Hace 8 años, la Congregación de los Franciscanos de la Inmaculada acabó en la mira de la Santa Sede, pero en todos estos años todavía no se ha aclarado por qué.
De fondo, el papel y los misterios que se ciernen sobre uno de los principales acusadores de la familia religiosa, que firmó el decreto de commissariamento: el obispo José Rodríguez Carballo, quien guió a los Frailes Menores cuando se vieron abrumados por un escándalo económico sobre el que nunca se supo nada más.
Son ya 8 años que los Franciscanos de la Inmaculada siguen bajo la mira de Bergoglio y aún el motivo no es claro. Las acusaciones fueron varias pero, de cierto, hay solo un hecho: los Franciscanos de la Inmaculada eran una grande familia religiosa, con muchas vocaciones, mucha Fe, algún que otro problema– como en las mejores familias-, y una impronta tradicionalista. Ésta última – a esta altura nos queda claro – fue la culpa que desató la guerra sin fin y sin piedad contra ellos. Para destruirlos y también, quizás, para apropiarse de sus bienes.
Es sobre esto, muchos años después, que quisiera gastar unas pocas palabras partiendo de un hecho: el co-firmante del Decreto de comisariamiento de los Franciscanos de la Inmaculada, José Rodriguez Carballo, había desarrollado, del 2003 al 2013, el cargo de Superior General de los Frailes Menores, demostrándose siempre muy cerrado hacia la nueva congregación, mucho más fiel, entre otras cosas, a la pobreza del Pobrecillo de Asís.
Y propiamente bajo su guía, la de Carballo, la Orden de los Frailes Menores había sido envuelta en un escándalo increíble.
Así, el diario La Repubblica del 26 de noviembre de 2015: “Veinte millones de euros habrían sido quitados de los depósitos de la orden religiosa, fruto de entregas, donaciones y alquileres de inmuebles… La denuncia, por parte de la Curia General de los Frailes menores franciscanos, fue presentada en Lugano así como en Roma y Milán. Incluso el Papa habría tenido conocimiento del hecho. Las inversiones que están bajo acusa se remontarían al período en el cual José Rodríguez Carballo, hoy secretario de la Congregación para religiosos, estaba al vértice de los Frailes menores y donde habrían vaciado los depósitos de la orden poniendo en dificultad la organización religiosa”.
La Stampa, en cambio, el 19 de diciembre de 2014, publicaba: “Armas y droga con ofrendas para el Pobrecillo… Desconcierto en Asís por la quiebra de los franciscanos… En efecto, entran en juego cosas increíbles: armas y droga. Las inversiones bajo acusa se remontarían al período en el cual era superior de los Frailes Menores José Rodríguez Carballo, hoy secretario de la Congregación para religiosos.
Pues bien, José Rodríguez Carballo, precisamente poco antes del escándalo, en abril del 2013, había sido llamado por Bergoglio a cumplir el oficio de secretario de la Congregación para los Institutos de vida consagrada y sociedades de vida apostólica, siendo promovido al grado de arzobispo.
Sobre él, sobre sus responsabilidades, contenidas en un dossier dado en mano a Parolin, no se supo más nada.
Así la vaticanista Franca Giansoldati en Il Messaggero notaba: “Poco antes que el desorden fuese puesto en evidencia y el bubón explotase, el general de los franciscanos, el español Rodríguez Carballo fue cambiado de lugar y promovido en el Vaticano”.
Cambiado de lugar y promovido, “poco antes”!
Ya varios, incluso al interno de los muros leoninos, especulan que todo haya sido llamado al silencio con un acuerdo bien claro: Tú, que tienes esqueletos en el armario, serás el sicario obediente, en daño de las congregaciones y órdenes religiosos que queremos golpear. Un hombre bajo chantaje, se sabe, ¡es capaz de cualquier cosa!
Mientras tanto, recordando la tristísima historia de los Franciscanos de la Inmaculada, esperando el día en que se les haga justicia (efectivamente el tiempo es buen caballero), no puede no alarmar la reciente entrevista en la cual el mismo Carballo ha declarado, casi despectivamente, de tener la intención de comisariar y si es necesario de suprimir “una decena de fundadores y fundadoras” indagados por abusos (¿verdaderos?) o por mala gestión financiaría. “Mala gestión financiaría”… ¡habéis leído bien!
Pero ¿es de verdad posible creer que el hombre que guiaba los Frailes Menores en la época del escándalo del cual hemos hablado pueda indagar sobre escándalos económicos, verdaderos o presuntos, de otras órdenes religiosas?
¿Quién es en verdad Carballo? ¿Por qué esta sed de castigar y humillar?
