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Quién es Juan Grabois, asesor del Papa

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Conozca a Juan Grabois, el asesor marxista-leninista del Papá Francisco y gran admirador de Chávez.

Gonzalo de Porras

A casi 100 años de la Revolución Rusa ¿pueden los promotores de la «lucha de clases» en favor del capitalismo estatal mostrar alguna experiencia exitosa detrás del «Telón de Acero» o del «Telón de Bambú»? ¿Qué nación de las decenas que fueron subyugadas por las varias facetas del comunismo prosperó y ha sido modelo de bienestar para la humanidad? ¿Existe alguna? ¿Es ejemplo para el mundo la experiencia soviética? ¿O el salvaje experimento del Jemer Rojo en Camboya? O, ya en nuestros días, ¿la eterna dictadura de los hermanos Castro en Cuba?, ¿el hermético «paraíso» de la dinastía Kim de Corea del Norte? ¿Y la Revolución Bolivariana de Chávez y Maduro que ha conseguido arruinar un país rico en recursos petrolíferos como es Venezuela? ¿Por qué las ideas utópicas de Marx y Lenin augurando cambios sociales para instaurar un mundo idílico siempre fracasaron originando pobreza, miseria y opresión? Son cuestiones a las cuales numerosas veces los Papas y más especialmente, Juan Pablo II, y Benedicto XVI, apuntaron en diversos documentos.

No obstante, a veces se diría que el Papa Francisco quiere revivir estos sueños, utopías e ilusiones o, por lo menos, no se preocupa mucho de que su figura pueda ser instrumentalizada a servicio de las mismas. ¿Exageramos? Analicemos fríamente ciertos eventos organizados con el innegable apoyo de Francisco: los «Encuentros Mundiales de Movimientos Populares». Estos eventos fueron promovidos por el Consejo Pontificio de Justicia y Paz, en colaboración con la Academia Pontificia de las Ciencias Sociales y su organizador es un abogado argentino de nombre Juan Grabois.

El primero en encuentro se realizó en Roma en octubre del 2014 y contó con la participación del presidente de Bolivia Evo Morales y João Pedro Stédile, líder del Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST) de Brasil también de ideología marxista, que vino a Venezuela el año pasado en apoyo al régimen de Nicolás Maduro, el segundo en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, en julio del 2015.

¿Pero quién es Juan Grabois?

Juan Grabois es un gran amigo y hombre de confianza del Papa Francisco desde que era arzobispo de Buenos Aires; y luego, en Roma, el Santo Padre lo ha nombrado asesor del Consejo Pontificio de Justicia y Paz del Vaticano, encargado de la organización de los «Encuentros de los Movimientos Populares». El dirigente popular es un declarado militante marxista, promotor de agitaciones en barrios periféricos e industrias de Buenos Aires y un gran admirador de Hugo Chávez. Es co-fundador del «Movimiento de Trabajadores Excluidos» y forma parte de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP) en Argentina.

Juan Grabois no oculta su admiración por la Revolución Rusa de 1917 y su gestor, Vladimir Lenin, constata con satisfacción la expansión del comunismo por el mundo durante muchos años y destaca como hitos históricos las revoluciones de Mao Tse Tung, Fidel Castro y el Ché Guevara. Ansioso por ver una sociedad sin clases, considera la rebelión zapatista de 1994 y el movimiento bolivariano de Hugo Chávez como los preanuncios señeros de la marea popular anticapitalista que se avecina para este siglo XXI.

En suma, Grabois, nostálgico de Perón y el justicialismo argentino sueña con la utopía de grandes cambios sociales, rebeliones y «gobiernos populares», al estilo cubano y venezolano.

Estos antecedentes ideológicos pueden ser cotejados en el texto de estudio que Grabois publicó junto con su compañero de luchas, Emilio Pérsico, Secretario de Agricultura Familiar del Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner y líder del Movimiento Evita:

«1) Nuestra Realidad. Cuadernos de formación para trabajadores, militantes, delegados y dirigentes de organizaciones populares». En la portada de este cuaderno se lee el sugestivo slogan: «Por una sociedad sin esclavos ni excluidos. Por una economía al servicio del pueblo. Por la unidad de los trabajadores y los humildes. ¡Sin poder popular no hay justicia social!».

