Acosan al colegio Juan Pablo II para forzar su cierre

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Ha causado un considerable revuelo mediático que dos colegios de la Fundación Educatio Servanda, en un documento interno, recomienden a sus profesoras que vistan con ciertas condiciones que hace no tanto sería superfluo recordar, es decir, atendiendo a no atentar al pudor y a la modestia

La libertad es un bien curioso, muy distinto del que a veces nos representamos, muy fácil de destruir sin que apenas nos demos cuenta.

La razón es que la libertad se ha convertido, desde hace tiempo, en una consigna hueca, asociada a símbolos y actitudes que, en realidad, no representan la libertad de elegir, sino una elección concreta.

Si, digamos, durante largos años se ha prohibido exhibir una bandera, y al fin se permite, esa misma enseña se acaba asociando a la libertad hasta el punto de que, mientras la veamos ondear por todas partes, seguiremos creyendo que somos libres aunque ya no pueda izarse ninguna otra.

Durante muchos años -siglos, en realidad- la modestia y el pudor se han considerado virtudes socialmente deseables, muy especialmente en la etapa de formación de la persona. Naturalmente, para un cristiano siguen siéndolo, pero cuando la sociedad entera estaba empapada de cristianismo, la norma moral se convertía con total naturalidad y a menudo, en norma positiva, en imposición.

Con el cambio de mentalidad se vino a asociar ‘libertad’ a prescindir de estas esporádicas imposiciones a favor de estilos que, no creo que pueda discutirse, han acabado por sexualizar hasta el hartazgo cada aspecto de nuestra vida en común. Si esto es o no un ‘logro’ no es tema de este artículo, aunque sí debería serlo para muchos otros.

El caso es que esta nueva licencia, al romper imposiciones, vino a asociarse con la libertad, hasta el extremo de que al convertirse en una imposición lo que antes estaba prohibido hemos perdido la libertad sin advertirlo.

‘Diversidad’ es una palabra-conjuro de la modernidad. Y, sin embargo, en mucho tiempo no se había impuesto una uniformidad de pensamiento e ideas como en nuestro tiempo, y si no somos capaces de verlo en toda su escandalosa desvergüenza, sencillamente porque es el reverso de la antigua situación.

Así, ha causado un considerable revuelo mediático que dos colegios de la Fundación Educatio Servanda, en un documento interno, recomienden a sus profesoras que vistan con ciertas condiciones que hace no tanto sería superfluo recordar, es decir, atendiendo a no atentar al pudor y a la modestia.

Pero leyendo los ‘reportajes-denuncia’ de medios como eldiario.es, Público o esa cadena de todos los madrileños, TeleMadrid, se diría que les han pedido que vengan con hiyab. Rectifico: si un colegio musulmán concertado pidiera eso, quizá sería noticia en algún medio, pero desde luego en ninguno de los citados.

La información de eldiario.es, en concreto, comenta en un tono que imaginamos entre irónico y horrorizado que uno de estos colegios «ya ha sido protagonista de varias polémicas por ofrecer extraescolares de ganchillo solo para chicas». ¡Dios mío, qué escándalo, con la de chicos que se mueren por aprender a tejer!

Lo crucial no es aquí si nos parece bien o mal, oportuno o inoportuno, las normas («recomendaciones flexibles», insisten desde Educatio Servanda) antedichas. Eso es indiferente, porque nadie está obligado a trabajar en esos colegios, todos los centros educativos pueden tener su línea y método propio y se trata meramente de una cuestión de libertad.

A menos, naturalmente, que vestir de forma no escandalosa se haya convertido en un nuevo pecado, y ese parece ser el caso. No se trata de una virtud, ni siquiera de una opción indiferente que puede elegirse o no; pretender algo tan elemental es, directamente, un motivo para que le nieguen el concierto, sino para que lo cierren directamente.

Y este es el centro de todo el debate, que no se trata de elegir entre posibles modelos educativos: hay una sola manera de pensar, y es obligatoria. Irán al colegio de sus hijos representantes de grupos LGTBI para hablarles de las bondades de la ‘sexualidad alternativa’, les animarán a ‘explorar’ su sexualidad con 8 años y les propondrán ‘juegos’ para que ‘experimenten’ algún reprimido deseo de identificarse con el sexo contrario al biológico. Pero eso no solo no se convertirá en noticia, sino que se hará obligatorio, por ejemplo, con las leyes sobre teoría de género aprobadas en la Comunidad de Madrid, para todos los centros.

Que el director de TeleMadrid, responsable de uno de los reportajes sobre la escandalosa actitud de un centro que osa recomendar pudor en sus profesoras, lo haya sido antes de 13TV, la cadena de la Conferencia Episcopal, es solo un detalle más para que abramos los ojos sobre la inefable tibieza cobarde de nuestra jerarquía.

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Comentarios
18 comentarios en “Acosan al colegio Juan Pablo II para forzar su cierre
  1. A mi lo que me parece increíble es que «recomienden» que en verano no se lleve calzado «excesivamente abierto». O sea, que las sandalias incitan a lujuria, por lo menos. He comentado la noticia con mi hija y se ha echado a reír. Por no hablar del uso de vaqueros, solo para hombres.