¿Por qué el hastío contra los Franciscanos de la Inmaculada? Y ¿Por qué está él allí, con ese poder, ese oficio, a pesar de su pasado y de lo que carga en su conciencia?
Publicado en La Nueva Brújula por Luca Rotella
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Al leer la noticia me ha sorprendido, porque el P. Santiago Martín es un permanente defensor del Papa Francisco. Sin embargo, he abierto el último vídeo de Actualidad Comentada, y he visto que él no es de los Franciscanos de la Inmaculada, sino de los Franciscanos de María. Me había confundido de congregación. Y es que, si no quieres ser comisariado, has de adular a Francisco como hace el P. Martín. El problema es que esa actitud supone venderse al jefe, y traicionar la verdad.
Lo que el articulista llama la «impronta tradicionalista» de esa congregación, es sin duda la explicación de la opresión del Papa contra los Franciscanos de la Inmaculada.
Carballo es lo peor de lo peor. Pero tampoco el brazileño Braz es un santito. Para más detalles sobre el vergonzoso comisariado de los Franciscanos de la Inmaculada ver El Papa Dictador de Henry Sire. Me parece que no está traducido al español. A mi parecer, después de leer este libro, nada te va a extrañar de las verguenzas de Bergoglio.
En cuanto a Santiago Martín, al menos podría quedarse callado y no exponerse con la adulación de Bergoglio. Queda mal él. Se entiende que quiere evitar que destruyan su congregación, pero ¿por qué tiene que llegar a adular a Bergoglio? ¿No bastaría el silencio?
No estoy en absoluto de acuerdo con su apreciación acerca del P. Santiago Martín, él no es un adulador, es sacerdote de sana doctrina.
Como vd. sabe son estos tiempos «muy complicados» para un buen sacerdote, pues tiene el enemigo en casa.
Escucho diariamente las homilías del P. Santiago y sus comentarios de actualidad, pienso que es un buen analista e intenta exponer lo que construye.
Es muy difícil, con lo que tenemos en Roma, procurar que no se venga todo abajo.
Carmen, yo también pensaba como usted; pero de un tiempo a esta parte me ha chocado mucho ver de qué modo el P. Santiago Martin, intenta «nadar y guardar la ropa». Expone correctamente los problemas que se han generado en la Iglesia en estos años de Francisco, pero siempre acaba exculpándolo y poniéndolo como una víctima, cuando en realidad es el principal promotor de todo «el lío».
Yo he seguido bastantes de sus intervenciones y da mil vueltas para justificar las verguenzas de Bergoglio.
El Padre Santiago no es ningún adulador de nadie, como usted dice de él, difamándole. Es un buen y fiel sacerdote que sabe estar en su sitio. Un lugar que será incómodo y desagradable, como puede serlo hoy día, en el que se ha de cumplir la Ley de Dios («Honrarás a tu padre y a tu madre») y dar ejemplo en ello, cuando aquél al que ha de honrar como padre, se comporta de un modo que a hijos y extraños causa escándalo, guasa y burla, e indignación, según los casos. Los hijos más de una vez habrán recriminado al padre su mala actitud y comportamientos, con ningún resultado («Dubia»). Pero no exponen públicamente las vergüenzas del padre que les ha caído en desgracia, ni lo condenan.
Si, pienso lo mismo. Haga lo que haga, por respeto al cargo que sustenta, pero no evita dar su opinión sobre el problema.
A mi me pareció entender siempre que el P. Martín era FRANCISCANO DE LA INMACULADA.
El padre Santiago Martín fundó «los franciscanos de María.»
Miren, el progresismo zurdero izquierdista que pretendía implantar Bergoglio desde el minuto 0 a través de políticas de omisión (no atacar el abortismo ni ahora a Biden), de promoción (teología de la liberación, Agenda 2030, mundialismo) y de represión (Traditionis custodes, Inmaculada), pretendía imponer la Falsa Iglesia. Ahora, anciano y enfermo, con la urgencia de su situación personal (edad y enfermedad) lanza uno de sus últimos aguijones y mantiene los ya lanzados. Fracasarás estrepitosamente. No ganarás, el tiempo es de Jesús, incluso el último gran mal sin parangón del Anticristo perecerá. Trabajos de desamor perdidos…
Hacen falta grupos de laicos, comprometidos y valientes, como los de «The Pillar» que investiguen y saquen a la luz toda la mierda, CAIGA QUIEN CAIGA.
Solo después de apartar a los indignos la Iglesia podrá ser libre para la misión que le encomendó el Señor: convertir y bautizar a todos los pueblos, no sentarse con ellos a parlamentar de cambios climáticos
Resulta frustrante ver como los que son fieles al Señor, son maltratados por los mediocres cuando no los malvados que pululan dentro y fuera de la Iglesia. Pero eso mismo le ocurrió a Jesús, rechazado y torturado hasta la muerte por culpa de los jefes religiosos de la época…
Solo nos salva el Amor infinito del Sagrado Corazón de Jesús.
