Sor Lucía de Fátima fue testigo de apariciones de la Virgen y el Niño Jesús en España

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En sus primeros años de vida religiosa en España, Sor Lucía, vidente de Fátima, fue testigo de nuevas apariciones de la Virgen María y el Niño Jesús quienes le pidieron extender la devoción de los cinco primeros sábados de mes en reparación al Inmaculado Corazón de María.

Tras las apariciones de Fátima en Portugal, Sor Lucía ingresó al noviciado de la Congregación de las Hermanas Doroteas en Pontevedra, España. Allí presenció varias apariciones de la Virgen y el Niño, la primera ocurrió el 10 de diciembre de 1925 en su habitación.

Según Emilio Rodríguez, delegado diocesano del Apostolado Mundial de Fátima, la Virgen María pidió a Sor Lucía que “extendiera la devoción de los cinco primeros sábados de mes”.

Esta devoción consiste en que, el primer sábado de cada mes durante cinco meses, la persona se confiese, reciba la comunión, rece el rosario y dedique 15 minutos a la oración para desagraviar el Corazón Inmaculado de María.

La Virgen prometió “asistir a quien realice la devoción de los cinco primeros sábados de mes, en la hora de su muerte, con todas las gracias necesarias para que se salve su alma”, explicó Rodríguez a ACI Prensa.

Sor Lucía contó de la aparición a su superiora, su nuevo confesor y también a su antiguo confesor en Portugal. Todos le aconsejaron prudencia y esperar a ver si las apariciones se repetían.

La vida de novicia de la vidente de Fátima siguió con normalidad. Sin embargo, desde hacía algunos meses Sor Lucía se encontraba con frecuencia con un niño en los alrededores del convento.

Ella intentaba enseñar al pequeño a rezar el Avemaría y le animaba a que fuera a una iglesia cercana para rezar la jaculatoria: “Oh Madre mía del Cielo, dadme a vuestro Niño Jesús”.

El 15 de febrero de 1926 volvió a encontrarse con el pequeño y le preguntó si había rezado lo que ella le enseñó, a lo que el niño le contestó: “¿Y tú has propagado por el mundo aquello que la Madre del Cielo te pedía?”. En ese momento la religiosa supo que se trataba del Niño Jesús.

El Niño pidió a Sor Lucía hacer lo que su Madre le había pedido en su aparición: extender la devoción de los cinco primeros sábados de mes porque “muchas personas comenzaban esta devoción, pero pocas la terminaban”, explica Rodríguez.

Sor Lucía habló con su confesor sobre estas apariciones y el sacerdote le hizo algunas preguntas, entre ellas, por qué debían ser cinco sábados. La religiosa pidió una respuesta al Señor que le contestó en una hora de oración ante el Santísimo Sacramento.

Rodríguez dijo a ACI Prensa que el Señor le explicó a Sor Lucía que “la devoción de los cinco sábados se debe a que hay cinco tipos de ofensas y blasfemias contra el Inmaculado Corazón de María”.

Estas blasfemias son:

  • contra su Inmaculada Concepción,
  • contra su Virginidad perpetua,
  • contra su Divina Maternidad al rechazar reconocerla como Madre de todos los hombres,
  • las ofensas de aquellos que tratan de sembrar públicamente en los corazones de los niños indiferencia o incluso odio a la Virgen y
  • las ofensas de quienes la ultrajan en sus santas imágenes.

En 1929 Sor Lucía se trasladó a la ciudad española de Tuy para seguir su formación en la Congregación de las Hermanas Doroteas. Allí también vio la Virgen, pero esta vez con su Corazón Inmaculado entre las manos.

En esa oportunidad, la Virgen recordó de nuevo a la religiosa la importancia de reparar su Inmaculado Corazón a través de los cinco primeros sábados de mes.

El Convento de las Hermanas Doroteas de Pontevedra actualmente es conocido como la Casa Santuario del Inmaculado Corazón de María.

En 1948 Sor Lucía volvió a Portugal e ingresó en el Carmelo de Santa Teresa de Coimbra, como religiosa carmelita, donde murió en el año 2005 a los 97 años.  En el año 2008, el Cardenal José Saraiva Martins inició su causa de beatificación.

