| 18 diciembre, 2016
El facebook oficial de Radio Vaticana en alemán publicó una imagen que caricaturiza al Papa Francisco y a Lutero.
El facebook oficial de Radio Vaticana en alemán publicó el pasado 6 de noviembre una imagen que caricaturizaba al Papa Francisco.
Dicha página fusionó la cara del Santo Padre con la imagen del cuadro de Lutero que se encuentra en la Galleria degli Uffizi (Florencia). Vean:
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quizá pensaban en Martin luther King, no seamos siempre tan enrevesados, aparte que nunca sobre la bandera del HUMOR que para malos humores vamos ya todos sobrados……
Se han pasado de la raya.
A mí me parece la representación más fiel que nadie haya hecho de Bergoglio. Le viene como anillo al dedo a alguien que prefiere celebrar a Lutero antes que a Santa Teresa.
Curioso también que llamara «vieja» a Santa Teresa pero no a Lutero, que es aún más viejo.
Más que «elucubrar excepciones a preceptos negativos de la ley natural divinamente impuestos y sin excepciones respecto a conductas intrínsecamente inmorales», dice usted,
afirma que «esa conciencia puede reconocer no sólo que una situación no responde objetivamente a la propuesta general del Evangelio»
sino que «También puede reconocer con sinceridad y honestidad aquello que, por ahora, es la respuesta generosa que se puede ofrecer a Dios, y descubrir con cierta seguridad moral que esa es la entrega que Dios mismo está reclamando en medio de la complejidad concreta de los límites»
Habría que distinguir actos acordes a la naturaleza que pueden llegar a alcanzar una dimensión sobrenatural de aquellos, que bajo ningún aspecto, podrían ser catalogados así. Un ejemplo sería el de una pareja, compuesta por hombre y mujer, con años de convivencia e hijos que recibe el sacramento del Matrimonio y que no decidió hacerlo antes por una mala experiencia al respecto. O el de un bautizado que acude a un servicio religioso no católico por no haber una parroquia en la región donde vive. O el de una institución de la Iglesia que sólo muestra la bondad de sus miembros para no producir escándalo. ¿O va usted a negar que el roba 5 en vez de robar los habituales 20 no hace menos mal que si siguiera robando 20?. Existe un orden moral pero no está en manos del hombre, ni su definición, ni su completitud. Muchas veces acabar con un vicio tiene como consecuencia terminar con muchos otros.
Respecto a Lutero habría que distinguir su rebelión contra el poder sobre la conciencia del dogma y enseñanzas de la Iglesia de aquella otra contra el poder, puramente humano, de los que exigían la cumplimentación de la norma canónica por motivos ajenos a la salvación del alma. En el primer caso hablamos de un hereje y en el segundo de un reformador. El mandamiento sobre la conciencia, la verdad, no admite diálogo, léalo en el Evangelio, pero su aplicación, la bondad, es precisamente de lo que trata el resto de él.
En AL no se discute la verdad revelada pero sí se cuestiona la bondad de su realización en el mundo que nos ha tocado vivir. -Haced lo que ellos dicen pero no hagáis lo que ellos hacen-. AL viene en busca de un pecador muy particular -el doctor de la Ley- a quien no se critica por su conocimiento de la Ley sino por ocupar el puesto de Sumo Legislador que es Aquél que no está sujeto a la Ley. El bien, la gracia, sobreabunda sobre el mal, el pecado, y no puede negarse que el origen de toda gracia y de todo bien procede de Dios. Todo carisma viene del Espíritu y nunca se le niega al pecador ni a pesar de su pecado. Incluso el más recalcitrante ateo puede ser, y lo es, fiel a su matrimonio.
El problema está en querer hacer del cristianismo una norma de vida y no una vida de gracia. ¿Cuántos matrimonios, no canónicos, responden a la esencia cristiana del mismo con mayor veracidad que otros que sí lo son? ¿Cuántos no católicos asisten maravillados a la liturgia de la Iglesia frente a la acedia de los qué sólo van porque es obligatorio? Todo esto no resta ni un ápice a los que lo hacen por norma si su disposición es buena porque la norma es sólo un medio pero la predisposición condiciona el fin. Se puede señalar lo que está mal o lo que es malo pero la religión cristiana reconoce de modo especial lo que está bien o es bueno hasta el punto que el mismo Jesucristo se sorprende, y a todos debería sorprendernos su actitud, cuando lo percibe. Digamos, en estas fechas que comienzan, que nadie fue obligado a ir a ver nacer al Niño Jesús en Belén.
