En medio del dolor el Arzobispo de Colombo, Cardenal Albert Malcolm Ranjith, presidió los funerales de 250 católicos que murieron por los atentados ocurridos en Sri Lanka el 21 de abril de 2019 durante las celebraciones del Domingo de Resurrección.
La cadena de atentados tuvo lugar en tres iglesias y tres hoteles de varias ciudades del país asiático, dejando más de 359 muertos y cientos de heridos. El Estado Islámico ha reivindicado los ataques el 23 de abril.
El periodista italiano de Il Foglio, Matteo Matzuzzi informó que los funerales fueron presididos hasta el jueves 25 de abril.
“Por razones de seguridad, muchos funerales se realizan en grupos. Sacerdotes y obispos auxiliares se turnan”, explicó el periodista en su cuenta de Twitter.
La agencia vaticana Fides informó que el martes 23 de abril, el Cardenal Ranjith presidió una Misa por los fallecidos en la iglesia de San Sebastián en Negombo, al norte de Colombo, que fue uno de los objetivos de los atentados.
La iglesia estaba fuertemente custodiada por el ejército, la fuerza aérea y la policía.
“Con lágrimas y tristeza enterramos a nuestros hermanos y hermanas que perdieron la vida en el trágico ataque”, dijo el Purpurado durante el funeral, en el que estuvo acompañado de los obispos auxiliares Mons. Maxwell Silva y Mons. J.D. Anthony, junto a varios sacerdotes.
“Nadie tiene el derecho de quitar la vida. La vida es un don de Dios. ¿Cuál es la finalidad de matar a personas inocentes? ¿Coleccionar tesoros en este mundo? ¿O asumir el poder y gobernar este país sobre la sangre de pobres inocentes? ¿Sobre los cuerpos de personas sin ninguna culpa? Los exhorto a frenar este derramamiento de sangre. Basta de matar, al menos en este momento. Se los pido por amor de Dios. Es lo que los asesinados esperan de nosotros”, expresó el Arzobispo de Colombo.
En otro momento, el Cardenal Ranjith recordó que “solo Dios tiene el poder de decidir y nosotros debemos obedecer a su voluntad”.
“Quizás en este momento nos esté escuchando alguno de los responsables de esta tragedia. Debemos decirles a todos ellos que nosotros no aceptamos tales actos por ningún motivo. Cualquiera sea la expectativa, está equivocado hacer estas cosas”, expresó.
Finalmente, el Cardenal Ranjith dijo que todos los “hermanos difuntos son ya mártires”.
Sri Lanka tiene cerca de 22 millones de habitantes. Los cristianos representan el 7% de la población, mientras que los budistas son el 70%, los hinduistas el 15% y los musulmanes el 11%.
Esta no es la primera vez que los cristianos son atacados en Semana Santa en un país donde son minoría
El 9 de abril de 2017, en Domingo de Ramos, 30 personas fueron asesinadas y al menos 70 quedaron heridas en un ataque suicida a la iglesia copta de Tanta (Egipto). Otro terrorista suicida atentó contra la iglesia de San Marcos en el distrito de Manshyia en Alejandría, dejando 16 muertos y 66 heridos.
El 27 de marzo de 2016, en Domingo de Pascua, al menos 75 personas fueron asesinadas y otras 340 quedaron heridas en el atentado suicida contra el parque Gulshan-e-Iqbal, en Lahore (Pakistán), donde los católicos celebraban la Resurrección de Cristo. También murieron varios musulmanes que se encontraban en el lugar.
El 2 de abril de 2015, en Jueves Santo, terroristas musulmanes ingresaron a la Universidad de Garissa, en Kenia, y asesinaron a 148 estudiantes cristianos, dejando también más de 70 heridos.
Ayuda a Infovaticana a seguir informando
¿ Y no pide al Estado, que ya había sido alertado, protección del los derechos de la minoría católica a ejercer su Fe y difundirla ? ¿ Hasta cuándo tanta dejación de derechos, que son deberes, incluso sagrados ?
Son actos de cobardía, porque llegar disimulado, pasar como «amigo», saber que nadie está armado, ver que solo son escenas familiares, que hay felicidad, que hasta le sonríen, y después accionar las bombas, , es la más repulsiva cobardía
Ellos pensarán que por matarse también, son valientes, pero nunca quitarse la vida ha sido cuestión de valor,. Se ocupa más valor para seguir viviendo que para hacerse a un lado por voluntad propia. Es como un soldado, que tiene que ir al frente, el terrorista corre a esconderse, y los valientes siguen de frente. El hacerse explotar es el huir de la milicia que es la vida. Y como dice el Cardenal, solo Dios es dueño de la vida, y éstos miserables terroristas, lo único que ofrecen es la inútil vida de ellos . Nuestros hermanos católicos fueron sus víctimas, pero a ellos Dios les da la bienvenida. ¿Y a los terroristas?,. El terror.
No estan muertos los ue viven, mas bien pidamos por los que sufren heridos, y Familiares, pero ellos los Martires estan vivos, en nosotrso como Jesucrsito.