http://www.infovaticana.com/2016/02/06/tras-20-anos-de-servicio-al-pp-los-obispos-espanoles-no-se-explican-que-ha-podido-ocurrir/ ¿Le ven las orejas al lobo? ¿Han hecho algo por alejarlo? No se me ocurre comparar a Blázquez con Rajoy salvo en la inanidad de ambos. Las intenciones del cardenal son buenas. Rajoy no debe tener ni intenciones. Ambos son dos marmolillos que se han creído que las cosas se resuelven solas. O apoyando al PP el primero y no apoyando nada el segundo. Pues ya ve Don Ricardo a qué ha llevado el apoyo al PP. El de la televisión de los obispos no es que haya sido, sigue siendo, excesivo, es lo siguiente. ¿Cómo se lo han pagado? Dejándoles in puribus naturalibus ante el enemigo. Y Blázquez de esa guisa no es precisamente metrosexual. Menuda bobada se le acaba de ocurrir al presidente de la Conferencia Episcopal. Que no se da ni entre los obispos. Cuando se reúnen no encuentran soluciones entre todos. Ganan unos y pierden otros. Y en ocasiones hasta con escasa caridad. Pues si lo que los obispos son incapaces de conseguir pedírselo a los políticos es estar en Babia. Que es lugar que algunos frecuentan demasiado. Y así nos va. ¿De verdad cree Don Ricardo que es posible un acuerdo, no digo ya un acuerdo bueno, entre Bildu, Podemos, PP, PSOE, Ciudadanos, ERC, las Mareas, Compromís, IU…cuando algunos de ellos no tienen nada en común y los que podrían tener algo no quieren? Es muy posible el acuerdo de bastantes contra la Iglesia pero esos no tienen que buscar acuerdo alguno porque en ello ya están acordados. Es evidente el batacazo de Rajoy, Sánchez y Mas. ¿Y el de nuestros obispos? Es seguro que el PP votará contra medidas de los otros si llegan a formar Gobierno. Y varias serán contra la Iglesia. Pero si votan en contra no va a ser por amor a la Iglesia sino por oposición a sus adversarios. La Iglesia les importa un bledo. Eso han conseguido ustedes Don Ricardo. Leo que un acuerdo para reducir la religión en la enseñanza contaría con la aprobación del PP si ello fuera prenda de un acuerdo. Incluso tal vez, añado yo, para su desaparición. Y se quedarían tan frescos. Personalmente pienso que la religión no perdería nada pues deben ser contadísimos, si es que existe alguno, los alumnos que salen católicos por esas clases. Aunque es cierto que los hay que salen a pesar de ellas. Pero parece que eso a ustedes les interesa mucho. Pues ya ven que se les puede acabar. No hay otro camino que el de recuperar la militancia católica de los católicos. Y eso hace mucho que lo abandonaron. Ahora empiezan a ver los resultados del abandono. Tienen entre su clero a no pocos encantados con el anticlericalismo de buena parte del abanico político. Con propaganda activa en favor del mismo y sin que hicieran nada por evitarlo. Pues ya ven el resultado. Monseñor Omella habló de que si era necesario ir descalzos irían. Pues como desaparezca la x de la declaración de renta me temo que va a haber muchos descalzos. Y si bastantes sacerdotes dejan de cobrar por sus clases de religión, más. http://www.infocatolica.com/?t=noticia&cod=25915
El ingenuo buenismo de Blázquez
| 06 febrero, 2016
Que nadie se llame a engaño: el episcopado español NUNCA se ha distinguido por su lucidez en materia política. No se pida a don Ricardo que dé lo que casi todos sus antecesores a la cabeza del episcopado español (ya sea como primados, ya sea como presidentes de la extinta Conferencia de Metropolitanos, ya sea como presidentes de la CEE) no han dado en siglos.
Estos jerarcas marmolillos me recuerdan a la banda que seguía tocando en el
Titanic, cuando ya todo estaba perdido, y ellos, toque que toque.
(…) (¿Por qué no dice simplemente Osoro) ha encontrado en doña Croqueta su alma gemela y se reunen con gusto
en el Starbucks del padre Angel, a negociar migajas. Monseñor Blásquez, pues ya
el buen blogger lo dejó retratado de cuerpo entero, mejor que el Greco.
No me compliquéis la vida. Dejarme en paz y vivan ustedes felices. Me fumo un puro, me doy una vuelta en bicicleta o hablo de deportes aunque no los practique, cosa muy placentera. El resto de responsabilidades, no por favor. Todos los meses hay nómina en la cuenta bancaria que es lo importante. Tente mientras cobro.
