| 04 junio, 2020
La Conferencia Episcopal Española ha contratado un espacio de 20 páginas en el periódico EL PAÍS, para la edición de papel de hoy.
El motivo para la adquisición de este espacio es la promoción de la campaña para la ‘X’ de la declaración de la renta, dirigida a buscar que más españoles marquen la casilla por la que la Iglesia recibe el 0,7% de los impuestos del contribuyente que efectivamente la marque.
El espacio ocupa una sección en el interior del rotativo de 20 paginas, algo que supone alrededor de una cuarta parte del periódico perteneciente al Grupo PRISA. Bajo el título «¿Por qué marcar la casilla de la Iglesia en la declaración de la renta?», la sección trata de mostrar las respuestas a esa pregunta en sus páginas. A continuación les ofrecemos la páginas:
Ayuda a Infovaticana a seguir informando
Vergonzoso!
¿Quién va a pagar la publicidad en ese periódico anticristiano? ¿Los cristianos? Idos a la eme!!
¿ De qué nos asombramos ? ¡ Normal ! Los enemigos de la Iglesia de fuera se entienden de mil maravillas con con los de dentro. El objetivo es el mismo y unos y otros se necesitan, sobre todo para sobre vivir.
También Bergoglio da cancha a la Sexta y al diario La Repúbblica, enemigos declarados de la Iglesia, aunque el segundo ha cambiado ahora de manos, por lo que ya no gozará de su confianza.
A estas alturas, ya importa un pito.
Me parece una idea estupenda!! Por fin la iglesia no piensa solo en su habitual clientela
No se dan las perlas del reino de los cielos a los cerdos.
«Pecunia non olet» (frase atribuida al emperador romano Vespasiano).
Una iglesia domesticada, que no molesta a nadie, que se limita a limpiar mocos y culetes, es aceptada, sobre todo con regalos cuantiosos, por El País, la Sexta y el Sursum Corda. Pero eso no es evangelizar; eso es hacer el idiota.
Estoy con Marita.
También entiendo el enfado de InfoVaticana. Pero comprendan que La Gaceta no la lee tanta gente y muchos ya pondrán la X.
Dar las perlas ddel reino de los cielos a los cerdos es desperdiciar las perlas.
Pronto en interviú.
Déjate de chorradas
No le veo la más mínima coherencia. Primero está el hecho de dar una cuantiosa suma de dinero a un medio caracterizado por su hostilidad a la Iglesia. En segundo lugar, la inutilidad de predicar ante quienes se han apartado voluntariamente de la Iglesia, esto es, los lectores de esa publicación. En resumen: no van a tener una sola aspa de los izquierdosos lectores de ese periódico y, sin embargo, van a donarle una buena financiación con los dineros que los feligreses hemos ido aportando a la Iglesia.
Quédate tranquilo que nuestros obispos del País no tienen ninguna intención evangelizadora, sino meramente recaudatoria, en la confianza de que el regalillo al País se lo van a devolver con creces sus lectores en forma de x. ¿ Serán ingenuos ? A estas alturas, no creo. Me decanto más bien por constatar que tan enemigos de la Iglesia son unos y otros. Quizás algunos obispos todavía más.
Hombre!! Más que Vd, imposible!! No se quite méritos que algún día Dios se los retribuirá!
¿Y qué canali guión bajo?
Los que no ponemos la X es porque somos conscientes de que no podemos colaborar con el mal. Nos da igual lo que hagan los demás. Allá cada uno con su conciencia y con las explicaciones que luego le tenga que dar a Dios.
Lo que sois conscientes es de que no sois católicos. Sin más.
Sabrás tú de ser o no conscientes.
Y te creerás que eres de los misericordíticos que no juzgan a nadie…
Yo creo que hoy más que nunca es necesario dejar de marcar la X. Y no como una mera pataleta contra los desmanes y disparates eclesiásticos que no paramos de ver cada día, sino porque en sí mismo es un sistema que pone a la Iglesia a sueldo del Estado, siempre en mundano servilismo, y prueba de ello es el panfleto grotesco que han tenido que contratar ni más ni menos que en El País, vendiendo a la Iglesia como una especie de ONG barnizada de espiritualidad. La Iglesia, en cierto modo, para ser libre tiene que ser «pobre». No carente de medios, pero sí carente de una paguita del Estado. El argumento de que «hay que ayudar a la Iglesia en sus necesidades» no vale. Dele usted dinero a las congregaciones e institutos serios, firmes en la fe, son fáciles de reconocer porque son los únicos que tienen vocaciones. O dele usted dinero directamente a su parroquia, porque evidentemente también hay muchos curas diocesanos que están haciendo una gran labor por las almas. Pero por Dios, no a la CEE.
Hace falta ser indocumentado. Es mejor no poner la X y que el estado sociopodemita tenga mas fondos para sus fines? Que tropa!!
Joaquín. El indocumentado eres tú que no sabes ni quieres saber dónde va a parar una parte importante de las donaciones y de la X.
Me da igual que les llegue por los podemitas o por la declaración de la renta. El caso es que llega y un católico no puede colaborar con el mal a sabiendas.
Para ser libre mejor no tener una página del Estado.
Lo primero, no es una patita del Estado, es el dinero de los ciudadanos. Se ha hecho ud. tan social-comunista que ya cree que el dinero pertenece al Estado.
Lo segundo: De ejemplo y deje de vivir de la pensión que le pagamos los que trabajamos. Sea libre y libérenos de mantenerle. Porque su pensión sale de los demás, no de lo que ud pagará que eso fue a los jubilado s de entonces. Venga, hágase ud. libre y hagamos un favor.
Como cada año, en nuestro país comunista, se pagan más impuestos es normal que la recaudación suba.
Los lectores del País lo van a flipar con el suplemento… Por un tema exclusivamente empresarial no es mala idea: buscando nuevos donantes jejeje
La Evangelización está proscrita. Ahora como en Alemania: «Todo por la pasta» «La pela es la pela»
….la «habitual clientela» no pagamos. Estos otros tampoco lo harán….
Pero si todos van al cielo, no ves que Cristo por su encarnación se ha unido a todo hombre para siempre, evangelizar para qué.
Coherentes con su cosmovisión sí que lo son. Pero cristianos, nada de nada.
….y de Dios nadie se ríe……gratis……
Que pongan otro anuncio en PRAVDA
Está un poco trasnochado!! En el jeroglífico de una pirámide!!
Quizá haya que pensar que la los economistas eclesiásticos han visto que han llegado al tope de su recaudación entre los feligreses y trata de pescar en otros caladeros.