Planned Parenthood intenta lavar su imagen de ‘vendefetos’

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Cáncer, asma, diabetes… son algunas de las enfermedades que la multinacional del aborto asegura tratar dentro de sus centros, obviando que al mismo tiempo están terminando con la vida de millones de niños inocentes y lucrándose con la posterior venta de sus órganos.

Planned Parenthood ha hecho público un vídeo en el que “recuerda” que la multinacional del aborto -responsable de la muerte de millones de niños inocentes y traficante de órganos de bebés- ofrece también un servicio médico, además de realizar abortos.

De esta manera, la multinacional se desvincula de su imagen de “vendefetos” para que la sociedad americana deje de asociar su nombre solamente con el aborto. En el vídeo, hombres y mujeres afirman acudir a las clínicas para someterse a otras pruebas médicas que nada tienen que ver con el aborto, una actividad que según alega la propia multinacional, se lleva a cabo solamente en el 3% de los casos.

Cáncer, asma, diabetes…son algunas de las enfermedades que Planned Parenthood asegura tratar dentro de sus centros, obviando que al mismo tiempo están terminando con la vida del no nacido y lucrándose con la posterior venta de sus órganos.

Pueden ver el vídeo pinchando en el siguiente enlace:

Planned Parenthood – :30 from Wexley School for Girls on Vimeo.

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Comentarios
1 comentarios en “Planned Parenthood intenta lavar su imagen de ‘vendefetos’
  1. Yo sigo insistiendo en el comentario que publiqué hace unos días: Es necesario despertar a la sociedad española del drama del aborto y romper la «cortina de silencio» que lo cubre. Ya apenas ningún medio de comunicación habla sobre el tema (parece como si quisieran convencer a todos de que es «un tema ya superado», de que los que seguimos defendiendo la vida somos unos «reaccionarios», anclados en el pasado… ) hasta los católicos parece que nos hubiéramos acostumbrado a ello.

    Al lado de mi casa hay un abortorio (no voy a decir su nombre), rara vez me atrevo a pasar delante de él. Veo, las veces que lo hago, al otro lado de la calle, a los hombres que esperan a que sus mujeres/parejas/novias terminen de «resolver el problema», con ese ademán de indiferencia, de que » la cosa no va conmigo», como si fuera igual que ir a hacer una gestión cualquiera…

    La «banalidad del mal» creo que lo llaman.

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