El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, que la semana pasada concedió los indultos a los políticos catalanes condenados por sedición, ha citado al secretario general de la Conferencia Episcopal Española, Luis Argüello, añadiendo que el prelado había estado acertado en la rueda de prensa de la semana pasada.
“Por hacer eco de unas palabras, en este caso del portavoz de la Conferencia Episcopal, usted cuando comentaba antes el apoyo que han dado los obispos catalanes y también la Conferencia Episcopal… decía el portavoz algo que a mí me parece que es lo suficientemente elocuente y acertado como para poder hacerme eco de ello”, ha dicho Sánchez en una entrevista en la SER que recoge HuffPost.
“Decía que la Constitución española no es un dogma, pero sí marca el territorio sobre el cual podemos dialogar. Y creo que dentro de la Constitución española hay muchísimas cosas que hacer”, ha continuado Sánchez. La entrevistadora le ha recordado que estaba citando al portavoz de la CEE, algo que ha descolocado al presidente de España, que ha balbuceado unos instantes.
Las palabras a las que se refería el presidente del Gobierno se produjeron el jueves pasado, tras la reunión de la Comisión Permanente del episcopado español. Durante la posterior rueda de prensa, el portavoz de los obispos dijo que la Constitución “no es un dogma”, pero “sí marca un campo de juego”, incluso para su modificación.
“Hemos querido profundizar en lo que la propia nota de los obispos catalanes ha dicho para, desde esa nota, extraer unas consecuencias que seguramente ponen acentos distintos de lo que la primera lectura de la nota dice”, dijo Argüello.
“Pero nosotros estamos como los obispos catalanes por el diálogo, estamos por la aplicación de la ley, estamos porque se respete la justicia lo cual supone el respeto de la división de poderes, estamos porque no haya actitudes inamovibles y estamos porque se genere un clima de amistad civil y de fraternidad que haga posible que abordar un asunto cada vez más enquistado y que ha ido creciendo y se ha hecho un problema en el mismo de la sociedad catalana y en el conjunto de España”, añadió.
Estas palabras son un extracto de la larguísima respuesta del obispo auxiliar de Valladolid, que pueden ver completa al finalizar este artículo, en la que se produjo un detalle que ha pasado desapercibido.
Escribe esta mañana Jesús Bastante en Religión Digital que muchos de “los supuestos adalidades de la catolicidad mediática” ―entiendo que ha querido decir adalides―, o “algún obispo presente en la reunión de la Permanente, que arremetió contra sus propios hermanos tanto en la Tercera de ABC como, posteriormente, en su carta pastoral” no opinan igual que el portavoz de los obispos.
“¿Se imaginan que alguien hubiera hecho esto hace once o doce años, con Rouco Varela al frente? Son otros tiempos, otros estilos: Omella, Francisco…”, se pregunta el periodista.
Quiero creer que el periodista estaba despistado durante la rueda de prensa del otro día, porque resulta que Luis Argüello citó directamente el artículo del que hace mención Bastante, el escrito en la Tercera por Jesús Sanz Montes, arzobispo de Oviedo. Y es curiosa la cita de Argüello, que ha pasado desapercibida, porque en ese artículo al que hizo referencia el portavoz del episcopado, Sanz critica con mucha dureza los indultos. ¿Será lo que piensa de verdad Argüello?
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Es normal que el Presidente Sánchez cite a Monseñor Argüello, ya que la postura oficial del episcopado da apoyo al Gobierno.
D. Luis se suma al juego de discursos ambiguos, para no defender lo que dicta el cuarto mandamiento de la Ley de Dios, que debiera llevar a los obispos españoles, a cerrar filas en torno al bien común que es la unidad de España.
Está claro a quién sirven. Y no es a Cristo. Cada día esto me recuerda más al abandono de los altares del pueblo de Israel entre la traición de la tribu sacerdotal. Pues eso: nuestra casta se ha pasado al enemigo y nosotros sacrificando a los baales.
Flaco favor hace Pedro Sánchez a los obispos.
Guarde para su regalo, esta sentencia el autor: Si el sabio no aprueba, ¡malo!. Si el necio aplaude, ¡peor!
La frase de San Gregorio Magno me parece acertada: «No se puede ser amigo de Dios y de los enemigos de Dios al mismo tiempo. Demuestra que no es amigo de Dios el que busca agradar a los que se oponen a el.»
No digo nada más porque la frase ya lo dice todo
Cadena de favores
ya es curioso que, al mismo tiempo que se aprueba una ley, anti-humana, como es la ley sobre eutanasia, los obispos se pongan de acuerdo en que la negociacion sobre un tema civil, y sobre una negociacion para la independencia, de una iglesia, la catalana, racista, que impide que los castellano-parlantes sigan la liturgia en su idioma.
Se va despejando quien va a ser el próximo obispo castrense…