La ‘startup’ estadounidense Swanluv ofrece a las parejas correr a cargo de todos los gastos de su boda con la condición de que si se divorcian, devuelvan todo el dinero con intereses. Los prometidos de Estados Unidos acuden a esta empresa en busca de los más de 10.000 dólares para pagar su boda. Si todo les va bien, nunca tendrán que devolverlos, si por el contrario deciden divorciarse, se verán obligados a devolver todo el dinero prestado más los intereses. El número de matrimonios ha aumentado en un 1,2% en el primer semestre de 2015 respecto al mismo periodo del año anterior. Asimismo, se han firmado más de cien mil divorcios, un 5,6% más que el año precedente. Cabe destacar que en Norteamérica, entre el 40 y 50% de los matrimonios terminan en divorcio o separación. Ante esta situación, “Swanluv” ha visto una oportunidad de mercado, y ha decidido convertir las bodas en un potencial negocio. Para la «startup», los prometidos representan una muy buena oportunidad. Lo que vende esta empresa es un “seguro a la inversa”, es decir, cuando te van bien las cosas recibes, y cuando te van mal, deberás pagar por ello. Además, la compañía ofrece los servicios de un consejero matrimonial que les ayudará a superar los baches que se vayan presentando. En ciertas circunstancias, además, habrá un solo responsable de pagar la cuenta en caso de divorcio. Desde Swanluv han explicado que “el 100% del dinero recaudado de los miembros que después se divorcian se usa para financiar las bodas soñadas de futuras parejas”, aseguran. “Swanluv mantiene el sueño vivo”, señalan.
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