por La Cigüeña de la Torre | 30 junio, 2015
Don Juan José Asenjo, arzobispo de Sevilla ha procedido a realizar numerosos cambios en la archidiócesis. http://www.archisevilla.org/nombramientos-y-traslados-en-la-archidiocesis-de-sevilla/ No tengo nada que objetar. Es responsabilidad del arzobispo Y hombre meticuloso como es él supongo que habrá meditado cuidadosamente los cambios para el mejor servicio a la archidiócesis. Mi conocimiento del arzobispado es puntual y la inmensa mayoría de los nombres de la relación me son absolutamente desconocidos. Pero sí me encuentro, o mejor dicho no encuentro, un nombre que me alegra no encontrar. Don Juan José ha nombrado un delegado de pastoral juvenil lo que supone el cese del anterior. Tengo buenas referencias del nombrado que me dicen se desenvuelve muy bien en ese sector muy importante y a la vez complicado. Y el desaparecido fue aquel cura que metió a la archidiócesis en un buen lío al ir a la superioridad con el cuento de un suicida por culpa de otro compañero sacerdote. Y nunca mejor dicho lo de cuento pues no había suicida, y por tanto tampoco cadáver, el sacerdote acusado no era responsable de nada, el acusador un correveidile de tres al cuarto y la archidiócesis en ridículo. Pasado algún tiempo el fantaseador deja un cargo que evidentemente le venía muy grande. ¿Qué eso debió ocurrir antes? Es posible. Pero no soy nadie para marcarle los tiempos a Don Juan José. Lo importante es que el tiempo llegó. Lo de creerse aquella fantasía moruna e ir con ella a la autoridad contra un compañero inocente de todo, que incluso llegó a estar suspendido a causa de un muerto que estaba más vivo que el denunciante, dejó muy marcado al acusica.
Vamos a ver si nos aclaramos. El Seminario Menor de Sevilla tiene su sede en el complejo diocesano (Casa de ejercicios espirituales, cursillos de cristiandad) de los Sagrados Corazones, en San Juan de Aznalfarache. Durante la Expo 92 se reatauró un edificio para usarlos como alojamiento de turistas y visitantes, y ahí es donde se ha instalado en Seminario Menor. Los alumnos del seminario, unos estudiantes de la ESO y otros pocos de Bachillerato, acuden a clase, los primeros, a un colegio concertado regentado por las religiosas teresianas de san Enrique de Ossó. Y los de Bachillerato creo que van a un instituto público. Por tanto, el colegio de las teresianas donde acuden los seminaristas menores no tiene nada que ver con las religiosas del Sagrado Corazón.
Es justo decir que en el colegio concertado de las teresianas de San Juan de Aznalfarache (Sevilla) no hay ningún profesor que esté casado o sea pareja sentimental con otro de su mismo sexo. El informante debería rectificar por razón de justicia.
Yo tuve un profesor, rector de un seminario, que al parecer pasaba mucho tiempo en la capilla meditando, del que sus seminaristas decían que maquinaba sus maldades ante el Sagrario. Pues parece que algo parecido se podría decir, mutatis mutandi, de Juan José Asenjo. En donde la maldad estaría sustituida por la irresponsabilidad. Porque aunque los nombramientos sean responsabilidad suya y fruto de meticulosa meditación, de ahí no se sigue necesariamente que estén hechos responsablemente y con criterio. Por ejemplo, no parece de mucha sabiduría y prudencia pastoral nombrar responsable de una delegación (la de pastoral de juventud) a un sacerdote que recibió el sacramento del Orden hace dos días (por muy buenas referencias que se puedan tener de él; y ello por la sencilla razón de que “gratia non tollit, sed perficiam naturam”, y a este sacerdote, evidentemente, le falta la experiencia y el rodaje necesario). O nombrar vicario episcopal a un sacerdote que lleva ordenado dos o tres años. Y, para más inri, en sustitución de uno, favorito del obispo auxiliar, que fue nombrado vicario en las mismas circunstancias, y que, tras dos años, habiendo comprobado su ineptitud, es removido del cargo y enviado a Roma para darle una salida digna a él y a quienes le nombraron. Con semejante criterio y responsabilidad, luego no nos podemos extrañar de que pase lo que pasa, y de que, en palabras del mismo arzobispo, “ponga un circo y le crezcan los enanos”.
De D. Santiago González no entiendo que haya pedido disculpas y haya retirado la publicidad del libro «Comprender y sanar la homosexualidad», de Richard Cohen, que apareció en la página de su parroquia. ¿Ha sido por iniciativa propia o se lo han ordenado?
Comprendo que la situación eclesiástica de D. Santiago es actualmente muy delicada y no le conviene añadir más polémica, pero hubiera sido más valiente mantener la publicidad del libro.
¿Dónde está don Santiago González?
¿Que pasa con la Diócesis de Málaga? Hay cambios, unos fieles quieren hablar con alguien del Obispado y nadie les recibe, hay algunos escándalos entre sacerdotes que claman al cielo y ¿el Obispo callado?¿ El obispado ya de vacaciones? ¿Nadie en la Nunciatura sabe el lío que hay montado? Y por una vez no son ni los gays ni las cofradías, son el clero contra el clero, la curia contra la curia. ¿Donde esta d. Jesús Catalá? ¿Sabe Usted algo d. Francisco?
El aceite esta muy caro,
Y hay quien lo pierde y lo gasta…
Y no hay quien les diga !basta!
Por no aparentar ser raro…
Pero Bergoglio,preclaro,
En laudato si,devasta :
Quien pierde aceite malgasta,
Y malgastar,es pecado….
Y así,por otro camino,
El «teólogo» pampeño,
Llega a una igual conclusión:
Ser forofo del pepino
Es un perpvertido empeño
…pues DERROCHA el maricon….
Pues ya que está con los cambios más le valdría replantearse el colegio de los seminaristas menores que pertenece al Sagrado Corazón (de donde ayer leímos terribles escándalos en Madrid) y en el que los seminaristas de Sevilla reciben docencia, por ejemplo, de un señor casado con otro señor… La archidiócesis no puede estar en connivencia con esa situación.
No sé si el sonoro – hasta por internet se siente la rimbombacia de un comienzo de artículo tan definitivo – «Don Juan José Asenjo», tronan los tambores, empieza un anuncio grande, sonoro y hasta se siente el eco por aquí que estoy lejos; pueda esconder con tal pompa, unos cambios insignificantes en comparación con la miseria que esconde este arzobispo, que nos sigue privando a miembros de la Iglesia y buscadores de la verdad en el mundo entero, de la sana doctrina de una santo sacerdote de NSJC.
Con semejante rotundidad sonora inicial «Don Juan Jose Asenjo», crei que el blogger nos iba a anunciar la conversión de monseñor, pero no ha caido esa breva. Que si se cae de la lista uno que le ha hecho pasar verguenza ante palacio a monseñor, y otras hierbas menores de palacio, pero es lo que le priva al arzobispo qué le vamos a hacer, seguir rezando por su conversión. Pero antes rezar por el santo injustamente castigado, bueno, son pruebas de santidad que dan sus frutos.
Al sacerdote acusado falsamente le acaba de surgir otro problema, parece que tiene el «cenizo» este hombre.
http://www.diariodesevilla.es/article/sevilla/2062460/parroco/bellavista/asegura/articulo/se/publico/sin/su/conocimiento.html