Bellísima persona y adorable el emérito obispos de Bilbao, nuestro Blázquez, teolognte antes más en la ponti de Salamanca, y aupoado por Rouco?. Dejémoslo ahí porque cada cual tiene sus criterios de selección y devoción. Pero si uno recuerda la perorata de nuestro Blázquez en el Sínodo de la Palabra y la quiere desmenuzar algo que se pueda chupar, se encuentra con un discurso de obviedades con fallos clamorosos teológicos y teleológicos. Ni fu ni fa, ni bueno ni malos sino todo los contrario.Pero se ha cubierto el expediente, el auditorio contento por la circunspección contentadiza y a seguir tirando.
O sea aquello que tanto conviene a los obispos aunque no se lo crean, igual que al resto de mortales que no somos obispos ni nada parecido: Ojalá fueras frío o caliente.
Una foto de dos que lo dice todo. Hacen recordar la estampa de los toros de la ganaderia Mihura. mansos por fuera para quien les puede hacer frente y cornada seguro para quien se descuide que se mantenga a su alcance.. No parecen ser prototipos de coherencia ni de consistencia de principios sobre todo el Rajoy que digno de Marx Groucho tiene sus ideas, pero también tiene otras.
Claro es que esta carencia de hombres de altura no es achaque de ahora. Se vió en Tarancón y sis taranconianos politizados en la política consensuable cívico-religiosa hasta la coronilla que ya no tienen. Suma y sigue por todo lo que se escucha, pero a dosis crecientes y aceleración geométrica.
Que don Ricardo Blázquez es una bellísima persona y un hombre delicioso lo saben hasta las piedras.El problema es que tan altas virtudes son condición necesaria pero no suficiente para un cardenal de la Iglesia.Seamos sinceros: don Ricardo es adorable, pero no fue ni es ni será un buen prelado.Le faltan dotes esenciales: autoridad, firmeza, contundencia y capacidad para defender a ultranza los principios no negociables.No me atrevería a llamarle cobarde: es tan buenazo que sabe mal decir cosas como estas.Aclaro que, peores que él, hay en el epicopado español más de una docena.
Puribus naturalibus (ambos en ablativo, como corresponde) y no uno en ablativo y otro en nominativo. Se ve que su fuerte no es el latin.
El artículo es bueno y educado. Pero creo que aquí nadie duda que a cierta edad la ingenuidad y el buenísimo son incompatibles, en realidad es aversión a la cruz. Y por eso los masones les tienen tomada las medida a los obispos, ambos cojean del mismo pie: se les compra fácil (o con dinero, como hizo Zapatero, o también con miedo, como hacen todos)
No es extraño que un partido con principios catolicos no tenga apoyo, porque la verdad repele al que se complace en su mentira: cuantos catolicos en España hay que no estén en pecado mortal, al menos formalmente?, unos pocos de miles? El mal menor hace tiempo que se demostró la gran tomadura de pelo, mal menor para cien mil inocentes asesinados al año? En realidad el enorme paro en España no es una lacra sino el tiempo ocioso necesario para que podamos reparar semejantes ofensas a Dios, la iglesias deberían estar abarrotadas de parados el día entero, en duelo por el constante genocidio. Que si el PP repara los desaguisados económicos de los rojos…y que derecho tienes a comer lentejas sin haber reparado antes las ofensas? Mas lentejas para seguir ofendiendo a Dios con la barriga llena?
Por lo visto, lo primordial para bastantes Obispos es que no haya partidos políticos cristianos. Lo dijo claramente el actual Arzobispo de Oviedo, Mons. Sanz Montes: «No queremos partidos cristianos, sino reconocer a los cristianos en los partidos» (en los partidos no cristianos, se entiende, entonces): http://infocatolica.com/?t=opinion&cod=10984
Una postura sin pies ni cabeza, que nos ha traído a donde estamos. Y ojo, no crean: En eso siguen. Al parecer, lo malo para la Iglesia y para España es que haya partidos cristianos. Pues nada, a disfrutarlo.
Justo es decir que no todos los Obispos son así. De hecho, Mons. Reig Pla, en su carta pastoral «Llamar a las cosas por su nombre», denuncia lo siguiente:
«Con afecto hacia las personas y con dolor, también debo decir que, en ocasiones, algunas instancias de la Iglesia Católica que camina en España no han propiciado, más bien han obstaculizado, la posibilidad de que aparezcan nuevos partidos o plataformas que defiendan sin fisuras el derecho a la vida, el matrimonio indisoluble entre un solo hombre y una sola mujer, la libertad religiosa y de educación, la justicia social y la atención a los empobrecidos y a los que más sufren: en definitiva la Doctrina Social de la Iglesia».
