(Débora Donnini/Vatican News)- Como Caín, el Señor también nos hace hoy la pregunta: «¿Dónde está tu hermano? En su homilía de la Misa matutina celebrada en la capilla de la Casa de Santa Marta, el Papa exhortó a responder personalmente, pero no con respuestas de compromiso para escapar del problema. Sí porque Francisco recordó que, en efecto, se está hablando del hermano enfermo, encarcelado y hambriento, como dice el Evangelio de San Mateo en el capítulo 25.
De manera que la vicisitud de Caín y Abel, propuesta por la Primera Lectura de la Liturgia del día, estuvo en el centro de su reflexión. Una Lectura que forma parte de ese género literario que se repite muchas veces en la Biblia, y que «podemos llamarlo preguntas incómodas y respuestas de compromiso”. De hecho, es precisamente «una pregunta vergonzosa», la que Dios dirigió a Caín: «¿Dónde está tu hermano? Y la respuesta es en este caso «un poco de compromiso», pero también para defenderse: «¿Pero qué tengo que ver yo, en la vida de mi hermano? ¿Acaso yo soy su guardián? Yo me lavo las manos. Y con esto Caín intenta escapar de la mirada de Dios», observó el Papa.
Francisco se detuvo a reflexionar sobre las «preguntas incómodas» que hizo Jesús. Muchas veces se las hizo a Pedro, por ejemplo, cuando le preguntó tres veces: «¿Me amas?”. Tanto es así que al final Pedro ya no sabía qué responder. También las dirigió a los discípulos: «¿Qué dice la gente de mí?”. Y ellos respondieron: «Un profeta, el Bautista…». «Pero ustedes, ¿qué dicen?», les preguntó. «Una pregunta embarazosa, entonces. Dios le hizo otra pregunta a Caín: ¿Dónde está tu hermano? «Ésta – subrayó – es una pregunta incómoda: mejor no hacerla. Y nosotros conocemos muchas respuestas: pero, es su vida, yo la respeto, me lavo las manos… no me meto en la vida de los demás», cada uno es libre de elegir su propio camino…
El Papa, con estos ejemplos, quiso poner de manifiesto cómo en la vida cotidiana a estas preguntas incómodas del Señor, «respondemos un poco con principios genéricos que no dicen nada pero dicen todo, todo lo que está en el corazón”.
El Papa dijo que el Señor nos hace esta pregunta a cada uno de nosotros hoy: «¿Dónde está tu hermano?». Quizás alguien que está un poco distraído puede decir que está en su casa con su esposa, añadió. Pero Francisco dejó claro que se está hablando del hermano hambriento, del enfermo, del encarcelado y del perseguido por la justicia:
«¿Dónde está tu hermano?» – “No lo sé» – «¡Pero tu hermano tiene hambre!» – Sí, sí, sí, seguramente está almorzando en la Caritas de la parroquia, sí, seguramente le darán de comer «, y con esta respuesta – de compromiso – me salvo el pellejo. «No, el otro, el enfermo…» – «¡Seguro que está en el hospital!» – «¡Pero no hay sitio en el hospital! ¿Y tiene los medicamentos?» – Pero, es una cosa suya, yo no puedo inmiscuirme en la vida de los demás… tendrá parientes que le den los medicamentos», y me lavo las manos. «¿Dónde está tu hermano, el encarcelado?» – Ah, está pagando por lo que se merece. La hizo, que la pague. Estamos cansados de tantos delincuentes por la calle: que pague. Pero jamás tú escuchas esta respuesta de la boca del Señor. ¿Dónde está tu hermano? ¿Dónde está tu hermano explotado, el que trabaja en negro, nueve meses al año para reanudar, después de tres meses, otro año? Y así no hay seguridad, no hay vacaciones… «Eh, hoy no hay trabajo y uno toma lo que puede…»: otra respuesta de compromiso.
