«Mi marido no es gay»

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Es el título de un reality show sobre mormones homosexuales casados con mujeres que ha levantado ampollas en Estados Unidos.


Según informa La Vanguardia, la polémica está servida con el programa que este domingo estrena el canal americano TLC, Mi marido no es gay, cuyo título ya capta la atención de quien lo ve. Se trata de un show en el que cuatro hombres mormones, tres de los cuales están casados, aseguran haberse sentido atraídos por otros hombres pero que por motivos religiosos y morales han decidido resistir la tentación.

La Alianza Gay y Lésbica Contra la Difamación de EE.UU (GLAAD). asegura que este espacio es «totalmente irresponsable» y desde la página Change.org se han recogido casi 100.000 firmas para que el programa no vea la luz. En un comunicado de GLAAD, su presidenta Sarah Kate Ellis, asegura que «nadie puede cambiar a quien ama y, más importante aún, nadie tiene que verse obligado a ello».

Por su parte, los representantes del canal de televisión han asegurado ante la prensa que «las normas que aparecen en el especial de una hora de duración revelan las decisiones que han tomado y hablan sólo en su nombre». No obstante, cabe añadir que TLC es conocida por emitir programas de telerrealidad que generan controversia, como el de Here comes de Boo Boo. En este caso el show fue cancelado al saberse que la madre de la niña protagonista estaba manteniendo relaciones con un hombre condenado por abusos a menores.

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Comentarios
0 comentarios en “«Mi marido no es gay»
  1. La libertad de expresión de la que tanto se habla estos días implica que también puedan expresarse los que teniendo tendencias homosexuales han decidido tomar otro camino.

  2. Las personas con orientacion homosexual que deciden no secundar su tendencia e intentan por medios, humanos y espirituales, aproximarse a la normalidad heterosexual para mi tienen un gran valor porque muestran que es posible superarse con la ayuda de Dios, ejercitan su libertad hacia el bien, sufren una cruz intima no visible y quiza por ello mas meritoria y en defintiva, aman. Es un camino evangelico, arduo, siempre cuesta arriba. Esta opcion es poco frecuente, la mayoria deciden seguir al mundo, pero conozco algun caso.

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