«Los cristianos no pueden volver a sus casa porque el Estado Islámico ha dejado bombas en los refrigeradores, han dejado muñecas para que exploten», cuenta Luis Montes, misionero en Irak, a InfoVaticana. Asegura que la victoria de Trump es «una buena noticia para Medio Oriente».
El director de InfoVaticana Gabriel Ariza entrevista al padre Luis Montes, un argentino misionero del Instituto del Verbo Encarnado en Irak. El sacerdote cuenta a InfoVaticana la terrible situación que siguen viviendo los cristianos en Irak, perseguidos por el Estado Islámico desde hace más de cinco años.
El misionero explica que los atentados continúan matando a cientos de cristianos todos los días. El pasado mes de octubre, por ejemplo, hubo 128 atentados en una de las ciudades del sur del país. Montes cuenta ésta es la zona más peligrosa, mientras que las ciudades ocupadas enteramente por el Estado Islámico los cristianos se pueden contar con los dedos de las manos, ya que viven escondidos.
Sin embargo, Luis Montes asegura que «finalmente el Estado Islámico está siendo derrotado» y que los cristianos han recobrado la esperanza de volver a sus hogares, una tarea complicada, ya que los terroristas han dejado minas escondidas incluso dentro de las neveras de las casas o en los muñecos. «Los cristianos no pueden volver porque el Estado Islámico ha dejado bombas en los refrigeradores, han dejado muñecas para que exploten», cuenta el misionero.
Según Luis Montes, la victoria de Trump es «una buena noticia para Medio Oriente», aunque defiende que que se debe llegar a un acuerdo con Irán. El sacerdote argentino explica también que no existen rebeldes moderados, y que todos son terroristas. Sin embargo, a pesar de todo, los cristianos «perdonan antes de que uno les hable de perdón» ya que «al haber perdido todo, se han acercado a Dios».
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Acertadamente ya lo dijo el cardenal Sarah, el islam y las lgtb son obra del maligno. Que Dios los castigue por sus malos y perversos actos.
Yo pido que se conviertan. Dios respeta la libertad humana y no puede perdonar sin previa conversión. El martirio no hay que buscarlo. Sería otro pecado.
Esta es la diferencia entre un cristiano y cualquier otro miembro de las llamadas «religiones».
El perdón y pedir por su conversión no lo hace nadie que no tenga a Dios en su corazón.
Entonces ¿Cual es la religión de paz…?
No nos engañemos, Dios aunque podría pedirnos algo que El no hiciera, no lo hace. Dios no perdona a quien no pide perdón arrepintiéndose y detestando el mal hecho. A los católicos no se nos pide que perdonemos a lo tonto y que porque sí, eso es un contrasentido. Es un buenismo que no conduce a que el ofensor recapacite y cambie. Se nos pide que perdonemos a quien nos pide perdón de forma arrepentida pero, eso sí, imitando la Misericorida de Dios , que estemos siempre dispuestos a perdonar al prójimo. Estar siempre dispuesto a perdonar no es lo mismo que perdonar; por el otro sistema de te perdono sin más, todos estamos automáticamente salvados, hayamos hecho lo que sea y sin arrepentimiento, y el Infierno no existe. Por otra parte, Dios, moralmente hablando, no conoce «Estados» islmámicos o de ningún otro tipo,conoce personas individuales responsables de sus actos y sí que puede, por la oración de otros, perdonar a un colectivo de personas (Abraham intercendiendo por Sodoma) pero pueda que no haya suficientes justos.
De todos modos, como dijo ya Casiano hace muchos siglos, no es bueno decir lo que Dios debe hacer, cuando nosotros no somos los ofendidos.