Poco más de tres millones de ciudadanos irlandeses con derecho a voto están llamados este viernes a las urnas para decidir si aceptan que un «matrimonio puede ser contraído de acuerdo con la ley por dos personas sin distinción de su sexo». De ser aprobado, esa frase sería añadida al artículo 41 de la Carta Magna e Irlanda se convertiría en el primer país del mundo en legalizar el matrimonio homosexual a través de una votación popular. La República de Irlanda ratificó en julio de 2010 la ley de Relaciones Civiles que concedía reconocimiento legal a las parejas de hecho del mismo sexo. En otros países europeos como Alemania, el pasado lunes, el Gobierno avanzó que pretende ampliar los derechos de las parejas homosexuales, aunque descartó la equiparación absoluta con las parejas heterosexuales, incluido el matrimonio. La Iglesia protestante unida de Francia (EPUdF), que agrupa a luteranos y reformados, aprobó el pasado día 17 por mayoría absoluta la posibilidad de bendecir ese tipo de uniones y dejó en manos de sus cerca de 500 pastores la decisión final. Eslovaquia celebró en febrero un referéndum en el que la baja participación, inferior al 22%, invalidó la consulta sobre el matrimonio de homosexuales y la adopción por parte de parejas del mismo sexo. En Croacia en un referéndum celebrado el 1 de diciembre de 2013 los croatas votaron defender la familia como la unión de un hombre y una mujer.
Ayuda a Infovaticana a seguir informando
que buen iniciativa el trato de todos por igual en todos los ámbitos … Ramiro Helmeyer