Pérsico y Grabois completan esta ansiedad por reclutar y concienciar militantes en favor del comunismo con otros tres cuadernos:

«2. Nuestra Organización»

«3. Nuestros Objetivos»

«4. Nuestra Lucha»

Dentro de esta tetralogía pro-marxista ambos autores proponen al Ché Guevara como modelo del militante generoso y entregado a la causa revolucionaria (Cuaderno 2, Cap. 8, p. 32).

Además, dan a conocer los métodos y las tácticas que deben ser puestas en práctica para lograr aquello que definen como «El proyecto revolucionario. Nuestro objetivo estratégico» (Cuaderno 3, Cap. 10, pp. 33-37). ¿Cuál es la meta que se proponen? Muy simple. Instaurar «la economía socialista para el siglo XXI». De este apartado pueden leerse los siguientes proyectos de índole claramente comunista:

Nuevo Justicialismo Económico (buen vivir o economía socialista del siglo XXI)

Queremos una economía al servicio del pueblo, donde la riqueza y el ingreso se distribuyan con justicia, donde el salario sea fuente de dignidad, donde no haya explotación ni exclusiones.

Queremos una economía donde los principales resortes estén en manos del gobierno popular. Nuestras minas, nuestro petróleo, nuestra tierra, nuestro comercio exterior, nuestro transporte, nuestros servicios públicos, nuestra salud, educación y recreación son demasiado importantes para estar en manos del mercado.

Los trabajadores podemos gestionar las grandes fábricas sin necesidad de patrones como demostraron las empresas recuperadas, podemos distribuir los alimentos sin necesidad de intermediarios que se quedan con la parte del león, podemos cultivar el suelo y cuidar el medio ambiente si la tierra se distribuye en partes iguales.

Esta economía no va contra la iniciativa individual, no pretende eliminar todo tipo de propiedad privada, sino en primer lugar poner la economía al servicio del pueblo y no del dinero, pone la propiedad al servicio de la comunidad y no del lucro individual. Tal vez así algún día logremos llegar a una sociedad donde «cada uno aporta según su capacidad y cada uno recibe según sus necesidades».

Tampoco niega el desarrollo de la individualidad, que es muy distinto al individualismo. Nuestro principal objetivo es que todos los compañeros puedan disfrutar de su tiempo para desarrollarse como personas, crear, amar, jugar, divertirse, compartir con familia y amigos, disfrutar del arte y la cultura, hacer deportes, contemplar el mundo, conocer su Patria. En muchos países se está intentando desarrollar esta nueva economía, comunitaria, cristiana, humanista, solidaria. En Ecuador, Bolivia o Venezuela, de distintas maneras, se intenta avanzar hacia un nuevo orden económico dónde no sea el dinero sino las personas y las familias lo que esté en el centro. (Cuaderno 3, Cap. 10, pp. 35-37.

Pero también en Cuba, Ecuador, Bolivia o Venezuela, puede verse, aunque no de una manera muy distinta, los estragos que causan una economía socialista, o de capitalismo estatizado, donde, a nombre de erradicar la pobreza y desigualdad, se multiplican de manera exponencial los pobres y los desiguales, que pasan a convertirse en los pretextos para que feroces dictadores barran con la libertad, la democracia y los derechos humanos.

Son países cuyos gobiernos cuentan con el apoyo y beneplácito del Papa Francisco, seguro que por intermediación de socialistas como Grabois, quien le suministra munición a ateos convictos y confesos como Maduro, Correa y Morales para realizar uno de los sueños más acariciados por el comunismo ateo: acabar con la Iglesia Católica tradicional.

Comentarios
14 comentarios en “Quién es Juan Grabois, asesor del Papa
  1. La verdad que el artículo está escrito por un ignorante o un mentiroso. Juan Grabois Marxista Leninista?? Nada más lejano. Es un católico retrogrado y peronista. Por favor señor Gonzalo de Porras, no pretenda engañar a distraidos.