Con estos ejemplos concretos el Papa pidió que cada uno tome esta palabra del Señor como si estuviera dirigida a cada uno de nosotros personalmente:
El Señor me pregunta «¿dónde está tu hermano? y hay que poner los nombres de los hermanos que el Señor nombra en el capítulo 25 de San Mateo: el enfermo, el hambriento, el sediento, el que no tiene ropa, aquel hermano pequeño que no puede ir a la escuela, el drogadicto, el encarcelado… ¿dónde está? ¿Dónde está tu hermano en tu corazón? ¿Hay lugar para estas personas en nuestro corazón? ¿O hablamos, sí, de la gente, y descargamos un poco nuestra conciencia dando limosna?
Pero que no molesten demasiado «por favor porque – prosiguió el Papa – con estas cosas sociales de la Iglesia», termina pareciendo «un partido comunista y eso nos hace daño». Está bien, pero el Señor lo dijo: ¿dónde está tu hermano? No es el partido, es el Señor». «Estamos acostumbrados – insistió – a dar respuestas de compromiso, respuestas para escapar del problema, no para ver el problema, para no tocar el problema».
En conclusión, el Papa Francisco volvió a exhortar a «hacer la lista» de todos a los que el Señor menciona en Mateo 25. De lo contrario, comienza a crearse «una vida oscura»: el pecado está agazapado en tu puerta, dice el Señor a Caín, y «cuando llevamos esta vida oscura sin tomar en nuestras manos lo que el Señor Jesús nos enseñó, el pecado está agazapado en la puerta, esperando para entrar. Y para destruirnos», recordó, exhortando también a hacernos la otra pregunta contenida en el libro del Génesis, la que Dios dirige a Adán después del pecado: «Adán, ¿dónde estás?”.
Y Adán se escondió de la vergüenza y de miedo. Ojalá nosotros sintiéramos esta vergüenza. ¿Dónde está tu hermano? ¿Dónde estás? ¿En qué mundo vives, que no te das cuenta de estas cosas, de estos sufrimientos, de estos dolores? ¿Dónde está tu hermano?… ¿Dónde estás? No te escondas de la realidad. Hay que responder abierta, fiel y alegremente a estas dos preguntas del Señor.
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En negro trabajan muchos en el vaticano, sobre todo muchas, como esclavas incluso, y hasta los despiden sin contemplaciones porque » yo soy el papa y no le debo explicaciones a nadie «. A ver si Francisco empieza por limpiar su propia casa, por limpiarse a sí mismo. No creo. Le encanta repartir su propia porquería sobre los demás. Es su especialidad, la de ver la paja en el ojo ajeno, pero nunca la viga en el propio.
Belzunegui: 100% de acuerdo con tu comentario. Quiera Dios que el Papa Francisco se abra a la gracia de la conversión y recapacite, para que no tenga que escuchar después «Yo soy Jesucristo y no le debo explicaciones a nadie». Bendiciones.
A muchos que pagan en negro luego resulta que los nombran obispos. Será un mérito para escalar.
Agiornamiento agiornamiento que queremos ser como el mundo. Pues ya sois como el mundo.
¿Dónde está tu hermano, ese que buscaba a Dios, y fiándose de ti que te hacías pasar por ministro de Cristo, le has destrazado la inocencia, la vida y el alma?.
¿No le hace esta pregunta el obispo de Roma a muchos de sus colaboradores que el mismo a sabiendas a puesto al lado suyo o protege?
Ya está bien Francisco!!!
Ya está bien!!!!
En efecto, Carmen.
¿Dónde está tu hermano, estragado sexualmente y humillado bajo tu silencio y disimulo, siendo tú consejero mío y cardenal de mi máxima confianza?
Resulta esperpéntico, de pesadilla todo esto. Cuando los fieles estamos horrorizados y preocupadisimos por una semana que puede ser transcendental para la Iglesia, toda esta perorata grotesca supera lo que una pueda imaginar.
La cabeza visible ha perdido el norte.
Como gallinas descabezadas andaríamos si no nos encontráramos anclados en la Roca firme que es Cristo.
tal cual
Mis hermanos los explotados, están esparcidos por muchos sitios y uno de ellos, el Vaticano.