Así se alcanzará la Gloria de los Franciscanos y el deshonor de sus enemigos. Y será a eternidad.
Viva Cristo Rey
Solo son los prelados que nos merecemos por nuestros pecados
Estimados amigos de Infovaticana. Creo que màs o menos ya conocen al personaje, así que han de haber notado que si hay una pasión que domina a Bergoglio es la de la venganza. Resulta, y no tienen por qué saberlo, que cuando él todavía era arzobispo de Buenos Aires, no quería que (fuera del ámbito de la FSSPX) se rezase ni se divulgase la misa tridentina y sólo la toleraba en una capilla de iglesia derruida en un horario insólito y rezada de mala gana por un cura que a penas si la conocía. Por eso, estaba indignado con los Franciscanos de la Inmaculada que atendían una parroquia en un barrio humilde a escasos 100 metros allende su jurisdicción, donde rezaban la misa tradicional y la que se llenaba de muchachos de origen muy humilde (que sin saber latín asistían devotísimamente a esas misas) y organizaban un capítulo muy concurrido de la peregrinación tradicionalista de Nuestra Señora de la Cristiandad. Y bueno…cuanto pudo, se las cobró.
Doy fe de lo que comenta el Sr El Dogor respecto a las actitudes del entonces Cardenal Bergoglio en la Arquidiócesis de Buenos Aires. Destrato inhumano a los pocos sacerdotes católicos que sobrevivian en estos lares.
A mi parecer, Bergoglio tiene una serie (no una sino varios) problemas de personalidad, como por ejemplo, el agresivo pasivo, y una serie de vicios que se hacen cada vez más evidentes. Entiendo que cualquier persona tiene sus defectos, pero desde sus primeras apariciones como papa se notaban. Cuando yo vivía en la Argentina, se notaba que era muy esquivo y con cara de pepinillo. Luego como papa se presentó lleno de sonrisas, la alegría andante pero a veces no era capaz de esconder la cara de mil demonios. Me acuerdo haber visto una foto de él después de una entrevista con el Presidente Trump, y era de más pepinillo de lo normal. ¿Qué le habrá dicho Trump? Lo que falta darse a conocer es que estaba metido hasta las cejas en el robo de las elecciones USA. y otros organizaron buena parte del robo de las elecciones con la colaboración de una empresa de tecnología militar Leonardo. Se utilizó un satélite alquilado al Vaticano para traspasar votos de Trump a Biden. Bergoglio va a pagar por
«Expediente Royuela», en lo relacionado con el robo de las Elecciones de EEUU.
Todo esto que cuentan ustedes es tremendo.
Toda la trama expuesta en este artículo tiene el distintivo inequívoco de la masonería, expertos en conspiraciones maquiavélicas, particularmente la Eclesial que ha asomado su cabeza en este pontificado
Jesús permite todo esto? No les parece extraño, no estarán siendo engañados por unos vividores del cuento?
Lo que nuestro Señor permita y por qué lo haga, no tiene usted por qué entenderlo.
Uno de los personajes más lamentables que ha ocupado lugar en nuestra Santa Madre Iglesia (a lo largo de toda su historia)
Para deshonrarla y destruirla desde dentro.
Por sí mismo, y por mandato de otros más hábiles, astutos y pérfidos que él (a la par que cobardes, como cobarde es el mal espíritu que los guía).
«Chámame pepe»
La intervención de los FI empezó con Benedicto XVI si mal no recuerdo.
Braz de Aviz fue uno de eso nombramientos «geniales» del pontífice bávaro, quien como jefe de personal fue un desastre.
Recemos por el P Santiago Martin, y por algunos superiores que están en la misma posición doctrinal que él y están ellos con grandes responsabilidades sobre sus espaldas y tener que maniobrar esta situación tan dificil.
Cuando tendremos la noticia del nuevo Conclave ?
Este hombre ya hiede.
El padre Santiago Martín es un sacerdote fenomenal y fuera de serie. El es de los franciscanos de María. Y es un valiente. Si tiene que decir sí al papa Francisco se lo dice. Y si tiene que decir no, también se lo dice. Es un hombre que huele a santidad. Yo estuve con él en la redacción de ABC y era un hombre fenomenal. A mí me casó y llevo 30 años casado. Le defiendo a capa y espada y es un hombre llamado a grandes cosas. Es un gran comunicador, pues es periodista. Y el Vaticano debería aprovechar ese Feeling especial que tiene con la televisión, para darle mayor protagonismo.