Donald William Wuerl es un cardenal y arzobispo emérito de Washington DC.
Nacido el 12 de noviembre 1940 en Pittsburgh, Donald William Wuerl es el segundo de los cuatro hijos de Francisco y Maria Anna, Donald Wuerl es uno de los 11 cardenales estadounidenses que participó en el cónclave de Marzo de 2013.
Su padre trabajó con vagones de carga pesada para el ferrocarril de Pennsylvania, y sirvió en la Armada durante la Segunda Guerra Mundial. Su madre murió en 1944, cuando Donald tenía 4 años, y su padre se casó en segundas nupcias con Kathryn Cavanaugh en 1946.
La formación de Donald William Wuerl
Estudió en el colegio St. Mary of the Mount Church de Pittsburgh, se preparó para el sacerdocio en el Seminario San Gregorio, en Cincinnati en la Universidad Católica de América, en Washington y en la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma, donde completó la maestría en teología.
Fue ordenado sacerdote el 17 de diciembre de 1966 en la Basílica de San Pedro. A continuación trabajó durante 2 años como Asistente de párroco en la iglesia de Santa Rosalía, en Pittsburgh, desde donde pasó a ser secretario del Obispo John Joseph Wright de Pittsburgh. Cuando el obispo Wright fue creado cardenal y nombrado prefecto de la Congregación para el Clero en 1969, continuó en ese puesto, sirviendo en el Vaticano hasta la muerte del Cardenal Wright en 1979.
Debido a la severa artritis que sufría el Cardenal Wright, que le exigía el uso de la silla de ruedas para moverse, Wuerl fue uno de los tres no cardenales presentes en el cónclave que elegiría a Wojtyla como Papa con el nombre de Juan Pablo II, en 1978.
Rector del Seminario de St. Paul, Pittsburgh
En la primera mitad de la década de los 80 se desempeñó como rector del Seminario de St. Paul, Pittsburgh.
El 30 de noviembre de 1985 fue nombrado Obispo Auxiliar de Seattle, en esa sede tuvo que sufrir un proceso contra su Obispo principal, Raymond Hunthausen, durante el que el Cardenal Ratzinger como prefecto de la CDF le dio potestades sobre la liturgia, el tribunal arquidiocesano, seminaristas y la formación sacerdotal, sacerdotes secularizados, y las cuestiones de salud y el ministerio a los homosexuales, por encima del Arzobispo.
El 12 de febrero de 1988 se incorporó como Obispo de Pittsburgh, donde estuvo hasta que en 2006 fue designado por Benedicto XVI para la Archidiócesis de Washington DC.
Presentador de televisión
En la sede de Pittsburgh lanzó y presentó un programa de televisión, la enseñanza de Cristo, en 1990 y escribió un catecismo para adultos con el mismo nombre.
También fue en la sede de Pittsburgh donde llevó a cabo un plan de ahorro que se tomó después como ejemplo en muchas diócesis del mundo: cerró 73 edificios eclesiásticos, entre los que se incluyen 37 Iglesias, y por medio de un plan de fusiones pasó de 331 parroquias a sólo 117.
Como arzobispo de Washington DC fue anfitrión de la visita del Papa a Estados Unidos en Abril de 2008.
El 22 de octubre 2011 el cardenal Wuerl fue nombrado relator general de la XIII Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos que tuvo lugar en el Vaticano del 7 al 28 de octubre de 2012 y cuyo tema fue “La nueva evangelización para la transmisión de la fe cristiana”.
El cardenal Wuerl fue el delegado de la Congregación para la Doctrina de la Fe para la implementación de la Anglicanorum Coetibus en los Estados Unidos, para implantar el ordinariato personal que acoja a los anglicanos que deseen entrar en plena comunión con la Iglesia Católica.
Vinculado a la Orden de Malta
Muy vinculado a la Orden de Malta, Wuerl también ha escrito columnas con cierta regularidad en “Columbia”, la publicación más importante de los Caballeros de Colón en los Estados Unidos.
Wuerl tiene fama de llevar a cabo una política de tolerancia cero frente a los abusos sexuales, en una ocasión como Obispo de Pittsburgh aceptó una invitación para cenar en casa de una familia que había demandado a la diócesis por los abusos cometidos por un sacerdote; aunque los abogados de la diócesis habían desaconsejado a Wuerl asistir a la cena, el ahora Cardenal se convenció de que el abuso sexual era un problema en su diócesis. Wuerl resolvió el pleito con la familia, y el sacerdote implicado fue secularizado y enviado a prisión. Wuerl dijo a su personal que, «en los casos de abuso sexual, la primera preocupación debe ser la víctima, la segunda preocupación debe ser la familia de la víctima, y sólo la tercera preocupación debe ser la reputación de la Iglesia».
