Alberto Suárez Inda es un Cardenal electo y Arzobispo emérito de Morelia (México).
Alberto Suárez Inda nació en la ciudad mexicana de Celaya, en Guanajuato, un 30 de enero de 1939. Tras sentir su llamado a la vocación sacerdotal, cursó sus estudios de humanidades en el Seminario Diocesano de Morelia en 1953.
La formación de Alberto Suárez Inda
Cinco años más tarde, en 1958, continuó con su formación en la ciudad de Roma, Italia. Allí estudió Filosofía y Teología en la Universidad Gregoriana, y fue también alumno del Colegio Pío Latino Americano.
Finalmente se ordenó sacerdote en su ciudad natal un 8 de agosto de 1964. Años más tarde recibía la Ordenación Episcopal, un 20 de diciembre de 1985.
Participó en la IV Conferencia General del Episcopado Latinoamericano en Santo Domingo y en el Sínodo de América. Fue Presidente de la Comisión Episcopal de la Previsión Social del Clero y Presidente de la Comisión Episcopal del Clero en reiteradas oportunidades.
Arzobispo de Morelia en 1995
El 20 de enero de 1995 fue designado octavo Arzobispo de Morelia. Tomó posesión de la Arquidiócesis el 23 de febrero de 1995 y recibió el palio arzobispal de manos del Papa San Juan Pablo II el 29 de junio de 1995.
Fue nombrado Vice-Presidente de la Conferencia Episcopal Mexicana, durante la LXXVI Asamblea Ordinaria de la CEM para el Trienio 2004-2006; fue reelecto para el trienio 2006-2009.
También recibió el cargo de Presidente de la Comisión del Episcopado para la Conmemoración del Bicentenario de la Independencia y el Centenario de la Revolución. El 5 de noviembre de 2016 el Papa Francisco anunció la renuncia canónica de Monseñor Suárez como arzobispo de Morelia.
Cardenalato
La llegada del mexicano al colegio cardenalicio supuso una gran sorpresa para los católicos, ya que la diócesis de la que proviene nunca antes había tenido un cardenal. En aquel momento, Federico Lombardi, vocero de la Santa Sede, comentó que se trataba de un gesto de Su Santidad con México, debido a que la zona de influencia de la arquidiócesis de Morelia ha sido bastante golpeada por la violencia.
Francisco, parece ser, pidió a Suárez que resistiera a sus deseos de retirarse, para poder asegurarse así que podría contar con la creación de su purpurado.
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