Hay otros hermanos que caen en manos de los yihadistas a los que usted, señor Papa, les llama los de la religión de la paz. Hace nada, ha firmado un documento junto con un imán diciendo que su dios y el nuestro Dios es el mismo.
Mis hermanos los de China, sufriendo lo que no está en los escritos por haberles vendido al estado.
Otros hermanos, escandalizados por ver cómo se denigraba a la Santísima Virgen en la JMJ mientras usted aplaudía la blasfemia.
Mis hermanos y yo empezamos a estar hartos de ver cómo quien tiene que dirigir la embarcación de Pedro va sin rumbo fijo a merced de los vientos y de los piratas que asaltan con todo éxito y sin oposición del capitán.
Mariela, estás inconmensurable. ¡ Gracias hermana en la fe !
¿En serio va sin rumbo? Yo en cambio veo una ruta bien establecida. El problema es que no lleva a Cristo, sino directamente al anticristo.
Si yo quisiera destrozar la Iglesia y someterla a los designios del mundo, no podría hacerlo mejor.
Desgraciadamente, también es verdad y no chica la que usted apunta, Javcus
MARIELA: ¡Excelente! «La verdad os hará libres», dijo nuestro Señor Jesucristo. «El que tenga oídos para oír, que oiga». Bendiciones.
Esto es lo que le gusta al Gordo, denostar a los «Malos».
Se le ve demasiado el plumero
Me va Vd. a perdonar, Santo Padre…
Pero los explotados de verdad somos los que trabajamos en blanco…
La presión fiscal en España para nosotros es mayor del 50%.
A ver si es mentira…
Sale a relucir el Bautista a propósito de una pregunta embarazosa, pero Francisco nunca se preguntará cual fué, no ya la pregunta, sino la afirmación más embarazosa, que le costó la cabeza al Bautista: » No te es lícito tener la mujer de tu hermano «. El Bautista se pasó el discernimiento de la Amoris Laetitia por el arco del triunfo y fué derecho al martirio, a sabiendas de que, para llegar al Cielo, hay que desechar los atajos de la senda ancha de la Amoris, que llevan al infierno.
Solo es comunismo! Así habla el comunismo solo lo que le conviene,limita el dolor de La Cruz! Por solo ver el dolor de Marx! Su dolor en verdad limitado por el egoismo!
Y sé de lo que estoy hablando… En España, como somos tan chulos, si eres moro, rumano o lo que sea, Cáritas te paga el alquiler, la luz, te da una ayuda familiar y te llena el carro de la compra. En esta misma web se ha anunciado un señor de sesenta y muchos años infartado y con tres bypasses con la mujer con cáncer de colon con la típica bolsa externa y una hija con parálisis cerebral de 43 años a los que se les ha roto el plato de ducha que necesitan como el comer porque la hija va con pañales y la mujer con su historia y llevan semanas lavándose con toallas porque no tienen dinero para arreglarla (presupuesto unos 1.800 € de los que no disponen), han acudido a Cáritas y les han «prometido» darles unos 200 (una mísera limosna con la que no hacen nada) porque «no tienen dinero» (quieren decir para los españoles).
Esas personas que trabajan en negro en España, EN LA MAYORÍA DE LOS CASOS NO QUIEREN QUE SE LES DE DE ALTA EN LA SEGURIDAD SOCIAL. Claro, curras en negro y te ahorras ese 50% que nos quitan a los pringados como nosotros, pero además tienes becas para todos tus hijos para estudiar gratis, comedor gratis, ayudas de todo tipo de organizaciones como la citada Cáritas, etcétera, mientras que los que nos matamos para sacar la familia adelante no hacen más que darnos por saco. Hace dos meses, un matrimonio amigo contrata a una sudamericana como interna para cuidar de la abuela, que está mal. A la hora de hacer los papeles dice ella que de ninguna de las maneras, que no quiere que sus ingresos aparezcan por ninguna parte, y que no está dispuesta a pagar impuestos de ninguna clase. Como los gitanos de antes, vaya. ¿Y de esto también tenemos nosotros la culpa, Su Excelencia? ¡Qué vergüenza!