Los sacramentos son el punto de encuentro infalible con la gracia así que habrá que buscar en otra parte el porqué de su no eficacia en la vida ordinaria del cristiano. Nadie duda de su Bautismo porque lo recibe, normalmente, a una edad en que no se tiene uso de razón, y por ende, cuando todavía no es posible el pecado personal.
Entre broma y broma la verdad se asoma. (proverbio mejicano).
En resumen, don Carlos: (1) No hace Vd. otra cosa que defender en su comentario la tercera proposición condenada por Finnis y Grisez, a saber: “No existe ninguna regla moral general que no admita excepciones. Incluso los mandamientos divinos que prohíben clases específicas de actos están sometidos a excepciones en algunas situaciones”. (2) Además, niega Vd. la esencia misma del sacramento del matrimonio, al escribir: “¿Cuántos matrimonios, no canónicos, responden a la esencia cristiana del mismo con mayor veracidad que otros que sí lo son?”. Lo que propugnan Vd. y los demás panegiristas de Amoris Laetita es la irracionalidad y el subjetivismo absoluto en materia de religión. Van Vds. incluso más lejos que el propio Lutero.
Les ha aflorado el subconsciente. Iglesia bergogliana : iglesia luterana.
Pues bravo por ellos, porque se auto descubren, muestran a las claras cuáles son sus intenciones. Lutero-Bergoglio, Bergoglio-Lutero, tanto monta, monta tanto. Pues gracias porque así, los que todavía andan despistados y no se creen «de que va» este señor que gobierna la Iglesia, ahora ya lo saben.
Nada bueno se puede esperar para la Iglesia Católica de un Bergoglio anti cristo, anti religión católica, sino todo lo contrario: perjudicar todo lo posible y algo más a la Iglesia Católica Apostólica y Romana.
Creo que queriendo hacer una caricatura les ha salido un retrato realista y psicológico. No hay mejor representación del trilero porteño riendose de todos los católicos.
Y pensará que tambíen puede reirse de Dios. Este hombre no cree en nada.
¡¡¡Y lo verán así!!!
Han dado en el clavo. Una imagen vale mas que mil palabras
Ovetensis,
¿Les negaría el sacramento a quienes así se hubiesen comportado? ¿Se lo administraría a quien hubiese disfrutado de la sexualidad con otros distintos antes de casarse? Con mala experiencia no me refiero a un matrimonio anterior, evidentemente. En cuanto a la veracidad le aseguro que entre un matrimonio no adúltero entre sintoístas y otro adúltero entre cristianos me quedo con el primero.
Todos los mandamientos son «remediables» excepto el sexto y el quinto, en grado máximo, y lo que está en juego con el matrimonio cristiano no es algo que pertenezca al ámbito natural sino al sobrenatural. Me refiero al orden sacerdotal. ¿Cree que fue el CVII el que hizo abandonar a tantos el sacerdocio? Compruebe las edades de quienes lo hicieron y descubrirá la razón. A los que cometen adulterio habría que recordárselo sea con la legítima o, si procediese, en una nueva unión.
La Ley ya existía antes de la Encarnación. Para cumplir con la Ley no era necesario que Dios se hiciera hombre. ¿Vosotros sois cristianos? ¿Es posible la conversión para quien desee reconciliarse con Dios o la norma es más importante? Aquí lo único que asoma es el rabo de los que quieren hacer del catolicismo una casta vedada a todos aquellos que no se conforman a la norma. Salid de la sacristía y conoced mundo porque eso es lo que os hace falta.