  2. El actual Orden Mundial no va más y el Papa quiere otro mejor. Así entiendo yo todo esto. Y no me parece mal. Si poco a poco va saliendo algo nuevo y mejor pues muy bien.

  3. No siento temor a lo que haga el Papa Francisco, sino ante toda la manipulación informativa que hay en torno a él para intentar desacreditarlo y hundirlo, lo único que hace es guardar las espaldas en el Vaticano donde rondan todos los enemigos que pretenden que todo siga como esta y nada cambie, porque ven como se les remueve el sillón y eso, claro, no les gusta. Juan Pablo II y Benedicto XVI eran bastante más autócratas y autoritarios, les recuerdo perfectamente a los dos, pero la curia encantada con ellos, porque podían manipular a su antojo especialmente a Juan Pablo II, que hizo lo que le salió de las narices, como mantener a Maciel y a montones de pedófilos sin que nadie le dijese ni mú, porque lo importante era seguir en el sillón, eso si a un montón de teólogos, los condeno al ostracismo y los boicoteo de forma escandalosa, al igual que hizo con Monseñor Romero, entre otros, pero eso no le importó a nadie, porque lo importante era que en el Vaticano nada cambiase.

  4. Colaborador del Nuevo Orden Mundial jazaro pretende orientar a los católicos hacia el Abismo. Este papa no es de fiar, y hace tan solo 50 o 60 años hubiese sido depuesto…

  5. Es vergonzoso que la Iglesia Católica haya caído en manos de unos indeseables. Ya se ve que lo de la Mafia de San Gallo no es un cuento chino. Ojalá lo fuera y despertáramos del sueño.

  6. Tiene como amigo un personaje que utiliza la lucha de clases, que utiliza a los pobres… NO debería tener a esta clase de personeros del ODIO como don GUILLERMO MORENO (MATON Y PATOTERO) de amigos… Lamentable…

  7. Leo atentamente los artículos que en este medio se publican y acojo con respeto todas las opiniones. No obstante, observo con preocupación el ataque desmedido y la falta de caridad hacia el Papa. Me siento escandalizada.

  8. Es coherente que la impostura política y religiosa de Bergoglio se nutra de este tipo de colegas, o compinches.
    Bergoglio en vez de ir a predicar el Evangelio, se ha tragado la falsedad marxista. El mundo al revés.
    Ahora se explican las risas con los Castro. Es algo mas que cortesía institucional, la que no tuvo por ejemplo con Angela Merkel.

  9. Cuando el marxismo está más que demodée, Bergoglio lo descubre. Pobrecico. Me da pena, mucha pena, porque los totalitarismos marxistas, y además ateos, han generado más pobreza y centenares de millones de muertos, además de acabar con las libertades. Sugiero a Bergoglio que se vaya a vivir al paraíso chino y nos deje en paz a los católicos, con una doctrina social que no tiene nada que ver con el marxismo ni con el ateísmo.

  10. Yo lo leí que el Papa estaba intentanto formar un partido político de inspiración católica marxista, para ello habían acudido al Vaticano una serie de personajesmarxistas argentinos sobre todo y de otras nacionalidades especialmente de América, yo me lo tomé con preocupación y duda, pensando que podrían no ser verdad. Pero veo que si es factible que esté ocurriendo

  11. Asesores como Kasper, Shönborn, Forte, Fernandez, Sanchez Sorondo, Grabois, etc, demuestran la clara ruptura de la iglesia bergogliana con la Iglesia Católica. Que se vayan y funden su propia iglesia. Les seguirán 4 y el del tambor. Por eso mismo no se quieren ir y prefieren seguir engañando. A muchos, cada vez más, no. Que Dios se apiade de su Iglesia Santa. Te lo pedimos Señor.

  12. Estas idelologías, como el islamismo, lanzan eslóganes animando a la lucha justificando así la aparicion de niños soldados.

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