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Una historia japonesa que bien merecería una película continuadora de Silencio

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Resultado de imagen de martires del japon

Y mucho más católica. Lo leí hace tiempo y me emocionó. No recuerdo donde pero la historia era más o menos así. Pasada la terrible persecución a los católicos del Japón, con mártires admirables y naturalmente también con apóstatas, la Compañía de Jesús, llegados días más bonancibles envió a algunos padres, pocos serían, tal vez dos o tres, a comprobar si en aquel Imperio quedaba algo de aquella antaño floreciente cristiandad aniquilada con cruelísimos tormentos.

Se presentaron en el lugar de donde había memoria que hubo más católicos y fueron recibidos con absoluta indiferencia. Instalaron en algún lugar de su casa una pequeña capilla que mucho tiempo sólo la frecuentaban los padres que habían llegado. Allí decían sus misas en absoluta soledad. Hasta que pasado bastante tiempo llegaron dos ancianas que seguían en silencio la misa y las oraciones de los jesuitas y a las que era imposible arrancarles una palabra. Y la presencia se repitió bastantes días con el consiguiente asombro de los padres. Hasta que un día aquellas buenas mujeres llegaron acompañadas de un anciano que también durante bastante tiempo se limitaba a una atención respetuosa sin que se prestara a intercambiar palabra alguna.

Hasta que un día el anciano se dirigió a ellos y les hizo tres preguntas.

-¿Vosotros tenéis mujer?

Los jesuitas, asombrados, le respondieron que no. Que ellos no tenían mujer.

El anciano continuó preguntándoles señalando un cuadro o imagen de la Virgen que había en la diminuta capilla.

-¿Esa mujer es la madre de vuestro Dios?

El asombro de los padres llegó al pasmo

-Sí, es la Virgen María, Madre Dios, a la que rezamos y veneramos.

Y todavía hubo una tercera pregunta que yales dejó obnubilados

-¿Tenéis muy lejos un jefe que manda en todos  vosotros?

Ellos le explicaron que había un Papa…

Entonces el anciano cayó de rodillas ante ellos y con lágrimas incontenibles les dijo:

-Pues vosotros sois los que durante tantos años de persecución y de martirio estábamos esperando. Nuestros abuelos y nuestros padres nos aseguraron que un día llegaríais para hablarnos de Dios y confirmarnos en nuestra fe.

Y al día siguiente vinieron a la capilla un grupo de hombres, mujeres y niños que habían vivido su fe en las catacumbas, conservando sus oraciones y esperando la llegada de los que sus mayores les habían asegurado que algún día vendrían. Y el catolicismo japonés no fue de nuevo fundado sino que continuó milagrosamente con aquellos herederos de los mártires de la cruelísima persecución. Sin sacerdotes, sin sacramentos, sólo con la gracia de Dios.

Esos son los verdaderos héroes, con sus mártires, tras sus mártires, de una película sobre el catolicismo en el Japón. No dos jesuitas apóstatas sobre los que lo mejor que les podría acontecer es el silencio.

 

Comentarios
11 comentarios en “Una historia japonesa que bien merecería una película continuadora de Silencio
  1. Gracias por contarnos esta historia de Japón, que está mas en consonancia con las historias de los mártires del siglo XX en España, donde no hubo Silencio, sino que estos hablaron perdonando a sus asesinos.

  2. Hay que tener en cuenta que en esta historia que se propone, no solo había jesuitas. Los jesuitas eran algunos de origen nativo que completaban la misión encabezada por el «jefe de expedión o superior» que no era otro que San Pedro Bautista (Franciscano), cuyo ejemplo de martirio merece ser recordado, pidiendo el favor de ser el último en ser ejecutado para dar fortaleza a sus compañeros. Pablo Miki y compañeros mártires, cuya fiesta se celebra el 6 de febrero, aunque su martirio fue el día 5, reconoce en primer lugar a los jesuitas por ser nativos japoneses y no a los franciscanos o laicos que tambien fueron martirizados. La relevancia de Pedro Baustista en las negociaciones con el emperador del Japón, así como el desconocimiento de su figura, debería resaltarse, al igual que se ha resaltado en Japón y Filipinas, con basilicas, catedrales, hospitales y monumentos en su honor. Una verdadera histora para una buena película, ya que silencio deja demasiado a la imaginación religiosa del paresonal.

  3. Preciosa historia y además real, sean o no jesuítas, que ya había escuchado y me he emocionado al rememorarla. Gracias Cigüeña.

  4. Ninguna fuente seria habla de colaboración de los misioneros en la trata de esclavas japonesas.

    Las razones por las que se persiguió a los cristianos en el Periodo Edo son complejas. Para no llenar el blog de citas bibliográficas, la práctica totalidad en inglés, recomiendo la web de un investigador español que está precisamente especializado en las relaciones España-Portugal-Japón en los siglos XVI y XVII (recordemos que de 1580 a 1640 los Austrias fueron reyes de ambos países): http://www.historiajaponesa.com/

    Es un historiador, por lo que no hace hagiografías, pero sí reconoce la labor de los misioneros, aunque también señale lo que considera sus sombras (entre las que no está la esclavitud)

  5. Para Verdad:
    En el artículo citado de Wikipedia no se afirma que los jesuitas colaboraran en la trata de esclavos japoneses, sino que la conocían; pero no dice que la prohibición dada por el rey de Portugal fue el resultado de los informes y protestas de los misioneros. La leyenda de que los jesuitas apoyaron la matanza de franciscanos no pasa de eso (está en el artículo, más otras falsedades). No olvidemos que siempre los perseguidores de la Iglesia fundamentan sus acciones en acusaciones casi siempre falsas; y digo «casi siempre» porque el pecado existe también entre los sacerdotes.

  6. Esto de las multiplicaciones y el resultado en inglés parece cosa de jesuitas progres.
    Que cosas.
    Espero que si espanta a alguien sea a los irredentos.

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