¿Con qué norma cumplió san Pedro para ser el vicario de Cristo? ¿Qué normativa se impuso sobre Juan para no morir? ¿A qué norma responde pagar el mismo salario a los de la primera hora y a los de la última? ¿Qué garantía da una norma si no es en orden a un fin superior? Y no, no hay excepciones a la norma moral una vez conocida. Lo que hay son diferentes tiempos y, eso, no está en manos del hombre.
A un Papa se le reconoce por ir a buscar la oveja perdida y no quedarse pastando con las noventa y nueve que están a resguardo.
En la iglesia católica están siendo desplazados sacramentos y dogmas de fe y razón, ambos son complementarios e inseparables, por un falso ecumenismo a ultranza, debilitandola de su concepción original fundada por Jesús Cristo.
1. Eliminación de la transustanciacion en las eucaristía, después de la última cena. (Pag. 72. Num. 154) (Eucaristía. 16).
HACED ESTO, EN MEMORIA MÍA. Palabras con sentido inequívoco de continuidad. » De cierto, de cierto os digo: Si no coméis la carne del Hijo del Hombre, y bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros».
Este documento fue firmado por el papa Francisco en el encuentro con los luteranos en 2016.
2. Poner en duda la indisoluble unión matrimonial católica y la excomunión de los que rompen dicho pacto.
3. La misericordia de Dios perdonará todos tus pecados, independientemente de las veces que los cometas y de las circunstancias. Dinamita y vacía el sacramento de la reconciliación o penitencia. El acto de contrición de no volver a pecar o de intentarlo sinceramente.
Para que la persona sea salvada tiene que seguir a Jesús Cristo y a su iglesia, con sus dogmas y sacramentos de fe y razón. Éstos están en consonancia con las leyes naturales, morales y de Dios. Repito, es la persona quien se tiene que adaptar a la iglesia, no al revés, puesto que ella se rige por leyes intemporales.
El papa Francisco pretende imponer la teología de la liberación en la iglesia católica.
Misericordia et mísera. Papa Francisco.
Jesús dice: «Mujer, ¿dónde están tus acusadores? ¿Ninguno te ha condenado? […] Tampoco yo te condeno. Anda, y en adelante no peques más» (vv. 10-11). De este modo la ayuda a mirar el futuro con esperanza y a estar lista para encaminar nuevamente su vida; de ahora en adelante, si lo querrá, podrá «caminar en la caridad»
El papa Francisco deja la posibilidad de que ella pueda o no seguir pecando (si lo querrá). Dios, según él, la perdona a pesar de que vuelva a pecar, esa es la misericordia del papa Francisco. Esa interpretación raya la herejía y según mis cuentas van 3. La no transustanciacion en la eucaristía actuales y sobre el matrimonio.
Jesús Cristo lo dice con la absoluta convicción de que no lo volverá a hacer, porque sino su absolución tampoco es efectiva, es un intercambio ante un sincero arrepentimiento. De ahí el sacramento de reconciliación o penitencia.
La misericordia de Dios perdonará todos tus pecados, independientemente de las veces que los cocometas. Dinamita y vacía el sacramento de la reconciliación o penitencia. El acto de contrición de no volver a pecar o de intentarlo sinceramente.
P.D. No es anecdotico que se inspire en Marx, para el título. Miseria de la filosofía.
Estoy con todos los que dicen que queriendo hacer una broma, a lo tonto. ha reflejado fielmente la realidad. Por desgracia.
Carlos,
(1) “¿Es posible la conversión para quien desee reconciliarse con Dios o la norma es más importante? “. Quien quiera reconciliarse con Dios, pretenderá seguir los preceptos divinos, digo yo. De nuevo sostiene Vd. la doctrina protestante de que los mandamientos son imposibles de cumplir. Yo prefiero seguir la opinión de San Agustín, según el cual Dios no manda imposibles.
(2) “Aquí lo único que asoma es el rabo de los que quieren hacer del catolicismo una casta vedada a todos aquellos que no se conforman a la norma.” Si la norma emana de los preceptos divinos, los católicos habrán no sólo de conformarse, sino de aceptar gozosamente la norma. (Juan 14, 21: “El que recibe mis mandamientos y los cumple, ese es el que me ama”)
(3) “Todos los mandamientos son “remediables” excepto el sexto y el quinto, en grado máximo”. Esta querencia por el sexto mandamiento me parece también filoprotestante. Toda contravención de los mandamientos entraña un acto intrínsecamente malo .
