Once grabaciones con cámara oculta que demuestran el tráfico de órganos en las clínicas abortistas habían permanecido ocultas por orden judicial y por las presiones de la multinacional abortista. A pesar de los esfuerzos de la multinacional abortista Planned Parenthood por ocultar la actividad ilegal que se realiza en sus clínicas, se han producido nuevas revelaciones en el escándalo del tráfico de órganos protagonizado por la organización. Once vídeos que habían permanecido ocultos por orden judicial, en los que aparecen directivos de Planned Parenthood confesando el tráfico con órganos humanos, han visto por fin la luz. Tras la publicación de diez vídeos grabados con cámara oculta que demostraban que en las clínicas abortistas de Planned Parenthood se comerciaba con las partes de los fetos descuartizados en los abortos, a la asociación responsable de revelar el escándalo, el Centro para el Progreso Médico, se le prohibió por orden judicial difundir más imágenes fruto de una investigación de tres años a la multinacional abortista. Según aseguran desde el Centro para el Progreso Médico, la asociación no ha sido responsable de la publicación de estos nuevos vídeos, sino que un hacker informático ha obtenido y filtrado las imágenes que el Centro para el Progreso Médico envió al comité del Congreso de Estados Unidos que investiga si Planned Parenthood vende los órganos de los fetos abortados en sus clínicas. ‘No podemos detenerles’ La presión de Planned Parenthood a la justicia para bloquear la publicación de las imágenes grabadas con cámara oculta a directivos de la organización se entiende al conocer el contenido de los vídeos censurados. En uno de estos once vídeos aparece Deb VanDerhei, directora nacional del Consorcio de Proveedores de Aborto, reconociendo que la oficina nacional es incapaz de detener la venta de órganos de los fetos que se lleva a cabo en las clínicas de Planned Parenthood. En otro de los vídeos censurados, una directiva reconoce que existen para los empleados de Planned Parenthood «incentivos financieros» que provienen de la venta de los órganos de los bebés abortados. A esta declaración se une la de Lisa Harris, médico de Planned Parenthood en Michigan, que sin saber que está siendo grabada propone la venta del globo ocular de un feto. Planned Parenthood amenaza a los medios que publican el escándalo Los vídeos han sido publicados, asimismo, en la web GotNews, dirigida por Charles Johnson. Pocas horas después de la publicación, Johnson recibió la notificación de una demanda de inconstitucionalidad de Morrison & Foerster, la empresa que representa a la Federación Nacional del Aborto en su demanda contra David Daleiden y el Centro para el Progreso Médico. La publicación de los vídeos censurados por la Justicia estadounidense se produce el mismo día que el Congreso de los Estados Unidos vuelve a votar una retirada de la financiación pública a Planned Parenthood, que actualmente recibe 500 millones de dólares del Gobierno, a consecuencia de la revelación del escándalo del tráfico de órganos humanos. La multinacional abortista Planned Parenthood está siendo investigada actualmente por el Congreso de Estados Unidos por la publicación de diez vídeos con cámara oculta en los que directivos de la organización reconocen la venta ilegal de órganos humanos a empresas de investigación científica. “Nos hemos vuelto muy buenos en sacar corazón, pulmón, hígado (…) Voy a aplastar más abajo, más arriba, y a ver si puedo tenerlo todo intacto”, son algunas de las declaraciones de los médicos abortistas que no dudan en cometer auténticas atrocidades con los bebés no nacidos para obtener órganos con los que hacen negocio. A continuación puede ver algunos de los vídeos censurados sobre el escándalo del tráfico de órganos:
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Hasta esto logra salir a la luz. No así cualquier comentario u opinión diferente a la del sr. Ariza. Solo él tiene la verdad.
Una posición totalitaria que recuerda mucho las censuras de Stalin, de Castro, de Maduro.
Y luego, esta gente, critica los crímenes del nazismo, comunismo e islamismo. No tienen perdón de Dios.