Asegura además que Marco Simeon, principal protegido de Bertone, le amenazó varias veces. Son cuatro páginas manuscritas el 26 de marzo de 2012 que Ettore Gotti Tedeschi entregó a la Fiscalía de Roma .Había dado instrucciones a su secretaría -que también tenía una copia- para que su contenido se hiciese público solo si ocurría “un incidente de cualquier tipo, en cualquier circunstancia o momento”. Asimismo, hizo llegar otra copia a monseñor Georg Gänswein, a la sazón secretario personal de Benedicto XVI, para que se lo entregase a éste último. No ha ocurrido ningún incidente pero el informe se acabó filtrando. Il Corriere Della Sera, uno de los medios que lo publicó, resaltó que entre los documentos figura una “memoria reservada” dirigida por Gotti al arzobispo Ángelo Becciú, sustituto de Asuntos Generales de la Secretaría de Estado, para que “entienda mi posición” en relación con la nueva ley vaticana sobre blanqueo. En él Gotti revela los nombres de las personas que le hacen la vida imposible en el seno del IOR: se trata de su director general Paolo Cipriani y, sobre todo,de Marco Simeon, responsable de Rai Vaticano, la estructura que se ocupa de la información vaticana y religiosa en la cadena pública italiana, y fiel entre los fieles de del cardenal Tarcisio Bertone, Secretario de Estado de la Santa Sede. Sobre Simeon, Gotti señala varios intentos por su parte para intimidarle a raíz de un intento de este último para “cooptarle” para que cambia se de bando en relación con la ley sobre blanqueo. “Usted será el responsable de la desaparición del IOR”, cuenta Gotti que le dijo Simeon tras negarse a adoptar sus posiciones. Asimismo, Gotti se muestra preocupado por la indiferencia total de Bertone acerca de los hechos que relata: principalmente hacia las decisiones tomadas por Cipriani acerca de las cuentas ‘laicas’ -es decir, las cuentas cuyos titulares no son curas o prelados-, y a la confianza que Cipriani depositaba en el abogado Lena, al que Gotti describe como un personaje a medio camino entre un agente secreto y el comisario de la película La pantera rosa. Un incidente que Gotti califica de gravísimo tiene que ver con las calumnias que Bertone habría vertido sobre su persona en conversación con monseñor Gänswein y que versarían sobre unos supuestos comentarios negativos de Gotti sobre Benedicto XVI. “Solo la inteligencia, la perspicacia y la buena fe de Gänswein me permitieron aclarar la calumnia”, escribe Gotti. (Tomado de intereconomia.com)
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