(4) “La Ley ya existía antes de la Encarnación. Para cumplir con la Ley no era necesario que Dios se hiciera hombre”. Ciertamente que la Ley existía. Pero Nuestro Señor Jesucristo ha dicho explícitamente que no ha venido a derogar la Ley (Mateo 5, 17 “No penséis que he venido para abolir la Ley o los Profetas: yo no he venido a abolir, sino a dar cumplimiento»).
(5) “¿Con qué norma cumplió san Pedro para ser el vicario de Cristo? ¿Qué normativa se impuso sobre Juan para no morir?”. Está Vd. confundiendo los términos de la cuestión. Si con estos ejemplos quiere argumentar con Lutero la justificación por la sola Fe, vamos muy mal.
(6) “Y no, no hay excepciones a la norma moral una vez conocida. Lo que hay son diferentes tiempos y, eso, no está en manos del hombre.” Introduce Vd. la paradoja del progreso en la moral. Si la verdad moral sólo fuera “revelándose” paulatinamente, nunca alcanzaríamos a conocer realmente la verdad, puesto que nuestro juicio sobre el acto moral X a día de hoy sería más imperfecto que el que podamos tener mañana, y mañana más imperfecto que pasado mañana, y así ad infinitum. No existiría pues, una moral y una ley natural directamente alcanzables mediante la razón.
Imagino que mi problema es seguir la “decadente escolástica” tan denostada últimamente.
(1) «De nuevo sostiene Vd. la doctrina protestante de que los mandamientos son imposibles de cumplir»
¿Dónde digo eso?
(2) «Si la norma emana de los preceptos divinos,»
Toda norma que emana racionalmente de los preceptos divinos es susceptible de ser modificada. La Ley no cambia pero la norma sí. En los primeros tiempos el bautismo se administraba sólo a los adultos. El ayuno eucarístico era de un día entero en tiempos anteriores. Y tantas otras normas respecto a los sacramentos y la vida del cristiano que se han ido adaptando a los tiempos.
(3) «Esta querencia por el sexto mandamiento me parece también filoprotestante»
No evada la pregunta sobre las relaciones prematrimoniales diversas antes de casarse porque es su tema: la norma. ¿Qué puede hacer quien comete adulterio o quita la vida para remediar la pena causada? La fama o lo robado se puede resarcir y un verdadero padre siempre perdona pero el adulterio y el homicidio marcan de por vida aunque no salgan a la luz pública.
(4) «Ciertamente que la Ley existía. Pero Nuestro Señor Jesucristo ha dicho explícitamente que no ha venido a derogar la Ley»
Es decir, es Él quien da cumplimiento a la Ley y no el hombre porque la norma no es la que nos salva. Véase (2)
(5) «Está Vd. confundiendo los términos de la cuestión.»
No, es usted quien no comprende que Dios es un Dios de vivos y no de muertos. Las pocas leyes divinas son necesarias para no morir pero no son suficientes para ganar la bienaventuranza. De no ser así, los justos no hubiesen tenido que ser rescatados tras la Resurrección.
(6) «Introduce Vd. la paradoja del progreso en la moral. Si la verdad moral sólo fuera “revelándose” paulatinamente»
La verdad moral no se revela igual a un niño que un hombre. La verdad no sólo existe en la mente y por ello hay cuestiones que hoy no se pueden plantear y otras que han perdido su sentido (la falsificación de la moneda de plata u oro). Usted de escolástico tiene más bien poco.
Aunque con esta afirmación queda todo dicho: «Esta querencia por el sexto mandamiento me parece también filoprotestante».
Un protestante es, ante todo, un observante de la ley en quien se cumple aquello de «quien la hace, la paga» y no precisamente en lo relacionado con la castidad.
No sé si este episodio está relacionado con la mula de Balaam…. o no.
Una imagen vale mas que mil palabras. Han dado en el clavo. Supongo que a Bergoglio Le gustará es un admirador de la reforma de Lutero