La Comunidad de Madrid continúa su investigación al centro concertado Juan Pablo II de Alcorcón que, en una carta enviada a las familias, advirtió sobre la «Ley de Ideología de Género aprobada en la Asamblea de Madrid» que «prescinde de la verdad natural del hombre y del derecho inalienable de los padres a la educación de sus hijos».
El pasado 9 de septiembre, una carta enviada por la dirección del colegio católico concertado Juan Pablo II de Alcorcón a las familias advertía del dogmatismo que supone acusar de discriminación a quien piensa diferente.
Unas semanas después, este centro está siendo investigado por la Comunidad de Madrid tras haber señalado en su carta los peligros de la ideología de género y haber denunciado los intentos de imponer una ideología a fuerza de sanciones.
Tras la denuncia de una asociación LGTB, la Consejería de Educación ordenó una inspección al colegio. Según ha informado la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, la Consejería de Políticas Sociales, por su parte, ha abierto una investigación reservada para ver si el contenido de la carta puede conculcar la ley contra la «LGTBfobia» aprobada en la Asamblea de Madrid el pasado mes de julio.
La Comunidad de Madrid también ha enviado a la Fiscalía la carta del colegio Juan Pablo II para que investigue si el contenido puede incurrir en posible delito.
Peligra el concierto del colegio
La investigación de la Comunidad podría culminar con la retirada del concierto al colegio. «Si esta investigación termina en que hay responsabilidades se pondrá la correspondiente infracción», ha asegurado la viceconsejera de Organización Educativa, María José García Patrón en declaraciones recogidas por la Cadena SER.
«El profesorado de los centros concertados atiende al estatuto de los trabajadores. En estos centros también los actos de discriminación por razón de orientación sexual y LGTBifobia, si son llevados a cabo por el titular del centro, es de aplicación el artículo 62.2 de la LOE que asegura que es una causa de incumplimiento grave lesionar los derechos reconocidos en la Constitución, en los artículos 16 y 20», explica García Patrón.
Hasta el momento la inspección no ha apreciado indicios de incumplimiento del concierto aunque la investigación continúa abierta y se están revisando las ofertas de actividades extraescolares, optativas y cumplimiento de currículos, según informa la Cadena SER.
El traslado de la carta a la Fiscalía es un paso más en la persecución a este centro, que comenzó con la denuncia de la asociación LGTB Arcópoli, que exigió a la Comunidad de Madrid la revisión del concierto educativo que tiene con el colegio Juan Pablo II.
Denunció el ‘despropósito’ de imponer una ideología
El colegio Juan Pablo II de Alcorcón envió el pasado 9 de septiembre una carta a las familias del centro en la que señalaba que “nuestros políticos se entretienen en generar problemas inexistentes y complicar las cosas” y en lugar de “defender la familia y nuestras raíces cristianas”, se ocupan en desarrollar “legislaciones tan absurdas como la Ley de Ideología de Género aprobada en la Asamblea de Madrid”.
En la carta se denunciaba la «barbaridad» que supone «prescindir de la verdad natural del hombre y del derecho inalienable de los padres a la educación de los hijos«. Asimismo, se afirmaba que la ideología de género es una maquinación condenada a la disolución y al fracaso.
También se calificó de «despropósito» pretender imponer una ideología a fuerza de sanciones y señaló que “el parecido con el fanatismo terrorista es inquietante”. Se celebraba, asimismo, que existan “obispos valientes que tienen clara su función pastoral de educadores y testigos de la verdad” en referencia a los obispos de Alcalá de Henares y Getafe, que condenaron el “ataque a la libertad religiosa y de conciencia” que suponen las leyes LGTB aprobadas en los últimos meses en la Comunidad de Madrid.
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No puede haber peor cosa que un gobierno de centro-derecha sometido a lo que quiere la izquierda radicalizada. Si aquellos que confían en un buen hacer por parte de partidos como el PP se encuentra así ¿a dónde vamos o nos quieren llevar?
El poder está para suavizar diferencias y hacer posible la convivencia de formas de pensar contrarias, no para imponer via ley injusta lo que quieren unas minorías que manipulan a toda la sociedad. La Sra. Cifuentes se debería marchar a su casa y con ella su equipo de gobierno. El «maricomplejismo» es deletéreo para los propios que lo practican y que van más allá de lo que hace la izquierda radical. Eso sí las leyes siempre caen sobre los mismos, no sobre los dirigentes que se van de rositas generalmente por las corrupciones y las corruptelas y, cuando éstas son económicas, tampoco devuelven un euro de lo robado ni se les embargan bienes.
Desde luego, con mi voto no ha llegado al poder ningún miembro del partido de Poncio Pilato (PP), porque hay que «Obedecer a Dios antes que a los hombres». Si Cifuentes está en donde está, es por la situación de paganismo e incoherencia con la fe, que padece la España actual. Lamentable.
Entre la clase política se ha extendido un populismo de género tan feroz que se atreven a legislar haciendo caso omiso de criterios médicos y morales, e incluso de la legislación vigente: «Los poderes públicos garantizan el derecho que asiste a los padres para que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones» (C.E. Art. 27.3).
Llevo años diciéndolo: los del PP se parten la caja pensando en los católicos que les votan. Al PP lo único que le importa es preservar la economía capitalista. Lo demás -TODO LO DEMÁS- es negociable. Y de hecho han ido renunciando a todo para mantenerse en el poder. Hace años su programa hablaba del humanismo cristiano. ¿Qué queda de eso? Simples gestos para que les sigáis votando los que todavía os creéis sus mentiras. ¿Qué hace que un cristiano deba votar al PP antes que a otro partido? Ná de ná.
Eso es muy bueno para la Iglesia en general y la de España en particular. A ver si nos enteramos de una vez que el PP es cada vez más pro gender, pro aborto, pro divorcio exprés, etc y, por tanto, anti Iglesia Católica y surge un partido de inspiración cristiana de verdad.
Que espabilada Cristina Cifuentes, nadie le ha dicho que la gran mayoría de los padres de ese colegio han sido votantes suyos. Se cubre de gloria. ¡Al suelo que vienen los nuestros!
Pecaré de optimismo antropológico, pero creo que a esa bruja piruja se la fue la chaveta tras su accidente en la moto……
No hay otra salida: Habrá que sentar las bases para la formación de un partido político que defienda todos eso principios del humanismo cristiano , bien adobado en el compromiso de una profunda política social que se implique con las clases más abandonadas y con los jóvenes sin esperanza.
Lo de crear un partido cristiano es un error. Está demostrado. Por muchas razones. Para mí la principal es que los actos de dicho partido, incluidas sus equivocaciones o las miserias de sus dirigentes, salpicarían a la Iglesia.
En vez de crear estructuras católicas lo que hay que hacer es formar adecuadamente las conciencias de los fieles para que ejerzan responsablemente sus derechos y se impliquen en la vida política a través del partido que a cada uno le parezca. Pero eso cuesta más, es más fácil hacer un partido cristiano y llamar a todos a votarle sin espíritu crítico.
Existe Vox, amigo anónimo