Aprobación eclesial

Emilio Rodríguez, delegado diocesano del Apostolado Mundial de Fátima, explicó a ACI Prensa que “el Vaticano ha reconocido estas apariciones como parte del mensaje de Fátima, por ser de la misma vidente”.

Javier Aguado, responsable de prensa del Arzobispado de Santiago de Compostela, también dijo a ACI Prensa que la Santa Sede reconoce estas apariciones de la Madre de Dios en Pontevedra y Tuy.

Uno de los momentos más importantes en el reconocimiento de estas apariciones fue la visita que el entonces Nuncio Apostólico en España, Cardenal Manuel Monteiro de Castro, hizo al convento de las Doroteas en el 75 aniversario de las apariciones en el año 2000.

Según explicó Emilio Rodríguez, el Nuncio “dejó por escrito su aprobación. Nos dijo que Fátima y Pontevedra se complementaban perfectamente porque seguía el mismo mensaje de la Virgen de 1916 en Portugal”.

En una placa en el convento se guarda esta bendición papal: “Su Santidad el Papa Juan Pablo II saluda con particular afecto al Apostolado Mundial de Fátima en España y a los participantes de la Semana mariana, organizada con motivo del 75 aniversario de la aparición de la Santísima Virgen a la hermana Lucía en el hoy Santuario del Corazón Inmaculado de María, en Pontevedra”.

(Artículo publicado originalmente en Aciprensa)

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Comentarios
12 comentarios en “Sor Lucía de Fátima fue testigo de apariciones de la Virgen y el Niño Jesús en España
  1. Me gustaria saber por qué en los medios «oficiales»católicos no se dice que la foto que se publica aquí (y en tantas otras partes) es la de una mujer completamente diferente en sus rasgos físicos a la Sor Lucia de los años 40 y 50 (que tambien hay algunas fotografias). Será que Sor Lucia se habrá hecho una cirugia plastica en aquellos años? Cualquier persona no ciega, con un mínimo de honestidad intelectual y con buena fe se da cuenta, al ver las dos fotografias juntas, que no se trata de la misma persona. Seguramente censurarán, pero no se puede tapar el sol con un dedo.

  2. Ya que sea habla de Fátima, lo aconsejable sería que se pusiera la foto de la verdadera hermana Lucia, no la de la monja que posteriormente la suplantó.

  3. la verdad solo escuche sobre ella, no la conoci y si es verdad que la foto real de ella no es la misma persona de la de ahora! ALGO OSCURO ENCIERRA TAL MISTERIO! como tambien he visto obras en esta que no llevan LA VERDAD¡! como tambien complicidad en el modernismo ahora que hace la guerra a la iglesia desde adentro! por esto, en lo oculto y en lo oscuro no me fio! y me mantengo FIEL a JESUS¡ Y A MARIA¡

  4. la verdad solo escuche sobre ella, no la conoci y si es verdad que la foto real de ella no es la misma persona de la de ahora! ALGO OSCURO ENCIERRA TAL MISTERIO! como tambien he visto obras en esta que no llevan LA VERDAD¡! como tambien complicidad en el modernismo ahora que hace la guerra a la iglesia desde adentro! por esto, en lo oculto y en lo oscuro no me fio! y me mantengo FIEL a JESUS¡ Y A MARIA¡

  5. Coincido totalmente con las personas que han comentado que , la fotografia que aparece encabezando esta noticia, NO es la de la verdadera sor Lucía, es la de uan persona suplantadora que han colado como la verdadera Sor Lucía.
    La Virgen María pidió que se hiciese público en 1960, no sabría precisar ahora mismo si era el 3º Secreto de Fátima, peró sí revelar lo escrito en una carta dictada por la Virgen, y ni Juan XXIII, ni ninguno otro hasta el día de hoy, lo quisieron hacer. Además, por más que Francisco, y sus antecesores nos quieran hacer creer que se ha cumplido el mandato de que se consagrara Rusia al Inmaculado Corazón de María, nunca se ha hecho,a pesar de los paripés referentes a que la consagración ya se hizo.
    Y no digamos nada sobre la revelación del( falso 3º secreto) , falso del todo, que creo recordar que se hizo en los primeros años del siglo XXI, en tiempos de Juan Pablo II, creo que realizado por el cardenal Angelo Sodano, (por cierto, uno de los muchos cardenales que recibía frecuentemente maletines con dinero de la Legión de (no) Cristo).

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