¿Qué quiere decir la enigmática frase de que el tiempo es superior al espacio?
El Papa Francisco lo explicó en Evangelii Gaudium como una defensa de la pastoral, de los procesos, de los tiempos, como mejor forma para llegar a Dios. No tenemos por qué dudar de las intenciones del Papa. Sin embargo, semejante sentencia es más confusa que el título lógico para explicar este principio: que para alcanzar fines difíciles es necesario iniciar largos procesos.
La frase del tiempo y del espacio es una semilla plantada en una exhortación apostólica que, por ambigua, puede crecer de cualquier manera ante la indiferencia de quienes no saben de qué se trata.
¿Qué filosofía que haga una fuerte apología del tiempo es fuertemente defendida hoy día y paradigma de nuestra era, también en teología? Principalmente el progresismo y el evolucionismo (más allá de la teoría de la evolución), que afirman que lo futuro es mejor que lo presente y lo pasado, y que todo ha de cambiar, también en lo filosófico y moral. Por supuesto, en la moral esta afirmación encierra una trampa, y es que el devenir moral y filosófico de un pueblo o de una persona puede ser a mejor pero también a peor. El tema del aborto, por ejemplo, nos lo confirma.
Además, aunque el Papa necesariamente no quiera defender el progresismo con esta frase, es probable que haya nacido de lecturas sí dadas a ello. Tendría sentido si son las mismas fuentes que le llevaron a repetir que Dios es un Dios de sorpresas, que los malvados no entienden los signos de los tiempos, que hay que superar la resistencia al cambio, que hay que acoger la novedad, etc.
Espacio contra moral. ¿A qué se llega con esta dicotomía?
- ¿Cuál sería el encuadramiento de la moral en el contexto de un espacio superior al tiempo? Imaginémonos el espacio como un inmenso cajón lleno de contenido doctrinal. Cuanto más nos adentremos en la moral, más conclusiones sacaremos sobre nuestra Fé. Es algo inmóvil, que se puede expandir pero partiendo de su conservación, no de su reciclado.
- ¿Cuál sería el encuadramiento de la moral en el contexto del tiempo como superior al espacio? Un continuo pasar de días, de cosas guardadas en espacios con fecha de caducidad, de hojas de calendario, de libro viejo al que se le amarillean las páginas y se remplaza por una nueva edición.
Contra esta posible tendencia progresista es nuestro deber estar alerta y repetir las fuertes palabras de Jesús oponiendo tiempo contra espacio:
Cielo y tierra pasarán, más mis palabras no pasarán. (Mateo 24:35)
Varios filosofos han analizado esta frase, «el tiempo es superior al espacio», y más o menos todos concluyen que es una solemne tonteria.
Fisicamente, el espacio-tiempo son coordenadas que coexisten, y por tanto es absurdo pensar que una es superior a la otra ¿superior en qué sentido?
Filosoficamente, es una frase tan ambigua, que se pueden sacar todas las conclusiones, que uno quiera, pero por desgracia, la mayoria apuntan a un relativismo, a que con el tiempo cambian las cosas, también la fe, la moral, etc.
Tiempos recios, decía Santa Teresa. Los tiempos de confusión general, generados por la idolatrada Leticia, con su calculada ambigüedad, llevan a la extinción de la vida cristiana y, por tanto, al infierno. Ojalá vengan tiempos de clarificación, pero en Roma no están por la labor. Se han instalado en las cómodas actitudes, sin exigencia alguna, de la misericordia, el diálogo, el discernimiento, el encuentro, la inclusión, los puentes, los no muros, la acogida, sin un porqué ni un para qué, pues nos hemos cargado las referencias superiores como la moral, la doctrina, el catecismo, la Fe, los dogmas ..Todo eso ya lo hicieron los protestantes y sus iglesias están vacias.