En los años siguientes, Wuerl investigó a todos los sacerdotes de su diócesis acusados de mala conducta sexual, y secularizó a varios. En una ocasión, Wuerl luchó con éxito para secularizar a un sacerdote que el Vaticano inicialmente había protegido.
En una homilía Wuerl señaló que cuando Jesús hablaba la gente le instaba a retractarse. «Le dijeron que tenía que ser más «contemporáneo», que necesitaba modificar sus enseñanzas para adaptarse a la cultura dominante. ¿Y qué dijo Jesús entonces? ¿Agradecer la corrección y cambiar su mensaje? ¡No! Repitió las palabras que le habían reprochado: » Si no coméis la carne del Hijo del hombre y no bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros. «
Wuerl no es partidario de negar la comunión a los políticos que promueven el aborto, postura que defiende con estas palabras: «Nuestra tarea principal es enseñar y tratar de convencer a la gente. La tradición en nuestro país no ha sido en el sentido de rechazar la comunión, y creo que nos ha servido también».
En noviembre de 2009, Wuerl firmó una declaración ecuménica, conocida como la Declaración de Manhattan, pidiendo a los evangélicos, católicos y ortodoxos no cumplir con las reglas y las leyes que permiten el aborto, el matrimonio entre personas del mismo sexo y otros asuntos que van en contra de su conciencia religiosa.
Su preocupación por la educación
Asimismo, el cardenal siempre ha mostrado una importante preocupación por la educación. Wuerl, dentro del debate sobre la calidad y la financiación de la educación, siempre ha mostrado inquietud por hallar fórmulas para ofrecer una educación católica de calidad accesible a todos. Siempre se ha preocupado, como arzobispo de Washington, de trabajar en comunidad por sostener las pequeñas escuelas católicas de barrios, manteniendo la calidad y trabajando por los niños en riesgo de exclusión.
En el debate que se generó en el Distrito de Columbia sobre la aprobación del mal llamado matrimonio homosexual, Wuerl abogó por disposiciones que protegieran la libertad religiosa, y que en concreto dieran a las instituciones de servicios sociales católicas la potestad de oponerse a dar en adopción un niño a una pareja homosexual. Como esta petición no fue atendida por la ciudad, el obispado de Washington no tuvo más remedio que poner fin a su programa de hogares de guarda y de adopción pública.
Fue creado y proclamado Cardenal por el Papa Benedicto XVI en el consistorio del 20 de noviembre de 2010, recibió la birreta roja y el título de San Pietro in Vincoli.
Los cargos de Donald William Wuerl en la Curia
En la curia romana es miembro de las Congregaciones para la Doctrina de la Fe y para el Clero, y de los Consejos Pontificios para Promover la Unidad Cristiana y de la Cultura.
Posee títulos honoríficos de once universidades y es Caballero de la Orden de Malta, Caballero del Santo Sepulcro y caballero en cuarto grado de los Caballeros de Colón.
Wuerl está muy familiarizado con las nuevas tecnologías como las redes sociales, donde tiene una cuenta de twitter, o los blogs, donde escribe semanalmente.
El cardenal Wuerl es autor de cinco libros, entre ellos, «La Iglesia y sus Sacramentos: haciendo a Cristo visible», y coautor de otros dos, entre ellos el Catecismo católico para adultos de Estados Unidos, publicado en 2006.
Además de inglés, habla francés, italiano y español.
En la misa oficiada en Washington el 24 de febrero para dar gracias por el Pontificado de Benedicto XVI subrayó que «parte del legado de Joseph Ratzinger será la insistencia en que hay que renovar y abrazar de nuevo la fe y compartirla con los otros».
Poco antes del cónclave de Marzo de 2013 hablaba en un artículo sobre la experiencia del cónclave y decía que “los cardenales deben realizarse cuestiones como ¿qué les está pidiendo Dios en la toma de decisión de nuevo Papa? ¿Quién entre nosotros cuenta con las cualificaciones, las características y las gracias espirituales para llenar esta Silla? ¿Quién es el mejor preparado para gobernar la Iglesia Universal en una manera fructífera?”.
Sobre el nuevo papa decía que “uno de los grandes retos que deberá afrontar el nuevo Papa será la arrolladora influencia de un agresivo secularismo que realmente está ahogando la voz de la religión”.
Asimismo, reflexionó que el próximo Papa “tendrá que ser capaz de llegar por todos los medios de ahora para comunicarse, especialmente medios de comunicación social y de esta manera estar presente en el mundo”.
Rumores posteriores al cónclave indicaron que el cardenal Donald William Wuerl hizo campaña en favor de Bergoglio en los corrillos, y dirigió el voto de los 11 estadounidenses. «Es la solución justa para purificar y reformar a la Iglesia”, aseguran que sostuvo el arzobispo de Washington.
Ayuda a Infovaticana a seguir informando
