El año pasado Francisco ordenó la visita apostólica del Mons. Hans van den Hende, arzobispo de Rotterdam, y el cardenal Anders Arborelius, arzobispo de Estocolmo, para que prepararan un informe sobre la situación de la Archidiócesis de Colonia.
El cardenal Rainer Maria Woelki, arzobispo de Colonia, de baja de cinco meses tras las acusaciones de encubrimiento, se ha ganado la hostilidad de sus colegas por su postura crítica al camino sinodal. Pero sus enemigos no solo están fuera: en su propio arzobispado, el consejo diocesano se opone casi unánimemente a su regreso.
Al menos, eso es lo que informa el Kölner Stadt-Anzeiger, que ha consultado a los colaboradores de Woelki en la archidiócesis. Estos dudan de que sea conveniente que el arzobispo retome sus funciones, aunque no se trata de una decisión formal. El órgano asesor, o consejo cardenalicio, incluye al actual administrador de la arquidiócesis, Rolf Steinhäuser, los obispos auxiliares Ansgar Puff y Dominikus Schwaderlapp, y el vicario general Markus Hofmann.
Hace tiempo que Woelki y sus principales colaboradores están mutuamente de uñas. Estos últimos reprochan al arzobispo que no les informara de su decisión de no publicar el informe del despacho Westpfahl Spilker Wastl sobre la gestión de denuncias de abusos sexuales por parte de los responsables de la archidiócesis, una decisión que Woelki tomó alegando cuestiones jurídicas antes de encargar un nuevo informe.
El año pasado Francisco ordenó la visita apostólica del Mons. Hans van den Hende, arzobispo de Rotterdam, y el cardenal Anders Arborelius, arzobispo de Estocolmo, para que prepararan un informe sobre la situación de la Archidiócesis de Colonia. Tras la visita, Francisco decidió que Woelki siguiera en el cargo, no sin lamentar los “grandes errores” que se habrían cometido.
El cardenal Woelki pide al Papa que revise su caso de gestión de abusos sexuales
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Es cierto, la persecución comienza. Y comienza en los pocos, poqu´ísimos eclesiásticos que manifiestan su desacuerdo con Don Jorge y su ideología.
Recemos por Wölki y por todos nuestros pastores que de verdad aman a Cristo y quieren servirle, amarle adorarle y obedecerle.
Preparémonos para fortalecernos en la santa Fe católica, porque no tardarán en perseguirnos a todos los demás.
» El mundo Me odia, os odiará a vosotros tambie´n», nos dijo el Maestro. Hoy más que nunca el mundo está en las manos del maligno.
Oremos, oremos, oremos sin desfallecer, para que cuando llegue la hora de dar testimonio, el Espíritu Santo hable por nuestras bocas. Amén.
El Papa es quien le ha restituido en su cargo, después de evitarle cinco meses de sufrimiento. Es la Iglesia alemana quien está a favor de la ordenación de mujeres, del fin del celibato, etc. no el papa Francisco.
GARGOLA
Espere un poco a ver si Bergoglio vive lo suficiente y luego nos cuenta otra vez que Bergoglio no quiere el fin del celibato o la ordenación de diaconisas o o o o…
Esperemos todos, pues.
Asì es, Neila, de acuerdo… Oremos por èl y por los que, como èl, defienden la sana Doctrina, el Magisterio y la Liturgia de dos mil años de la Santa Iglesia Catòlica.
Woelky es un buen cardenal, y por eso la Iglesia profunda lo detesta. Ya dijo el Señor: «Si a mí me han perseguido, a vosotros también os perseguirán.» (Jn 15,20).
Para graves errores, más bien abominaciones, los que cometen pertinazmente quienes se empeñan en hacer su voluntad en vez de la de Dios, sin que nadie les haga ninguna visita apost´´olica ni les aplique el derecho canónico, y eso que incluso se pasan por la entrepierna algún que otro comunicado que les llega del Vaticano.
a jesus no lo recibieron los judios y a mi no me recibieron los cristianos
Juan 1:11 A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron.
Al Señor Cardenal Woelky, siempre le he visto su rostro muy serio, ¿ y cómo no? Sólo tiene enemigos, ésos que deberían ser sus hermanos en la fe, quieren acabar con él,, como con José, aventándolo a un pozo. Sólo que los hermanos de José llegaron a arrepentirse, éstos no creo que ni les interese. Qué pesada cruz carga el Señor Cardenal, que Dios le ayude con ella.
Con semejantes «colaboradores» no necesita ningún enemigo.
Está claro con quien colaboran: con Satanás
Tenemos que asumir que la inmensa mayoria del Episcopado exCatolico es hoy homosexual, homosexualista, panteista, Mason, Comunista, pero no Cristiano.
Por eso el Sud Aca sobrevive con su permantentes fechorias y apostasias.
Estamos en el Exilio a Babilonia.
No fisico, sino interior.
Y mandan los malos