La Policía ha levantado el despliegue policial que tenía cercada la Mezquita-Catedral de Córdoba al encontrar a la pareja responsable del automóvil de alquiler que había levantado la alerta. Se trata de dos personas de nacionalidad catarí que fueron localizados en un restaurante cercano.
El origen de todo se ha producido cuando el coche quedó en una zona muy cercana al muro sur de la Mezquita-Catedral, un lugar donde no se puede estacionar. Dos personas, al parecer extranjeras, dejaron parado el automóvil, pararon un taxi y se marcharon de la zona. Ese comportamiento inusual fue el que despertó las alarmas y ha generado el despliegue policial que tiene cortadas varias calles en esta zona del Casco Histórico.
La alerta se ha producido sobre las 15.30 y los trabajadores de la Mezquita-Catedral han recibido la orden de abandonar el monumento. Los agentes continuan inspeccionando la zona para descartar un atentado y aseguran que no se han recibido amenazas ni advertencias, como pasa en ocasiones con los atentados. La única puerta que permanece abierta es la de Santa Catalina; no así la del Perdón, que es más próxima a la zona acordonada, según confirmó el deán-presidente del Cabildo Catedral, Manuel Pérez Moya a Abc.es.
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