Un seísmo de magnitud 7,5 en la escala de Richter, sacudió Pakistán, Afganistán y el norte de la India el pasado lunes. El terremoto ha dejado más de 290 víctimas mortales y miles de heridos a causa del fuerte temblor. De los tres países afectados, las consecuencias en Pakistán han sido las más devastadoras, dejando un total de 206 muertos. El Papa Francisco ha enviado sus condolencias a las víctimas a través de un telegrama dirigido al Nuncio Apostólico en Pakistán, Mons. Ghaleb Bader. Por su parte, el cardenal y secretario de Estado Vaticano, Pietro Parolin, ha señalado que «Su Santidad el Papa Francisco, se ha entristecido profundamente al tener noticia de la trágica pérdida de vidas en Afganistán y Pakistán como resultado del terremoto en esa región”. «El Pontífice expresa su profunda solidaridad con todos los afectados por este desastre y asegura su oración por los muertos, al igual que por los heridos y los que siguen desaparecidos”, señala el cardenal. Ha concluido diciendo que el Santo Padre invoca bendiciones de consuelo y fortaleza “sobre todos los que lloran la pérdida de sus seres queridos, así como sobre las autoridades civiles y el personal de emergencia que interviene en la labor de socorro». Durante la audiencia general de esta mañana, el Santo Padre ha lanzado un llamamiento por las personas afectadas por el terremoto: «Recemos por los difuntos, sus familiares, y por todos los heridos y las personas sin hogar, que a estos hermanos no les falte nuestra concreta solidaridad».
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