Así nos va en España como nos va. Dios le bendiga por su valentía, Mons. Reig Pla.
D. Frco José, llevo tantos años rumiando estas cosas que cuando se me ha presentado la ocasión no he podido contenerme. Si entiende que alguno de mis comentarios es ofensivo, no dude en borrarlo. Las pasiones y el cabreo no son buenos consejeros a la hora de escribir.
Me indigné hace muchos años cuando comprendí la clase de políticos que nos mandaban y ahora me indigno al comprobar la clase de obispos que tenemos. Que la casta sea una colección de inútiles parásitos lo sabemos porque se meten en ella los que no sirven para otra cosa. Pero se supone que los obispos son lo mejor de lo mejor, entendiendo por los mejores, los curas. Pero resulta que no, que son tontos de remate.
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A veces, cada vez menos, se ve a un religioso vivir en su mundo al margen de todo, dedicado a sus oraciones y a ayudar a los necesitados. Y se dice: es un santo. Y es normal que no se entere de lo que ocurre en el mundo. Pero el resto de los clérigos, sí están en el mundo y deben saber como funciona. Eso de cándidos como palomas y astutos como serpientes no va con ellos, como tantas cosas que dijo el Maestro. Ellos se limitan a ser, como poco, bobos.
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Cuarenta años mirando por el dinero. Justo por lo que no debieron mirar. porque la enseñanza «católica» no es más que una fábrica de ateos y una forma de ganar dinero, poco, encima de todo y mantener a un personal, que no diré que ocupan el puesto de forma indebida, pero que se limitan a las cuestiones meramente académicas.
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¿Y qué nos queda? ¿Por qué han luchado estos cuarenta años? ¿Por unos míseros billetes? Porque encima es que se trata de una miseria. Y si lo comparamos con lo que les robaron en las desamortizaciones la miseria es abrumadora. Pero en estos cuarenta años nadie ha mencionado el patrimonio que les robaron y que ese dinero que les daban no era más que una compensación por ello. Al final todo se ha perdido y sólo queda lo que les damos en la renta. Como administradores de dinero no tienen precio.
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Pero lo más importante es que han creado confusión en los católicos y muchos se han retirado discretamente. El católico de misa diaria o dominical no sabe , por ejemplo, la maldad del aborto, porque no se habla de eso. Como no se habla de tantas cosas. Se habla del amor. Pero se habla también del amor, que cada cual justifica los disparates en nombre del amor.
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Msr Blazquez es inane y parece tonto. Que se llegue a decir eso de un cardenal indica hasta donde hemos caído. Pero tranquilos, aún caeremos más bajo. Yo le diría al Msr Omella, que el problema no es ir descalzos, muchísimos santos han ido descalzos, el problema es que no se llevan almas a Dios y eso sí es grave.
Mañana en la catedral de Granada Don Javier anunciará que se va. Las campanas repicarán solas.
«Roma no paga a traidores». Comenzaron su labor hace 40 años y la función ya va a concluir. Ya no son necesarios. Ahora, cobardes, vienen llorando como Boabdil. Se les terminan las lentejas. No quisieron sembrar para cosechar. Suponía esfuerzo y valentía. Les traía sin cuidado aquello que tenían la obligación de defender. Ahora… prepare las alpargatas, Omella.
Yo creo que, si finalmente gobiernan el PSOE y Podemos, la Conferencia Episcopal terminará entendiéndose con ellos.
Uno queda asombrado del cinismo que muestran estos obispos ante el silencio «colaboracionista» que han mantenido durante gran parte de la llamada «transición». Se muestran sorprendidos de la situación politica actual, cuando en realidad, son los pastores de la Iglesia quienes han traicionado a España. No hay más que ver las declaraciones que hacen algunos de estos obispos a los medios de comunicación para darse uno cuenta que estan ideológicamente más cerca de un socialismo marxista, que de los principios evangélicos. ¿A quien quieren engañar?
D. Francisco descalzos no van a ir, porque esos curas no son tontos se pasan al la voz de ¡ya¡ a militar en los partidos políticos. ¡no sea usted ingenuo¡ Los otros tampoco irán descalzos pues cuentan todavía con buenos feligreses que estarán encantados de que se hayan ido los lobos difrazados de ovejas, y al final tendremos misas como Dios manda y buenas homilías. Mire por donde igual al final la iglesia en su pobreza se depura.