(CNA/Katie Yoder)- Cuando la Virgen se le apareció a San Juan Diego hace casi 500 años, vino ante todo como madre: la madre de Dios, y nuestra madre.
«Escucha, y deja que penetre en tu corazón, mi querido hijito; no te angusties ni te agobies por las penas. No temas ninguna enfermedad o vejación, ansiedad o dolor», se cita a la Virgen de Guadalupe consolando al santo. «¿No estoy yo aquí, que soy tu Madre? ¿No estás bajo mi sombra y protección? ¿No soy yo tu fuente de vida? ¿No estás en los pliegues de mi manto? ¿En el cruce de mis brazos? ¿Hay algo más que necesites?»
La Virgen habló como madre de san Juan Diego y como la madre de un niño Jesús aún no nacido cuando se apareció en la colina del Tepeyac, en Ciudad de México, en 1531. Su imagen milagrosa, impresa en la tilma o manto de la santa, la muestra con una faja negra, indicación de embarazo en la cultura indígena.
Hoy, la Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe en Ciudad de México alberga esa imagen, que es visitada por millones de peregrinos cada año. No sólo es considerada la patrona de las Américas, sino también de los no nacidos. He aquí el motivo.
«Este es nuestro grito: ¡vida digna para todos! Por todos los que han sido concebidos en el seno materno, para los niños de la calle, por Guadalupe!», declaró san Juan Pablo II en la basílica durante su viaje apostólico a México, el 23 de enero de 1999.
Casi 20 años después, en 2018, el Papa Francisco encomendó a la Virgen de Guadalupe «en particular, a quienes esperan el nacimiento de sus hijos.»
«San Juan Pablo II encomendó a su maternal protección la vida y la inocencia de los niños, especialmente de aquellos que corren el riesgo de no nacer», dijo a los peregrinos polacos durante su audiencia general. «Por su intercesión, en este tiempo de Adviento, imploremos el don de los hijos para las familias sin hijos, el respeto a la vida concebida y la apertura de los corazones a los valores del Evangelio».
En la página web de la Conferencia Episcopal de Estados Unidos se ofrece una oración en la que se pide la intercesión de la Virgen de Guadalupe, como patrona de los niños no nacidos, por «cada niño en riesgo de aborto.»
«Ayuda a los futuros padres a recibir de Dios el inestimable regalo de la vida de su hijo», dice la oración. «Consuela a los padres que han perdido ese don por el aborto, y condúcelos al perdón y a la curación por la Divina Misericordia de tu Hijo».
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El padre Ravasi tiene un programa en QNTLC, una entrevista que dice historia milagrosa de la Virgen de Guadalupe,, está muy bonito.
Se ha olvidado decir que ella lleva su pelo suelto, que era propio de las doncellas, y que en su bendito vientre, la flor sagrada en el dibujo del vestido, además ahí hay más luminosidad que en el resto, por éso sobresale el moño negro, signo de embarazo.
Está muy apasionado el relato que hace ése señor sacerdote.
Por si quiere alguien oírlo,,
Se borran las leyendas negras que todo lo santo tiene.
Si una que piensa abortar viera a la Virgen María,, saldrían a flote sus instintos maternales que las mujeres llevamos,, por desgracia algunas como ésas demonios que mataron cruelmente a su niñito, ,,,ésas no.
Santa María de Guadalupe, ruega por todos los niños que están en riesgo de no nacer por decisión de sus madres, y ruega, ante todo, por éstas.
No conocía esa advocación de la Virgen de Guadalupe. La tendré presente
Sacapuntas, ¿ No sabias de la Virgen de Guadalupe?
Pobrecito,, demuestras una suprema ignorancia,,
La imagen de Ella la tienen por toda la tierra.
Lo bueno es que ya supiste 😊👋
Vamos a ver, la Virgen, bajo cualquier advocación, es Madre De Dios y madre nuestra, en especial de los no nacidos, los que más riesgo corren de que sus vidas se vean truncadas por todos los programas abortistas, que pretenden reducir la población la población mundial a 1000 millones de habitantes, como la Agenda 2030, programas apoyados todos ellos por el anti abortista pro abortistas Bergoglio. ¿Falto en algo a la verdad? ¡Ojalá!