La Rebelión de las Mujeres y la Iglesia redundante

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Lo primero que hay que decir de la Rebelión de las Mujeres en la Iglesia es que no hay tal. No se rebelan ‘las mujeres’, sino las mismas que llevan ‘en rebeldía’ desde siempre. Y lo segundo, que la ‘movida’ no puede ser más clerical.

“En el encuentro se leerá un manifiesto. Iniciativas semejantes se ponen en marcha en estos momentos en otros lugares de España. Según las convocantes, alzan la voz y se manifiestan porque viven una profunda discriminación en la Iglesia y ha llegado el momento de que digan ¡Basta ya! Quieren denunciar las múltiples formas de injusticia e invisibilización que sufren en la iglesia”. Bien, ahora sustituyan la palabra ‘Iglesia’ y, ¿qué nos queda? El manifiesto político de siempre de la extrema izquierda.

Todo lo que he leído sobre esta operación pantalla de la izquierda eclesial se da de bofetadas con cualquier noción surgida de la fe cristiana, empezando por ese deseo de ‘visibilización’ que puede ser estupendo en política o sociedad, pero que no tiene ningún sentido en el mensaje cristiano. Cristo vino a salvarnos, y la Iglesia es el modo específico de alcanzar la salvación, de ir al Cielo, no de visibilizarnos o de ganar cuotas de poder.

Estamos simplemente ante la enésima operación de marketing de la izquierda, acostumbrada al uso de organizaciones pantalla sin apenas representatividad a las que se jalea para que parezca que la tienen. Hasta el morado Podemos de sus consignas revelan a las claras su verdadera intención, que no tiene nada que ver con el Evangelio.

Pero, como ha advertido una y otra vez el Papa Francisco, y ha vuelto a subrayar en Querida Amazonia, uno de los grandes males que sufre nuestra Iglesia es el clericalismo, es decir, la idea de que la Iglesia es una estructura meramente humana en la que el clero es ‘la clase dominante’ y los laicos, el oprimido proletariado. En ese esquema, tendría sentido la revuelta para, o quitarle ‘poder’ a los clérigos, o abrir la clerecía también a las mujeres. Lo que no tendría sentido en absoluto es la propia Iglesia.

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Comentarios
25 comentarios en “La Rebelión de las Mujeres y la Iglesia redundante
  1. De hecho, la técnica se llama “entrismo”. Una vieja estrategia política practicada por Trotsky y el trotskismo, Lenin y Mao. En todo caso, entrismo es la penetration por parte de organizaciones subversivas, revolucionarias, en organizaciones que se desean destruir desde adentro. Una atención desapasionada a la marcha de la Iglesia desde hace un siglo, pero muy especialmente desde hace 50-60 años, nos revela un fuerte entrismo masón en la alta jerarquía eclesial, además de un entrismo descarado de cuadros comunistas en los seminarios tras el CVII. Bien pues, estos movimientos feministas tan próximos a las locuras de Sartre y su madame y a la Escuela de Frankfurt en general, son un clarísimo ejemlo de entrismo.

    1. Somos iguales ante Dios, pero nuestros actos no lo son. La clara ofensiva hembrista es contra la Iglesia de Cristo y NO hay cabida o encaje que valga con el Evangelio, léalo usted en lugar de jugar al troleo. Y es que palabras suyas son: Mi reino no es de este mundo, por lo que las pretensiones de modificar a su antojo y conveniencia, el Dogma y la Doctrina, no tienen cabida alguna.

      En cuanto a los medios ultras, resulta que hay otros muchísimo más ultras, extremos, destructivos o disolventes de signo opuesto, de signo revolucionario. Y sí eso no gusta, ¿qué hace usted aquí? ¿acaso le pagan por estar? Como será que no, haga lo que afirma el dicho popular: haya donde vayas, haz lo que vieres. Ya lo sabe señor ultraizquierdista

      1. Que dices el facha franquista este. Sus comentarios son tipicos de un inquisidor. La gente ultra y fanática como vosotros dentro de poco serán residuales en la iglesia. No vais a eclipsar con vuestro comentarios racistas, misóginos y homófobos el mensaje tolerante y fraternal de Cristo. Vosotros no estáis a favor de la igualdad sois unos clericalistas exacerbados qu defendéis que sólo el hombre tenga el poder en la iglseia. Y estoy aquí porque me da la gana. No me va a decir un tío del KKK lo que tengo que hacer

  2. Más discurso viejuno marxista.Ideologias trasnochadas que no reflejan la realidad.
    Que solo buscan el enfrentamiento para que quienes la azuzan por detrás acaben por beneficiarse.
    Se lo diremos una vez más:
    No nos vengan con cursiladas y mamarrachadas a los católicos .No os entendemos hablamos otro idioma.

  3. Pero si la mujer en la Iglesia prepara la misa, da catequesis, lee en la misa, ayuda en el despacho de cáritas, da la comunión etcétera. Os invitaría a investigar como el papel que desempeña la mujer en otras religiones como el islam, el budismo, o el judaísmo.

  4. El pensamiento único se contradice al propugnar simultáneamente el sexo fluido, en el que se desdibuja la distinción hombre-mujer, y el feminismo exacerbado. O lo uno o lo otro.

    1. Por eso el Tribunal Constitucional de Bulgaría rechazó estas leyes euro-peas degenero:

      -«si la sociedad ya no diferencia entre hombre y mujer, la lucha contra la violencia contra las mujeres se vuelve imposible de lograr».

      Algunos conservan el sentido común…

  5. Suelo leer sus artículos. Pero hoy paso, lo siento.
    Los grupos lgteberos fabricados desde arriba no tienen nada que ver con los gays… Y ciertos feminismos nada que ver con la mujer. Más bien van contra.
    Ni me molesto en entrar en su sucio juego, salvo cuando es estrictamente necesario. Hoy nopi. Paso.

  6. La rebelión auténtica es la que ya estamos haciendo tantos laicos con nuestras críticas y no dar ni un euro a tanta jerarquía y clerecía comodona, apóstata, vendida al pensamiento único, al poder de turno, que no confirma en la Fe y que vive del cuento ambientalista, migracionista, homosexualista, globalista y ecumenista-relativista.

    1. Totalmente de acuerdo. Añadiría que hoy en día cualquier Católico dispone de muchos medios para tener una solida formación y no dejarse llevar por modas, ni ideologías ajenas al Evangelio.

  7. ¿Por qué asimila usted a las mujeres de derechas en la iglesia con la sumisión y el silencio?
    De la misma manera que se puede ser republicana y de derechas, anti abortista y de izquierdas. astróloga y crítica. Somos católicas y ese es nuestro credo, estamos ya cansadas del ninguneo permanente y del silencio.
    Pues bien yo soy de derechas y yo no me callo ya ni una.

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