Las advertencias del Papa Francisco sobre el ‘invierno demográfico’

El pontífice ha reflexionado sobre esta cuestión en la audiencia general celebrada este miércoles en el Vaticano. El Papa Francisco rodeado de niños.
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El mayor drama de la Europa contemporánea es, sin duda, el llamado ‘invierno demográfico’. Casi ningún país de Europa – excepto Suecia, y es gracias a su nutrida población islámica – tiene la tasa de fecundidad necesaria para garantizar el reemplazo generacional, lo que implica unas consecuencias fácilmente deducibles.

Tras esta crisis demográfica subyacen, en verdad, dos causas: una social y otra económica. La social está ligada a cuestiones tan perceptibles como el desmembramiento familiar, el repudio del sacrificio o la inversión de las prioridades. La económica, mientras, tiene su origen en la pérdida del poder adquisitivo y en la consecuente erosión de las clases medias.

Se trata de una cuestión que preocupa especialmente al Papa Francisco, quien nunca desperdicia la oportunidad de referirse a ella. Así lo hizo en la conferencia de prensa posterior a su viaje a Panamá, en el avión de vuelta a Roma: ‘He visto cómo levantaban a los niños, como diciendo éste es mi orgullo, mi fortuna. En el invierno demográfico que estamos viviendo en Europa, ¿cuál es el orgullo? ¿El turismo, la casa, el perrito? ¿O levantar a un niño? Pensemos en ello’.

En la audiencia general celebrada este miércoles en el Vaticano, su Santidad ha vuelto a referirse a esta crisis demográfica que padece Europa, evocando la misma imagen que evocó en el avión de regreso a Italia: ‘Cuánta dignidad hay en ese gesto y cuán elocuente es para el invierno demográfico que estamos viviendo en Europa. El orgullo de esas familias son los niños, la seguridad para el futuro son los niños: el invierno sin niños es dura’.

Las causas últimas del problema

Ya en el año 2017, el pontífice ahondaba en las causas últimas de la esterilidad generalizada de Occidente; causas que, de acuerdo con él, están íntimamente ligadas a la pérdida de la fe: ‘A partir de la década de los 60 del pasado siglo, las nuevas generaciones han ido rechazando los ideales que hicieron grande a Europa. Se puede decir que han preferido la traición a la tradición. Al rechazo de lo que llegaba de los padres, le ha seguido el tiempo de una dramática esterilidad’.

En cualquier caso, las responsables de esta esterilidad generalizada no son exclusivamente los jóvenes; también los adultos tienen su parte de culpa: ‘No sólo porque en Europa se tienen pocos hijos, y demasiados son los que han sido privados del derecho a nacer, sino también porque nos hemos encontrado incapaces de entregar a los jóvenes los instrumentos materiales y culturales para afrontar el futuro. Europa vive una especie de déficit de memoria. Volver a ser una comunidad solidaria significa redescubrir el valor propio del pasado, para enriquecer el propio presente y entregar a la posteridad un futuro de esperanza’.

Para recuperar la esperanza, pues, nuestra época necesita niños.

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Comentarios
8 comentarios en “Las advertencias del Papa Francisco sobre el ‘invierno demográfico’
  1. Bueno,. Tiene razón , las europeas no quieren hijos, las musulmanas , tendrán 4 por cada 1 que tengan otras, y así, hasta que esté el mundo lleno de musulmanes, y nos razguemos las vestiduras y reprochemos a Dios, ¿ Porqué nos ha caído está desgracia Sr.? Eso es por un lado, por otro, ¿Pues que no dice que no hay que tener hijos como conejas?, Yo no sé si fue cierto o no, que dijo éso, pero tal parece que sí,. ¿Entonces?, Otra razgada de vestiduras, y el Macron que dice que las mujeres educadas no tienen hijos,. No sé si fue doble sentido, pero si fue así, ¿Entonces?, Otra razgada de vestiduras,. Total, que a los que si les va bien, son a los vendedores de ropa.

  2. Invierno demográfico al que contribuye firmando, de forma entusiasta, los convenios y tratados de la ONU imitadores de la natalidad, con aborto y vender incluidos, como el compacto global, o invitando al vaticano a los mayores abortistas del mundo y controladores de la natalidad, como Paul Ehrlich y Jeffrey Sachs, o tildando de conejas a las madres de familia numerosa, o aceptando la sentencia, que invocaba textos suyos susceptibles de interpretación pro eutanasia, condenatoria a muerte al niño Alfie Evans.

  3. Esteban,
    En el Sínodo de los Jóvenes, luego devenido en “de la Sinodalidad” no recuerdo que nadie haya recomendado a los participantes jóvenes, habia algunos pocos entre multitud de “jóvenes de espíritu de 70 a 86 añitos” que se casen y tengan hijos.
    Creo sinceramente que es el único camino, pero no me parece que sea políticamente correcto para agradar a los LGTRGCJGF.

  4. Si todo el NOM trabaja para reducir población mundial de todas las maneras posibles. En modo alguno quieren que suba la natalidad blanca, pero tarde o temprano les saldrá el tiro por la culata. Por otro lado, la inmoralidad reinante de Europa es la primera y casi única causa, que todos se callan. Y este sería trabajo de la Iglesia. Quienes son los dueños ocultos de la pornografía que todo lo destruye? Pronto ya no hará falta casarse para disfrutar del placer sexual.

  5. Es increíble cómo puede decir una cosa, a los dos segundos otra distinta y sin inmutarse.
    Llamó conejas a las madres de familia numerosa (sólo a las católicas. Las hijas de alá están excluidas de sus términos despectivos) y advierte ahora lo del invierno demográfico.
    Invierno y del duro es lo que se está ciñendo sobre la Iglesia. Que se preocupe y ocupe de eso mejor porque vaya tela…

    1. El día en que las llamó «conejas» y no otra palabra, muchos y muchas dormimos malamente. Comprendimos como por un rayo que quienes nos animalizaban desde lejos mientras criábamos a los hijos, se habían hecho de golpe con el «Sancta Sanctorum».

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