Ayer, un jurado abrumadoramente acosado por las amenazas de represalia y violencia callejera, declaró al policía Derek Chauvin culpable de homicidio en segundo grado del delincuente habitual George Floyd, y los obispos norteamericanos aprovecharon la ocasión para subirse al carro de la opinión popular con un comunicado.
La Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB) expresó en la nota la “profunda necesidad” de volver a ver lo sagrado en cada vida humana, especialmente en los “históricamente oprimidos”.
El aborto se ha convertido ya en la primera causa de muerte en Estados Unidos, y la población negra es desproporcionadamente azotada por esta plaga que promueven las autoridades y que el actual presidente, el ‘católico’ Joe Biden, quiere ampliar y blindar. Pero el que nos enseña la sacralidad de la vida es George Floyd, aquejado de una dolencia cardiaca congénita y con sobredosis de fentanilo en el momento de su muerte.
“Hoy, un jurado declaró a Derek Chauvin culpable del asesinato de George Floyd. Al recibir este veredicto, recordamos que Dios es la fuente de toda justicia, amor y misericordia. La muerte de George Floyd destacó y amplificó la profunda necesidad de ver lo sagrado en todas las personas, pero especialmente en aquellas que han sido históricamente oprimidas”, dice literalmente la nota. Ni el menor comentario sobre las presiones abrumadores a las que medios, organizaciones como Black Lives Matter y la propia Administración sometían al jurado que tuvo que llegar al veredicto. El propio Biden apareció en televisión mientras el jurado deliberaba para decir que “rezaba” por un veredicto de culpabilidad, y la ‘speaker’ del Congreso, tercer cargo en importancia del Estado, la también ‘católica’ Nancy Pelosi, dio luego gracias a Floyd por “sacrificarse por la justicia”, como si hubiera muerto deliberadamente en una parodia de la Redención.
“Cualquiera que sea la etapa de la vida humana, no solo importa, es sagrada”, continúa el comunicado firmado por el Obispo Shelton J. Fabre, presidente del Comité Ad Hoc contra el Racismo y el Arzobispo Paul S. Coakley, presidente del Comité de Justicia, Paz y Desarrollo Humano.
Cualquiera, pero si es una vida especialmente apreciada por los medios de masas, tanto mejor.
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Hay una diferencia muy clara entre el comunicado de los obispos estadounidenses y las opiniones de Biden y Pelosi. No sea usted tan quisquilloso, señor Esteban. Más aún, la referencia del comunicado a que la sacralidad de la vida humana es independiente de su momento de desarrollo me parece muy bien traída.
No me sorprende que Biden no respete la independencia judicial al rezar por una sentencia de culpabilidad, ya que parece que tampoco respetó la voluntad de los ciudanos con su presunto fraude electoral.
En cuanto a la nota del episcopado, tampoco me llama la atención, porque a esos obispos, como al Papa Francisco, no les duele el aborto, pero sí que se implican en la ideología BLM.
En cuanto al policía, no estoy seguro pues no tengo toda la información del caso, pero da la impresión que fue sólo un accidente fortuito y desde luego nada de asesinato.
Sacerdote Mariano: le recomiendo el video: « Tucker Carlson y Shapiro el video completo de la detención de george floyd sale a la luz »