  2. Vaqueros sólo para hombres??? No pone eso!!!! Además, en todos los trabajos hay un código de vestimenta, y en algunos, hasta uniforme. La pregunta es?? Que quiere tapar la comunidad de Madrid para tener que sacar cortinas de humo? Porque suele coincidir.

  3. ¿ Porqué dices que son judeomasones ? ¿ Puedes aportar información que así lo acredite ? En cualquier caso el pudor y la modestia son virtudes humanas y cristianas, que preservan la intimidad de la persona. Las exigencias concretas del pudor y la modestia podrán ser discutibles, pero mejor no ridiculizar, y menos en una época de banalización de la sexualidad que nos transforma a los seres humanos en meros objetos placenteros para ser más fácilmente manipulables por el poder de turno.

  4. El Monseñor BienQueda de turno dejará seguramente caer esas escuelas, porque les indisponen con sus protectores los politicastros y gacetilleros. Y luego las ovejas mudas tendremos que marcar religiosamente la X para que el Sacro Colegio BienQueda siga con su tren de vida. Pues a lo mejor este año resulta que no.

  5. «O sea, que las sandalias incitan a lujuria, por lo menos.»
    Claro, por que la recomendaciones del Colegio son fruto de mentes calenturientas proto-inquisitoriales (y eso es para ser biempensantes).
    Como cualquier empresa privada tiene derecho a tener su dress-code. Si es acertado o menos, ya es otro tema. Pero buscarle consecuencias conspiranoicas dice mucho del emisor del mensaje.

  6. Así es, Silvia. En las Empresas importantes te instan a vestir bien, no de cualquier manera. Y me parece lógico que un/a docente vaya vestido con dignidad. Y un pantalón vaquero no es correcto ni lo ha sido nunca hasta llegar al horterismo actual. Muy bien que se recuperen las buenas costumbres. A ver si ganamos un poco de elegncia, que el panorama que se ve cuando salimos a la calle es para echarse a llorar.

  7. Curiosamente si una señora de creencia musulmana lleva su pañuelo, o su velo, o el burka no pasa nada, es una cuestión cultural y de sus creencias que todos tenemos que respetar, pero a lo que queremos y creemos los cristianos siempre al cuello. Mi hija va a ese colegio y a nadie le imponen trabajar allí, a todo el mundo le proponen seguir las normas de conducta y vestimenta igual que pasa en mi empresa y no pasa más. Pero claro si con esto queremos tapar otras cosas siempre nos viene de perlas, porque siempre somos y seremos el enemigo a batir, al fin y al cabo el cristianismo les pone en un espejo su miseria humana. No soy admirador precisamente de la señora Cifuentes por muchas cosas pero, esto solo hará que el PP vaya socavando cada vez más la poca credibilidad del partido y siga perdiendo votantes. Ellos sabrán, nosotros sabemos que tenemos que sufrir sí o sí.

  8. Que TeleMadrid haga un reportaje sobre ese gran asunto está en coherencia con la degradación y la orientación de esa cadena desde que cambiaron la dirección. Un programa especialmente repugnante e indigno, por su descomunal falta de respeto y competencia, es el que se dedica a los crímenes. El que se dedica a la Historia es una sarta de gracietas chelis y canallas a costa de los personajes o hechos históricos, es decir, una vergüenza. ¿Cómo no va a ser de interés para la dirección poder desacreditar a un Colegio porque recuerde la forma correcta de vestir?
    Por cierto, es también una falta de respeto que algunos presentadores aparezcan con chaqueta, vaqueros y zapatillas de deporte. Si no lo entiende el director, nadie se lo podrá hacer entender, porque es una cuestión de educación.

  9. Para Alejandro Galván y Blanca: no es una empresa privada, es un colegio concertado sostenido con fondos públicos. Y yo apoyo a los colegios concertados, que conste. Y lo del «calzado excesivamente abierto» (literal) es de mentes calenturientas, por decirlo suavemente…

  10. Y los colegios concertados, con fondos que salen en última instancia de los bolsillos de los contribuyentes, en su gran mayoría padres de alumnos, ¿ No pueden tener ideario, código de buena conducta, de buenas prácticas, de bien vestir ? ¿ Sólo es admisible el borreguismo del todos café ?

  11. Pues a mi parece muy bien. De hecho creo que sería mejor incluso que las profesoras usaran abbaya, como en Arabia Saudí: es cómoda, fresca y muy elegante e impide que esos pervertidos alumnos piensen en sus lascivos empeines.

  12. Pues yo creo que es una buena propaganda para esos colegios. Van a tener más solicitudes, estoy seguro.
    El problema será que la Comunidad de Madrid le retire el concierto. Eso sí podría ser un problema para su subsistencia.
    La solución de estos problemas está en la financiación directa a las familias de la educación de sus hijos (vía cheque escolar o desgravación fiscal)

  13. El vestir correctamente, de acuerdo con el lugar en donde estás, es más cuestión de educación que de moral (aunque también, porque la moral entra dentro de la educación general). Y el que no haya recibido esa educación, que desgraciadamente son muchísimos en esta época en que vivimos, no lo va a entender.
    Por ejemplo: las chanclas son para ir a la playa, no para dar clases. No veo porqué esto les causa tanto asombro a algunos.

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