Filipinas: Ordenan 7 sacerdotes en una catedral destruida por el tifón

|

image_large

La  Archidiócesis de Palo quiso ofrecer con este gesto un signo de esperanza y fe en el futuro por parte de la Iglesia y los fieles católicos.

«Es posible que hayamos perdido todo, pero nuestra fe es más fuerte que nunca. Ninguna prueba, ninguna tormenta, ni tifón podrán destruir nuestra determinación de tener fe en Jesucristo. Y hay que demostrarlo con hechos. »  Con estas palabras se explicaba el P. Amadeo Alvero al servicio de información de la conferencia de obispos filipina.

Dieciocho días después del terriblemente destructivo Tifón Haiyan, en la parte central del archipiélago de Filipinas, mientras que la reconstrucción apenas ha comenzado y será larga, la Archidiócesis de Palo quiso manifestar en una «acción concreta» que la Iglesia y los fieles no han perdido la fe en el futuro. De este modo el obispo John Du decidió ordenar a 7 nuevos sacerdotes.

El pasado lunes, 25 de noviembre, en una catedral al aire libre (el techo de la década de 1960 no ha resistido las tormentas) y delante del altar de estilo barroco, aún en pie, los siete nuevos sacerdotes fueron ordenados ante una multitud de fieles. Los siete nuevos sacerdotes se incorporan a un presbiterio de unos 140 sacerdotes.

 

Ayuda a Infovaticana a seguir informando

Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

 caracteres disponibles