¿Se acerca el reemplazo del Cardenal Ortega?

|

ortega-300x219

El cardenal cubano Jaime Ortega ha sido reemplazado como vicepresidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba, fomentando especulaciones de que el papa Francisco designará pronto a su sucesor en la nación comunista.

Ortega presentó su renuncia al arzobispado de La Habana en el 2011 tras cumplir 75 años, como lo requieren las reglas de la Iglesia. Pero el papa Benedicto XVI le pidió que permaneciera en su puesto hasta después de su visita a Cuba y del 400 aniversario de la santa patrona de la isla. Ambos eventos tuvieron lugar el año pasado.

Y, después de su elección en marzo, Francisco pidió además a Ortega que conservara su puesto y le diera tiempo para considerar su reemplazo. Pero ahora se dice que el Papa está listo para nombrar a un nuevo arzobispo de La Habana y —algo que es muy probable, aunque técnicamente no sea necesario— un nuevo cardenal.

La conferencia de obispos anunció el jueves que había reemplazado a Ortega como vicepresidente cuando eligieron una nueva junta directiva en su reunión de noviembre. Prácticamente todos los demás miembros fueron reelectos. Cuba tiene 11 diócesis.

“Está claro que se están preparando las condiciones para su reemplazo”, dijo Enrique López Oliva, profesor retirado de la Universidad de La Habana que enseñaba historia de la Iglesia.

Ortega, quien fuera nombrado cardenal en 1994, recibió tanto elogios como críticas mientras trataba de expandir el papel de la Iglesia y al mismo tiempo evitar choques con un régimen que fue oficialmente ateo de 1962 a 1992 y todavía mantiene controles extremadamente estrictos sobre las actividades religiosas.

Sus encuentros con el gobernante Raúl Castro en el 2010 ayudaron a la liberación de más de 125 presos políticos, pero casi todos fueron directamente de la cárcel al aeropuerto internacional de La Habana, de donde partieron al exilio en España.

Dagoberto Valdés, director de la revista católica laica Convivencia, dijo que se ha mencionado a alrededor de media docena de obispos como posibles sucesores, pero advirtió que “no se sabe nada hasta que la Santa Sede no se pronuncie”.

Dionisio García Ibáñez, arzobispo de Santiago de Cuba, la segunda ciudad en importancia de Cuba, y reelecto como presidente de la conferencia de obispos, está considerado como el sucesor más probable de Ortega, dijo López Oliva en conversación telefónica desde La Habana con El Nuevo Herald.

García, de 67 años, sería el primer arzobispo de La Habana en llegar a la mayoría de edad después de la revolución de Castro en 1959, añadió López Oliva, y probablemente tiene una mejor comprensión personal del sistema imperante. Ortega, quien tiene ahora 77 años, fue ordenado como sacerdote en 1964.

García ha criticado abiertamente al gobierno, pero también ha mantenido cierta distancia del sacerdote de Santiago, José Conrado Rodríguez, quien no tiene pelos en la lengua. El sacerdote ha dicho que García le pidió que escribiera una historia del descubrimiento en 1612 de la imagen de la Virgen de la Caridad, la santa patrona de Cuba, pero no le ofreció una nueva parroquia. Conrado fue transferido a otra diócesis.

Otro nombre que se ha mencionado es el de Marcelo Arturo González Amador, obispo de la ciudad de Santa Clara, en la región central de Cuba, desde 1999 y, a los 56 años, uno de los obispos más jóvenes de la isla.

“Este es un obispo que tiene un gran sentido parroquial, de acercamiento a la parroquia”, dijo Valdés.

También han sido mencionados los obispos Emilio Aranguren en Holguín, también de 56 años; Manuel Hilario de Céspedes, 69, en Matanzas; Jorge Serpa, 71, en Pinar del Río; Juan García en Camagüey; y Juan de Dios Hernández, 65, arzobispo auxiliar de La Habana y jesuita como Francisco.

No se ha dicho nada sobre lo que podría hacer Ortega después de retirarse, aunque se cree que él goza de buena salud y podría ser designado a un alto puesto en el Vaticano.

López Oliva señaló que, aunque los siete obispos han sido mencionados como posibles sucesores de Ortega como arzobispo de La Habana, según las regulaciones de la Iglesia el papa Francisco no tiene que elegir un obispo.

“Este Papa ya ha hecho algunas cosas sorprendentes”, dijo, “y a lo mejor nos sorprende”.

Ayuda a Infovaticana a seguir informando

Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

 caracteres disponibles