El escrito destaca la gravedad de la iniciativa adoptada por la Consejería de Políticas Sociales y Familia de la Comunidad de Madrid que pretende imponer una multa de 1.000 euros al director de un centro católico que expresó en una carta su opinión sobre la ley LGTB aprobada por la Asamblea de Madrid.
El escrito de alegaciones a la sanción a Carlos Martínez, director del colegio Juan Pablo II de Alcorcón, fue presentado en el día de ayer en el registro de la Consejería de Políticas Sociales y Familia de la Comunidad de Madrid.
El pasado 22 de diciembre, fue entregado en el centro el acuerdo de inicio de expediente sancionador en el que se propone una multa de 1.000 euros al director del colegio después de que éste enviara una carta a las familias en la que exponía su opinión sobre la nueva ley LGTB aprobada en la Comunidad de Madrid.
Martínez denunció en su carta los intentos de imponer una ideología a fuerza de sanciones y el dogmatismo de acusar de discriminación a quien piensa diferente: “¡Qué barbaridad prescindir de la verdad natural del hombre y del derecho inalienable de los padres a la educación de los hijos! ¡Qué dogmatismo acusar de discriminación a quien piensa diferente!».
La Fundación Educatio Servanda, promotora del colegio Juan Pablo II, destaca en un comunicado que la Consejería de Políticas Sociales ha entendido que las opiniones del director del centro sobre la ley LGTBi son susceptibles de sanción según esa misma ley. En el escrito de la Consejería entregado al centro, se propone dicha sanción porque en la carta el director «se muestra contrario a las legislaciones más recientes aprobadas por la Asamblea de Madrid».
En el escrito de alegaciones se pone de manifiesto la gravedad de la iniciativa adoptada por la Consejería de Políticas Sociales que «infringe gravemente el ordenamiento jurídico» y supone «una violación flagrante» de las normas relativas a los derechos fundamentales y a las libertades que la Constitución reconoce, así como de las normas de los tratados y convenios internacionales sobre las mismas materias.
En las alegaciones se destaca que el centro es un colegio concertado de ideario católico cuya propuesta está «abierta a todos los que comprendiendo y valorando la enorme contribución del humanismo cristiano a nuestra civilización, quieran transmitir a sus hijos estos valores, tengan un pleno respeto por su ideario y demuestren apreciar y compartir una propuesta educativa cualificada».
El escrito de alegaciones termina pidiendo a la Consejería que deje sin efecto la resolución acordada. En su comunicado, la Fundación Educatio Servanda señala que la inspección de la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid no encontró ninguna irregularidad en el centro y que la Fiscalía ha archivado las actuaciones tras considerar que los hechos no eran en modo alguno constitutivos de infracción.
Ayuda a Infovaticana a seguir informando
Bien hecho. Lo que la Conferencia Episcopal y el Arzobispado de Madrid deberían hacer, y no hacen, lo está llevando a cabo Educatio Servanda.
Que Dios os bendiga.
La Conferencia Episcopal puede y debe personarse en el expediente y alegar. Hoy es un colegio, mañana será otro. ¿ O es que sólo sirve la CEE para manifestar adhesiones incondicionales a un régimen, el bergogliano, que posibilita multas como esa, al tildar de fundamentalista a quien no acepta la sumisión al pensamiento único ?
En el escrito de la consejería proponen la sanción al director porque «se muestra contrario a las legislaciones más recientes aprobadas por la asamblea de Madrid»… o sea que no solo hay que cumplir la ley sino tener además una adhesión inquebrantable a la misma. Creía que en una democracia podías discrepar racionalmente de lo que se aprobaba en el parlamento…
En La Gaceta viene esta noticia:
http://gaceta.es/noticias/los-criticos-pp-preparan-gran-numero-enmiendas-13012017-0248
No me lo creeré hasta que no lo vea, y no voy a votar al PP ni de casualidad, hasta que Cifuentes, Rajoy, Maroto y compañía se larguen de una vez
El «Nuevo orden mundial»,que ni es Nuevo,ni es orden ni es mundial «,unido a la masonería,a la dictadura del relativismo, al pensamiento único y la New Age,donde el hombre se coloca en el lugar de Dios y crea la verdad que más le conviene.Es el amor egoísta,que se reduce a la satisfacción trivial del placer.
Hoy la idea de paz se utiliza como una especie de «anestesia del pensamiento».
Unidos en Cristo que es el camino la verdad y la vida para todos,¡venceremos!
La Conferencia Episcopal, debe de abandonar los caparreos de la época de Rouco y mirando hacia Roma, comenzar a trabajar por el Evangelio de forma integral.
Retomar sus responsabilidades con la valentía que corresponde.
Ahí ya tienen por donde empezar.
Los Católicos Españoles necesitamos Pastores.
A la Cifuentes, no hay quien la sancione de las barbaries que está cometiendo?, y la Conferencia Episcopal a qué esta?, ¡que vergüenza!
La CEE ahora está muy preocupada por las cuentas, no por la sanción, que pretende amedrentar y cerrar colegios que se oponen al pensamiento degradante único.