto de vista.
Porque promover las ideologías contranatura, la muerte (aborto) o la esclavitud (inmigración ilegal masiva) no es de recibo para cualquier católico. Y ello es especialmente urgente cuando esas iniciativas se disfrazan de causa solidaria o humanitaria.
¿La cruzada?
Pues yo seré un anónimo más del pueblo, pero voy a muerte con Trump y no me achantará en mi voto a Abascal toda esta mamandurria con faldones.
Trump no es el mesías. No es perfecto, es un hombre de negocios metido en política, y? lo mismo podría decirse de muchos cardenales, obispos y sacerdotes, NO son el mesías. Ya vale de buenismo inmigratorio que no soluciona nada y empeora la paz de los países que lo apoyan. Europa es un buen indicador de lo que sucede cuando la idiotez se impone. Otra muy oportuna es recordar que TODA la Sagrada Escritura conforma y sostiene la fe de la Iglesia, dicho esto propongo un repaso a los textos veterotestamentarios, de no hacerlo pecamos gravemente de ocultación de nuestra propia esencia, de nuestro propio ser. No me sorprende en absoluto la simpleza de McElroy, y advierto que su «cruzada» personal se parece más a la del mal perdedor que al custodio de razones.
«La Iglesia reconoce a todo hombre, en el doble aspecto de la posibilidad de salir del propio país y la posibilidad de entrar en otro en busca de mejores condiciones de vida. Desde luego, el ejercicio de ese derecho ha de ser reglamentado, porque una aplicación indiscriminada ocasionaría daño y perjuicio al bien común de las comunidades que acogen al migrante. Ante la afluencia de tantos intereses al lado de las leyes de los distintos países, es preciso que existan normas internacionales capaces de establecer los derechos de cada uno, para impedir decisiones unilaterales que podrían ser perjudiciales para los más débiles»
San Juan Pablo II
Al mismo tiempo, los Estados tienen el derecho de regular los flujos migratorios y defender sus fronteras, asegurando siempre el respeto debido a la dignidad de toda persona humana. Los inmigrantes, además, tienen el deber de integrarse en el país de acogida, respetando sus leyes y la identidad nacional.
Benedicto XVI
«Para el cristiano el emigrante no es simplemente alguien a quien hay que respetar según las normas establecidas por la ley, sino una persona cuya presencia lo interpela y cuyas necesidades se transforman en un compromiso para su responsabilidad. La respuesta no hay que darla dentro de los límites impuestos por la ley, sino según el estilo de la solidaridad»
Estas palabras son de San Juan Pablo II, año de 1996. Creo que pueden aportar algo de luz frente a tanta cerrazón xenófoba y hasta racista que impera en algunos gobernantes y en no pocos que se dicen cristianos.
Ya está otra vez TrollAnticatólico25 dando la tabarra con su cantinela de siempre y nombrando a JPII para sostener justo lo opuesto a él, para así promocionar la trata de seres humanos. Cualquiera diría que los mafiosos o los abortorios le pagan comisión.
Católicum está acusando a su admirado San Juan Pablo II de favorecer a las mafias de la trata de seres humanos y la promoción de las clínicas abortivas, símplemente por abogar por la caridad con el prójimo. Pero estás en tus cabales, no te das cuenta de que estás enfermo, usted no es un cristiano, es un nazi como el cura que no está en sus cabales. Pero quien os comió el coco, sois jóvenes, de donde viene el odio. Bueno lo de joven calculo unos 50 tacos, no te creas que yo tengo muchos mas. Los carlistas tenemos fama de longevos, aunque yo ya estoy preparado para partir, estoy harto de este mundo, ya hice lo que tuve que hacer, he combatido bien en la batalla por la fe. Pero vayamos al grano tú que predicas y corriges a todo el mundo no te ves la viga propia en tu ojo. Ve al oculista, es urgente. Siempre con Mateo 25
«está acusando a su admirado San Juan Pablo II de favorecer a las mafias de la trata de seres humanos y la promoción de las clínicas abortivas»
No sea mentiroso, hombre: ¿no tiene bastante con ser putero (confeso)? Está claro que cuando uno se tira por la pendiente de la inmoralidad, una cosa lleva a la otra, agrandando la bola de nieve.
JPIl decía justo lo opuesto a usted y al Indecente25. En vez de limitarse únicamente a hacer propaganda a traficantes de seres humanos y clínicas abortistas, debería leer lo dicho por JPII (se lo ha transcrito Alejandro):
«el ejercicio de ese derecho [a emigrar individualmente] ha de ser REGLAMENTADO, porque una aplicación INDISCRIMINADA [la actual, que es una invasión en toda regla] ocasionaría daño y perjuicio al BIEN COMÚN de las comunidades que acogen al migrante».
Vamos, igualito que la criminal inmigración ILEGAL que ustedes promocionan.
Cualquiera con una mínima cultura sabe distinguir entre «nombrar» a alguien y citar textualmente a alguien. La cita textual es de San Juan Pablo II en el mensaje para la Jornada Mundial de los Migrantes (así se llama oficialmente) de 1996.
San Juan Pablo II, al que en su comentario esperpéntico acaba de acusar de promover la trata de seres humanos, y de ser comisionado por los mafiosos y los abortorios….
Te pasaste, macho!!!
«Cualquiera con una mínima cultura sabe distinguir…»
Eso ya le excluye a usted, Mostrenco25, que además de la pedrada y la posesión diabólica, carece de cultura (no es mínima: es nula).
«San Juan Pablo II, al que en su comentario esperpéntico acaba de acusar de…»
¿Ve como a usted, además de un hervor, también le faltan estudios? No se entera usted de nada: ni de lo dicho por JPII (cuyas palabras recorta convenientemente porque le contradice a usted), ni de lo dicho por mi. No puedo «acusarle» a usted y a JPII de lo mismo, pues ambos sostienen justo lo opuesto. Y no digamos ya BXVI, que le da el tiro de gracia a su promoción del crimen: «los Estados tienen el derecho de regular los flujos migratorios y defender sus fronteras». Tanto JPII como BXVI condenaron la inmigración ILEGAL, que es la única que promociona usted (lo legal le da alergia). Le dije que había pinchado en hueso, Sinvergüenza25. Pero como usted es masoca…
Lo de siempre: insultar. No sabe hacer otra cosa. Y no se entera de nada, porque a usted el Evangelio le produce repulsión. Dios nos manda amar al hermano sufriente, acogerlo y ayudarlo, sin ponerle etiquetas. Jesús no preguntó a nadie si era ilegal. Es más, prefirió siempre a los que se saltaban alguna de las numerosas leyes, y por eso eran los «ilegales»de su tiempo. Por eso gentes como usted le odiaron y lo mataron.
Ante un hermano necesitado la Iglesia jamás debe preguntarle si es «legal» o no, o qué religión tiene.
Pero pedir que usted se convierta, entienda esto y lo practique, es cierta pedir un gran milagro. Rezaremos por ello