7 meses después de la anulación de su condena y su salida de prisión, Asia Bibi ha salido de su país en dirección Canadá, según cuenta en exclusiva Sam Greenhill.
Exclusive – Christian ‘blasphemy’ mother Asia Bibi has finally escaped Pakistan after seven months
— Sam Greenhill (@s_greenhill) 7 de mayo de 2019
La mujer de 53 años ha pasado 7 meses en vilo, a la espera de que el ejército pakistaní le permitiera partir hacia el extranjero.
La pasada noche, según fuentes del Daily Mail, se le permitió por fin salir del país. Después de 8 años de prisión, acusada por blasfemia contra el islam, de que se pidiera su ejecución y tras 7 meses esperando por fin está en libertad.
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Y no precisamente gracias al vaticano francisquita. Parolín se lavó las manos miserablemente, junto con su poderdante Francisco, cual Pilatos de XXI, diciendo que Asia Bibi era una mera cuestión interna pakistaníe.
Por cierto, en Canadá le va a perseguir el pensamiento único y el gender, frente a los que ni está ni se le espera reacción alguna francisquita.
Creo que habría estado mas segura en algún otro sitio, pero me alegro de que haya podido escapar al fin, de Paquistán. Hoy los «poncios» romanos tendrán ardor de estómago.
Gracias a Dios ¡¡¡
¡ Gracias a Dios y a tantos que lo han conseguido con la ayuda del Cielo!
Da gusto saber estas noticias, esperemos que ésta vez sea la definitiva. Que por fin se reúna con su familia, y que también logren salir de un país tan incompatible con el espíritu cristiano, allá peligraba su vida, ahí sus mentes . Bendito sea Dios, que después de tanto sufrimiento, abraza a quienes más ama.
Por fin!!!!!
Gracias a Trudeau, Asia Bibi y familiares podrán recuperarse del infierno que han pasado.
Ojalá también se ponga pronto punto y final al infierno por el que otros acusados de «blasfemia» están pasando.
Veremos a ver si el Papa hace en estos días alguna mención a la venturosa noticia de hoy.
Trudeau no es nada de fiar. Asia Bibi lo podrá comprobar en persona en muy poco tiempo. Está implantando, no sólo el aborto a discreción, sino la dictadura lgtb.
Como país de paso, sirve. Luego deberá buscarse un país con cierta población católica en Sudamérica donde no sea perseguida nuevamente por otra razones como le sucederá en Canadá
Excelente noticia.